Gracias a todos por seguir y apoyar esta historia, besos y bendiciones
Marie MoreauMe despido de Michael y llego a la empresa en mi auto, me cuesta salir del auto se que no me espera nada bueno allí adentro.—Felicidades, —me dice la chica de recepción, al parecer todo están contentos por que logre convencer a la gente del pueblo para que continuara con la construcción de nuestra sede.—Gracias.— Respondo con una sonrisa genuina sin detenerme subo al ascensor que está solo y llego a el piso de presidencia.—Felicidades señora.— Me dice Holmes desde su escritorio frente a la oficina de Mateo, y las alarmas se me activan—¿Cómo me llamaste?— Pregunto y la puerta se abre –Entra.— Ordena Mateo y yo lo sigo, pero mi corazón esta latiendo con un mal presentimiento.—¿Qué hiciste?—Cuestiono.—Toma asiento, no hice nada, cuando llegue todos lo sabían, alguien del pueblo publico fotos de nuestra boda y se hizo viral... Me dice como si nada siento, que el mundo se me cae a pedazos.Seguramente Don Joseph va a pensar lo peor de mi, después de esto, me siento en u
Marie MoreauPasamos por la mansión buscando la ropa, Cristal nos saluda afectuosa como siempre, en la sala esta Alice, con la niñera y Camilla, que en este momento está tranquila jugando sobre la alfombra,—Hola, pensé que llegaban más tarde. — Dice ella, levantándose y colgándose del cuello de Mateo con la intensión de besarlo, él la esquiva.—Ya para por favor, madura tuve mis razones para marcharme, pero tenemos una razón para estar juntos, nuestra Camila. — Le dice ella, el toma mi mano y le responde.—No es suficiente, tomaste la decisión de tener una hija conmigo, bien asumo mi responsabilidad con ella, pero el tu y yo no entra en la ecuación. — Le dice el sin inmutarse, por la cara de perplejidad de ella.—Es un chiquilla insolente, que ni siquiera sabe lo que quiere. — Chilla señalándome.—No te metas con ella. — Le advierte Mateo.. —Delante de tus narices acepto a otro hombre. — Le dice ella, para que el cambie de opinión hacia mí, viéndolo desde su punto de vista, me hace
Marie MoreauLlegamos a mi apartamento y tuvimos que dar varios viajes para subir las cosas, tuvimos que dejar algunas maletas porque no entraban en mi pequeño auto deportivo, Jimmy se ofreció a llevárnosla más tarde— ¿Quieres comer?— Le pregunto y el asiente, —Casi no almorcé, apenas te vi con Michael, tuve decidí no darte más tiempo. — Me confiesa.— ¿Qué quieres decir?— Cuestiono—El día que me case, todo fue real para mi, solo te daba tiempo para adaptarte, buscaría la forma de que te enamoraras de nuevo de mi, para evitar el divorcio. — Me dice el ya me dicho que me amaba, pero no que todo estaba fríamente calculado.—No puedo evitar sentirme mal por Alice, siento que le quito algo que le pertenecía. ——Es cierto que estuve varios años con ella, pero era más costumbre que cualquier cosa, nunca pude amarla y cuando ella se fue, fue un alivio para mi. — Me dice él, hago un puchero con mi cara, eso no alivia la pena que me dio verla rogar.— ¿Tú crees que algún día tu padre nos per
Marie Moreau Al llegar al hospital, Don Joseph esta allí llorando, en la sala de espera, en cuanto nos ve nos grita –Todo esto es culpa de ustedes, que no pensaron más que en sí mismos. — Siento culpa, y que el mee lo diga solo aumenta la procesión, sé que no debería estar aquí, pero Mateo me necesita, está a mi lado con cara de tragedia, no conozco ni uno de sus pensamientos, solo sé que esta tan mal como yo —Familiares de la niña, Camila Acosta. — Llama un doctor —Soy su padre, soy su abuelo. — Dice Mateo y su padre a la vez. —Qué bueno que llego debemos, ¿puede mostrarme sus documentos?, debemos entregarle a la niña, esta pequeña y n entiende muy bien todo lo que acaba de pasar. — Le dice el medico Mateo, se va con el doctor haciendo todo lo que le corresponde para buscar a la bebe, mientras yo me quedo con mi suegro, pero en este momento no soy su persona favorita. — ¿Debes estar feliz ahora que tienes el camino libre?— Me dice con los ojos llorosos, me duele lo que me está d
