Morgan. Sala de reuniones del hotel The Langham Huntington, Pasadena, California, Principios de Octubre de 2024. - “No se preocupe, señor Osman, no creo que el señor Sezer se acuerde, y total para la víctima implicada en los hechos, eso ya está más que superado, disculpen por la interrupción, sigamos con esta entrevista.”- dije al fin, controlando muy difícilmente, mi voz, he intentado parecer profesional. La verdad era que me costaba mucho, casi una vida, soy del tipo de persona que primero estalla, y luego evalúa las consecuencias, no es una muy buena filosofía de vida, pero eso es algo que aprendí en mi barrio, desde muy pequeña, la supervivencia del más fuerte. Justo por eso, y porque ya no era esa chica de barrio, no iba a dejar que todo saltara por los aires, por estar ante la persona que tanto daño hizo a mi hermana. Pero claro, esto no era por mí, era por Clara y Mark, para que ellos encontraran la felicidad, así que eludí la mirada interrogativa e inspeccionaría de ese ce
Clara. Casa de Mark y Clara Goodman, Pasadena, California, Octubre de 2024. -” ¿Estás seguro de que quieres irte un año a estudiar a los talleres tecnológicos de la fundación Osman?”- le pregunté por enésima vez a mi hijo. Y por enésima vez, mi hijo sólo asintió, sin apenas mirarme, mientras continuaba liado con su ordenador, haciendo, vete tú a saber qué, pensando que eso, era una respuesta suficiente, exacta y precisa, que era lo único que yo necesitaba saber. Este es el gran problema que yo, como muchas madres y padres de un niño con las capacidades de Mark, teníamos a la hora de enfrentar, la mente, y las acciones, incomprensibles para nosotros, de nuestros hijos, ya que no estábamos tan preparados como teníamos que estarlo, nada te prepara para ello. Pero la verdadera intención en esa pregunta, que yo le hacía insistentemente, no era tanto por intentar comprenderlo, y no suponerle un cambio drástico en su rutina programada, sino más bien, era buscar alguna excusa que me ayud
Azize. Suite presidencial del hotel The Langham Huntington, Pasadena, California, Principios de Octubre de 2024. -” Buenos días, señor Osman.”- de pronto saltó este mensaje que se reflejó en una pequeña ventana de la pantalla de mi ordenador, desde la red oscura de internet, mientras yo me encontraba revisando otro de mis proyectos en China. -” Vaya, otra sorpresa. Al parecer eres mejor que muchos de técnicos informáticos de seguridad que tengo en plantilla. Entras cuando quieres.”- le dije un poco molesto de que aún esos inútiles, no hicieran bien su trabajo. -” No les eche la culpa a ellos, se puede decir que soy muy bueno, creo que sólo usted ha conseguido cazarme, aunque le prometo que nunca accederé a nada que tenga que ver con su grupo empresarial, más bien es con su vida privada con quien me involucro, y ambos sabemos por qué.”- me dijo, y no puede evitar sonreír, era un adversario estupendo, quizás algún día volvería retarle a otro duelo. -” Y bien si me has buscado, no c
Haul. Aeropuerto Internacional de los Ángeles LAX, Los Ángeles, California, Principios de Principios de Noviembre 2024. -” No sé qué castigo es el que hemos cometido, siempre acabamos solucionado los embrollos de nuestro amado jefe, ¿No crees Burak?. De alguna forma siempre se libra de todo, ¡Maldito Hombre de Hielo!”- le dije al asistente de mi mejor amigo, y jefe. -” Creo recordar, señor Sezer, que fue usted el que se autoinvitó a recoger a la futura señora Osman, al hijo del presidente, y a los invitados que vienen con ellos, pese a que el Presidente Osman lo amenazó con decapitarlo si creaba otro problema con la señorita Wellington.”- me dijo el perro fiel del Hombre de Hielo. Yo sólo lo mire con burla, como queriendo quitarle importancia, de nada servía, con esos dos, discutir lo evidente. De todas formas, mi auto invitación tenía una razón de ser, a diferencia del Hombre de Hielo, yo no podía quedarme en Estambul, esperando conocer a mi ahijado, tal como había hecho el estúp
