DANESA

Los niños se quedan dormidos y mi esposo me limpia las lágrimas antes de besarme con pasión, envolviéndome entre sus manos grandes mientras nuestras lenguas se unen extendiendo el momento. No lo quiero soltar, me quiero quedar así por toda la eternidad besándome mientras nuestros bebes, duermen plácidamente inocentes del mundo asqueroso que los rodea.

Lo amo tanto que siento el sentimiento recorrerme completamente abarcando cada célula de mi cuerpo y el corazón me late tan rápido que temo a sufrir un paro cardíaco.

Enredo mis dedos en su cabellera profundizando el beso, el contacto que nos obligamos a cortar en busca de un poco de aire.

—Te amo mucho no lo olvides y confía que llegare a tiempo por ti.

—Lo sé mi amor,.confió mucho en ti, se que no me dejaras en manos por mucho tiempo de ese animal, ya sé lo que tengo que hacer, así que no te preocupes por mí.

No saben chicas como me late el corazón. Miro a mis pequeños por última vez dormir y mi Egan me toma de la mano para