Marie Moreau La hija que la vida me dio, se puso a llorar a las dos de la mañana, cuando iba a levantarme a ver qué sucedía, Mateo me hizo seña con los ojos entrecerrados de que él se encargaba, fue un alivio para mi, estoy agotada por tanto estrés, sin embargo el al cargo y la consoló y ella seguía, llorando a todo pulmón, lo veía andar desesperado de un lado a otro en la pequeña habitación. —Dámela. — Susurro estirando mis brazos, él me la entrega —Los vecinos se van a quejar. — Dice con preocupación —Está hecha pis, esta incomoda es por eso que llora.— Determino tocándole el pañal, me toca ver un video para ver como se cambia, la aseo, y ella hace pucheros graciosos, es linda no lo podría negar, Mateo es uno de los hombre más guapos que he conocido y su madre fue una mujer preciosa, aunque estuviese loca. He pasado por muchas situaciones difíciles y nunca he deseado estar muerta, ni he pensado en algo como lo que hizo ella, por lo que solo una persona loca se mata e intenta l
Marie MoreauEstoy aterrada con todo lo que está pasando en mi vida, estoy sola en el sillón de mi apartamento, en posición fetal, temblando y llorando, no tenía idea que el no contestarle a una persona podría ser considerado un delito.—Todo es tan difícil desde que tu no estás.— Susurro abrazando mis piernas, nunca pensé estar viviendo algo como eso, apenas Mateo y yo nos comenzamos a llevar bien, apenas creo que todo va como quiero pasa algo para dejarme incluso peor que antes.Tocan a mi puerta y me seco las lágrimas para ir a atender, abro la puerta y veo con horror a la señora Bell parada frente a mí. —De nada te sirvió quedarte con Mateo, me asegurare que no vuelva a salir en libertad. — Me dice ella empujándome y entrando como dueña y señora de la casa—No tiene nada que hacer aquí. — Le respondo ella se quita los lentes y ve todo a su alrededor con aires de superioridad, solo porque tiene, dinero, yo también lo tengo, esto era lo que necesitaba por el momento para ir al traba
Marie Moreau —Mi abogado las tiene, así como el testimonio de dos de los jurados, que nos contactaron para decirnos que los señores Bell intentaron sobornarlos también a ellos. El hecho de que los padre de la señorita Alice Bell, hayan intentado hacer justicia por su cuenta, no le quita la responsabilidad que el acusado tiene en la muerte de la señora Alice. Dice el fiscal. —Todos comienzan a hablar, y se dan cuenta de la inocencia de Mateo mucho antes que el juez dicte su sentencia, el abogado intenta salir y uno de los guardias le bloquea la salida, es el fin de su carrera como abogado y además va a ir a la cárcel —Hay algo mas, es posible que la señorita Bell este viva. — — ¿Está loco? Todos vieron el cuerpo calcinado de mi hija. — Chilla el señor Bell, temblando de rabia. —Son una familia excelente de actores, pero ni todo su dinero les servirá para torcer la justicia. — Le dice mi abogado, el juez se queda por un instante atónito. —El señor, Miguel ángel Bell y la señora
Marie Moreau Espero afuera la liberación de Mateo, apenas se asoma por la puerta corro hasta él y lo abrazo, su padre, estaba a mi lado, nos saludamos con respeto, pero no le doy chance de nada, Mateo fue que supo meterse por debajo, supo envolverme, pero yo estaba decidida a pasar la página. Generalmente no doy una segunda oportunidad a quien no me dio la primera a mí, recuerdo perfectamente como don Joseph, me presento a Alice, como su asistente… Creo que merecía más que eso—Hijo. — Dice don Joseph abriendo los brazos, Mateo me suelta y lo abraza, sé que jamás competiré con su padre, ojala no se le ocurra decirme que volvamos a la mansión porque yo no estoy dispuesta a volver allí. Cuando pase algo quieran echarme de nuevo como un perro sarnoso, me cruzo de brazo a esperar que ellos continúen su emotivo encuentro. —Estoy agotado, necesito descansar. — Dice Mateo, se ve que la semana y media que pasó allí, fue semana y media que no pudo dormir. — ¿Vamos a casa?— Pregunta el seño