Narrador. Despacho del CEO Craig Goodman, Edificio sede central del Grupo Goodman, Auckland, Nueva Zelanda, Noviembre de 2024. -” Dime ¿Qué has averiguado?”- preguntó Craig Goodman al detective que había contratado para encontrar su hija, ante los intentos fracasado de su mujer Ruby, para localizar a Clara. Llevaba semanas interrogando a mi esposa para ver si había algún avance en lo que yo le había pedido que averiguar, que encontrara a Clara y a su marido, cada día obtenía la misma respuesta, “los detectives no han encontrado nada”. Llegué a o pensar en muchas ocasiones que mi hija ya se habia comunicado con Ruby y le había pedido que no em dijera nada, miles ideas paranoicas se me había cruzado por la mente, hasta que decidí ser yo, en secreto, para que Ruby no avisara a Clara, el que la buscara, por eso contrate a una de las agencias de detectives más reputadas de Nueva York, que tenía carácter internacional, Wilson y asociados. -” Señor, tengo que decirle que hay algo que us
Clara. Aeropuerto Internacional de los Ángeles LAX, Los Ángeles, California, Principios de Noviembre 2024. ¿Alguna vez os ha pasado que, desde un principio, por razones totalmente ilógicas, e inexplicables, sentís que no debéis hacer algo, que todo eso es un error? Pues justo eso es lo que llevo yo sintiendo desde que firmé ese contrato, para mudarme un año a Turquía. Pero ahora cuando tres enormes coches de lujo nos han recogido en mi casa, donde tres mujeres, con tres niños, más de una decena de bultos entre maletas y bolsos, para llevarnos a el Aeropuerto del LAX, donde nos esperaba personal de Osman, para llevarnos en un vuelo privado de casi dieciocho horas, a Estambul, todo organizado y programado por el asistente del presidente del grupo Osman, Burak Sari, la sensación de tragedia inminente, se acrecentó. Cuando llegamos al aeropuerto, ni siquiera entramos por la puerta de acceso de llegadas normal, sino que los coches se desviaron a la zona de entradas de los VIP, que es
Clara. Aeropuerto Internacional de los Ángeles LAX, Los Ángeles, California, Principios de Noviembre 2024. Caroline es una de las personas más importante de mi vida, mi familia, mi segunda mamá, y no fue fácil, ni para ella, ni para mí. Fue contratada por mi madre cuando mi Nana tenía veinticuatro años, y yo apenas tenía un año, su madre había sido la niñera de la familia de mi madre. Cuando mi madre murió, y luego mi padre se casó, Ruby la echó, como a todo el personal que le había sido fiel a mi madre, para poner ella su personal de confianza, y así controlarlo todo, ellos tapaban sus maltratos, así no tenía a nadie que le dijera mi padre, que era lo que estaba pasando. Al contrario de los que Ruby pensaba, Caroline se mantuvo pendiente de mí, ella fue la que soborno a ciertos miembros del personal para obtener los videos, y las fotos de mi maltrato, quiso ir a dar con mi padre, y a las autoridades, para denunciarlo, pero yo no la dejé. En esa época no tenía mucha autoestima,
Morgan. Jet privado del Grupo Osman Global, Aeropuerto Internacional de los Ángeles LAX, Los Ángeles, California, Principios de Noviembre 2024. Mucho antes de embarcar en el Jet que el padre de Mark había enviado para recoger a su mujer y a su hijo, ya sentí la presión de entrar en ese mundo que yo desconocía, el de las grandes multinacionales, y los millonarios podridos de dinero. Cuando todo el personal de vuelo, y el copiloto ya nos esperaba al pie de la escalinata, para darnos la bienvenida, como si nosotros fuéramos grandes celebridades, o la Primera Dama. -” Aunque pensándolo bien, quizás Clara sí que sea la Primera Dama del imperio Osman, sin ella saberlo.”- pensé sin poder evitar que una sonrisa se dibujara en mis labios. Estaba tan sorprendida de que todo este lujo al que no estaba acostumbrada, que ni me di cuenta de que la Rata Vampírica hacia un rato que no apartaba sus ojos de mí, y cogió el momento que en mis labios se dibujó una sonrisa de burla. La verdad es q