La habitación de Sakuma era bastante grande, más de lo que el resto de habitaciones que habían visto anteriormente, parecía más un pequeño departamento que una habitación en si. Varias computadoras estaban sobre un escritorio, la amplia cama se encontraba frente a un alto ventanal que permitía ver todo el bosque, aparentemente, estaba lo bastante alto como para que pudiera verse. Los tres lobos se encontraban sentados alrededor de una pequeña mesa, en silencio mientras Sakuma preparaba el té, ni Kiyan ni Adalrik se atrevían a decir algo, y aunque pudieran atreverse a hacerlo, tampoco sabían que poder decir en una situación como la que estaban viviendo en ese momento. Kiyan nunca había sido afectado por la voz, ni siquiera cuando su padre la usaba contra los omegas de la manada cuando vivía. El recuerdo de su padre le hizo suspirar, claramente había demasiadas cosas de él que desconocía y que, ahora podía ver todos los demás lobos conocían menos él. Y no le gustaba, no le gustaba en l
El ruido de pasos caminado de un lado a otro anunció la mañana para los lobos que yacían cómodamente en la cama, la falta de ventanas hacia imposible saber si ya era de día o no, pero la calma de la noche anterior les dejaba en claro que ya debía ser hora de que los hombres de Sakuma se prepararan para sus actividades diarias. El lobo más pequeño se quejo por el repentino movimiento, Shi había estado durmiendo prácticamente toda la noche, en algunas ocasiones Kiyan había despertado sólo para encontrarlo aún acurrucado contra el, algo dentro de él se sentía ansioso de que pudiera desaparecer de su lado. Tal vez por la posibilidad de que ese chico se tratase de su viejo amigo y perderlo nuevamente era demasiado doloroso. Un ligero movimiento sobre el fue lo que le hizo volver a la realidad y abrir los ojos, el peliblanco se estiraba sobre suyo, y por un breve instante sus ojos mantuvieron un contacto, había un ligero brillo en esos violáceos ojos que Kiyan no había visto antes, ¿era pr
Nuevamente los lobos se encontraban en la habitación de Sakuma, solo que esta vez lo que los acompañaba no era una taza de té, sino un sinfín de paleles con información que Sakuma tenía sobre los lobos miembros de Dark Claw, mismos que había obtenido con métodos poco ortodoxos y que por supuesto le enorgullecia demasiado. Después de todo, recopilar información era su mejor talento. Y lo había hecho evidente en más de una ocasión. Ninguno de los tres lobos había dicho nada, tal vez porque Adalrik y Kiyan estaban demasiado ocupados leyendo, o porque realmente no sabían de qué hablar en ese momento. Sakuma por su parte si que estaba tomando una taza de té, observando en silencio como ambos lobos intercambiaban papeles y procesaban todo lo que estaban leyendo. Pero nada de eso tenía sentido para Kiyan en ese momento, solo existía una pregunta aen su cabeza y solo una. - ¿Cómo descubriste que el es su líder? ¿Cómo te diste cuenta que Shi es el líder de Dark Claw? - Sakuma sonrió, dejand
Dos días antes Fuertes gruñidos provenian de la parte trasera del helicóptero, el lobo amarrado al asiento no dejaba de pelear contra las pesadas esposas de metal que impedían que pudiera moverse. Ryoichi se encontraba a su lado, con una sonrisa de satisfacción mientras observaba como el lobo intentaba escapar. En el asiento del copiloto se encontraba la misma mujer que siempre lo acompañaba, en su mirada podía percatarse el miedo de que Kion pudiera escapar y tuvieran un accidente. Nunca había visto a un lobo actuando de esa forma tan agresiva, ni siquiera Tsuki actuaba así, y el lobo tenía un alto grado de agresividad. - Tranquila, tu miedo lo va a alterar más. Si no quieres que tengamos un accidente no lo provoques. Nuestro lindo cachorro es muy fácil de provocar - La voz de Ryoichi sonaba divertida, le divertía demasiado la situación. Saber hacia dónde se dirigían solo hacia qué todo fuera mejor. Su plan estaba funcionando a la perfección y pronto lograría hacer crecer más su e
El viaje desde la cede de Phoenix hasta su guarida fue más rápido de lo que Shi esperaba, en algún momento de la carrera Kyu lo oslto, permitiéndole así tomar su forma animal y correr junto a ellos, manteniendo su forma de lobo hasta que los portones del hotel se comenzaron a divisar en la lejanía. Una vez así de cerca volvieron a su forma humana, en silencio. Ninguno de los gemelos quiso explicar la razón del porqué habían hecho aquello, ellos dos eran particularmente silenciosos, no solían hablar más de lo necesario, así que tenerlos ahora tan callados no era algo demasiado extraño, pero si le preocupaba demasiado a Shi. Y eso mezclado a la preocupación que ya sentía por saber que Kiyan ahora sabría su identidad y le estaría buscando solo hacían que su estado fuera peor. Los tres lobos caminaron en silencio hasta el hotel, y Shi comenzó a sentir que algo estaba demasiado mal, el olor a muerte podía sentirse desde fuera y un ambiente más lugrube de lo usual también. No podía saber c
La sala se encontraba en silencio, los lobos restantes de Dark Claw no tenían intenciones de hablar con Kiyan y compañía, al contrario, mantenían su distancia, los centinelas seguían apuntando con las armas. Los únicos que se veían tranquilos con la situación eran Sakuma y el encargado de los sistemas, los cuales sí estaban bebiendo una taza de té, en silencio por supuesto, pero a diferencia de los otros lobos no se veían afectados o con ganas de saltar a su yugular en cualquier segundo. Era algo bueno que al menos una parte de ellos pudiera mantener la compostura. - Han dicho que saben que es lo que ha ocurrido aquí, ¿correcto? - Finalmente después de lo que pareció una eternidad para todos, el lobo decidió hablar, dejando la taza para poder dirigirse mejor a los intrusos que ahora, debían mejor llamar invitados - Me disculpo primero por mi mala educación. Pueden llamarme Ram, soy el encargado de las cámaras y seguridad de Dark Claw, aunque claro, como pueden ver ese título no me ha
Para cuando Kiyan y Shi llegaron junto al resto de lobos, Sakuma y Ram estaban analizando detenidamente cada fotograma del video de seguridad, Sakuma estaba observando detenidamente el video donde llegaba el helicóptero, una mano estaba sobre sus labios, claramente pensando algo respecto a eso. Adalrik estaba a su lado, y Shi pudo notar como la mano libre del alfa estaba sobre su cintura, esa imagen le hizo reír un poco, tal vez solo Adalrik no se percataba de las intenciones que Sakuma tenía por el, pero, podía entender por la mirada que tenía mientras observaba la imagen de Kion en la pantalla que realmente había desarrollado sentimientos por su amigo, puede imaginar que debe ser fuerte para el saber que no está muerto y tener a un alfa como Sakuma coquetearle y buscar algo con el. Estaba seguro que debía ser muy complicado para el como lo era para todos los demás. - ¿Han encontrado algo? - Kiyan soltó la mano de Shi solo para acercarse a los lobos, observando también la pantalla,
[ DISCLAIMER: LOS SIGUIENTES CAPÍTULOS CONTIENEN ESCENAS DE SEXO EXPLÍCITO, LENGUAJE VULGAR, NO SON APTOS PARA MENORES DE EDAD. FAVOR DE LEER CON DISCRECIÓN] Si había una forma en la que Shi pudiera describir a Kiyan en ese momento sería cuidadoso, comparando su primer encuentro y como le había tratado, en esta ocasión el alfa le estaba tratando con toda la delicadeza que poseía en el cuerpo. Sus manos repasaban su torso desnudo como si de una obra de arte se tratase, como si fuera el cristal más precioso y delicado del mundo, que con un simple roce del aire pudiera arruinarse. Esta vez además sus manos estaban libres, permitiéndole también acariciar el definido torso del alfa, pasando sus yemas sobre su cuerpo, queriendo guardarlo en su memoria. Este nuevo encuentro era más cariñoso, había más amor en cada acción de Kiyan, más cariño y cuidado. Nada comparado a la forma tan agresiva en la que lo había tratado la primera vez. Aunque por supuesto, la primera vez cabía decir que ambos e