Lunes en la mañana y ya me sentía agotada, apenas pude dormir, me alisté para el trabajo y me detuve en seco, justo al abrir la puerta. —Buenos días— dijo Owen con aquella gentil sonrisa.Él siempre fue muy popular durante la universidad, era guapo, se sabía vestir, era educado, inteligente, el tipo perfecto, con el que todas querían entablar una relación.Pero no era para mí.Me caía bien, aunque… toda esa perfección me alteraba un poco los nervios, pero aprendí a tolerarlo.—Hola— dije un poco sorprendida.—Entonces, ¿Me llevarás contigo?.—Si, por supuesto.—Podemos ir a desayunar algo, después, yo invito.Yo sonreí. —No hace falta.—¿Qué dices?, deja que te consienta, aunque solo sea por un día.Si tan solo esas palabras vinieran de la boca de Jack.Nos subimos a mi auto y conduje a casa de los Philips, solo esperaba que Jack no se molestara.No quería retroceder todo lo que ya había avanzado.Pero no debía de preocuparme, como dije, Owen era muy sensato y amable.Al llegar, fuim
No podía parar de llorar, me dolía inclusive el pecho, y aunque Sofía sobaba mi espalda, eso no parecía estar ayudando.—Pero, creí que estaban bien— dijo Sofía sin entender.—Eso mismo pensé yo.—¿Crees que esto sea porque piensa que vas a casarte?, es mejor que le digas la verdad.Yo asentí. —Me siento una completa tonta.—No digas eso, pero, si él no te hace feliz…¿no crees que es mejor dejarlo por la paz?.Yo me limpié las lágrimas y negué. —Se que me ama, sé que lo amo, es solo que, no puedo hacer que eso sea suficiente.Sofía hizo una mueca. —No sé qué decirte, habla con él, y ya veremos qué pasa, pero ya no llores.—Si.Esperé hasta la noche para que todo lo que sentía se calmara, estaba por salir de mi departamento, cuándo un mensaje me llegó a mi teléfono, era de Abel, lo leí y sentí que un balde de agua fría cayó sobre mi cabeza.«El amigo que vino con usted esta mañana, le dijo cosas muy crueles a mi jefe cuando usted se fue a atender su llamada, creo que es por eso que mi
—Iris, no has comido nada, por favor, solo ven y come un poco.Yo alcé el rostro y miré a mi madre, me limpié las lágrimas y me levanté con lentitud, no tenía hambre, pero ya no quería preocupar más a mis padres.Fui al comedor y mi padre me miró con cierta pena. —¿Quieres café?.Yo asentí.Me senté a comer en silencio y mi padre suspiró. —Iris, sé que no quieres escuchar esto, pero es mi deber decírtelo, Jack no es bueno para ti, y no lo digo por su aspecto, eso no tiene nada que ver, ayer hablé con él y pude ver que tiene una gran batalla interna.Yo miré a mi padre. —¿Por qué fuiste a verlo?.—Porque esto tiene que parar, tu vida se te está yendo, eres hermosa e inteligente, y todas tus energías las depositas en esta relación que no va a ningún lado.—Tu padre tiene razón Iris, ¿Por qué no, le das un tiempo a esto?—Lo secundó mi madre, y aunque quería decirles que estaban equivocados, no podía, pues tenían algo de razón.—¿Un tiempo?, esperé doce años— dije demasiado frustrada, de
Al llegar a mi departamento, Sofía ya me estaba esperando, supongo que Owen estuvo tratando de persuadirla para que hablara conmigo.—¿Puedes decirme que pasó?.—¿Qué pasó de qué?—Pregunté dejando mis cosas en el sofá, no estaba de humor para nada, y era debido a los sucesos de estos días, en especial por la culpa de Jack Philips.—Con Owen, con Jack, Owen no deja de marcarme, y el asistente de Jack me estuvo marcando, preguntó por ti, parecía desesperado por encontrarte.Me senté en el sofá y me quité los tacones, mientras trataba de relajarme un poco, al final le envié un mensaje a Abel diciéndole que iba a mi departamento.—Ya me comuniqué con él.—No habías venido a tu departamento, ¿Qué pasó Iris?, ¿Estás bien?.—Resultó que Owen es un idiota, no quiero verlo, no me importa si tú quieres seguir siendo su amiga, pero yo no quiero volver a verlo nunca más en mi vida, no después de lo que hizo, así que no me lo menciones más.—¿Qué hizo?.—Él fue quien destruyó lo que había construi
Mi respiración se volvió agitada, sentirlo sobre mi cuerpo me excitaba demasiado y quería besarlo y hacerle el amor, pero eso sería volver a donde mismo.—Por favor suéltame— supliqué en un susurro.—Véndeme las acciones que compraste del estudio y vete, te estoy haciendo un favor.—No voy hacer eso, si tanto me quieres lejos, entonces solo déjame en paz, no me toques, no me mires, no pienses en mí—Dije viéndolo directo a los ojos, lo estaba retando, ¿Qué tanto iba a soportar?, esperaba soportar más que él, o iba a caer en mi propia trampa.—¿Cómo esperas que haga eso si te apareces vestida así?, me provocas y lo sabes, solo estás jugando, ¿Crees que no me doy cuenta?, ¿En serio piensas que soy estúpido?.—No es verdad— dije un poco avergonzada, me había descubierto, pero no iba aceptarlo.Se bajó el cubre bocas y respiró cerca de mi cuello, mi cuerpo por supuesto reaccionó.—Esto no es un juego para mí, tal vez tienes razón, tal vez todos tienen razón, al decir que no eres bueno para
—Ella solo vino a ayudarme.—¿No puedes mantenerte lejos, no es así?—Me preguntó Jack, aun no olvidaba como me había humillado ayer por la mañana, y si pensaba que me iba a dejar, estaba equivocado.—No pongas tu atención en mi, habla con tu hermana— dije manteniendo la serenidad dentro de mi.—Jack, por favor, si tú le das el visto bueno, papá no se opondrá.—¿Entonces planeas utilizarme?.—Te lo suplico.El timbre sonó, Anne se acercó a Jack y juntó ambas manos como si fuera rezarle. —Por favor, ya llegó….por favor…di que sí.Al final, Jack asintió, y Anne casi gritó de emoción, antes de ir a abrir la puerta.Mientras tanto, Jack y yo nos miramos.Antes de que Nolan llegara, Jack sacó de su bolsillo un cubre bocas, parecía que siempre estaba preparado, se lo puso y entonces Nolan y Anne llegaron.No hubo quejas, Nolan fue educado, Jack también, Nolan prometió qué regresaría a Anne antes de las doce, y Jack le advirtió qué no se pasaran de ese tiempo o que lo iban a lamentar.Emoción
—Jack— dije sin pensar, por un momento todo pareció un sueño, algo que estuvo en mi imaginación, y verlo, me tomó por sorpresa, la primera vez que vi a Jack, me pareció muy atractivo, era perfecto, hermosa piel, hermosos ojos, labios rojos al natural, cejas pobladas y bien definidas y una nariz perfilada, además de su mentón cuadrado que le daba el toque final a ese rostro tan encantador, y su cabello, cielos su cabello.Él sonrió y me examinó detenidamente, fue ahí qué me di cuenta, que no era Jack, se veía como él, pero no lo era.—Lo siento, soy Morgan Philips.Yo me aclaré la garganta, me sentí desilusionada, si nada hubiera pasado, creo que ahora, Jack y yo, seríamos esposos, seríamos felices, estaba segura de eso, las cosas que nos perdimos, el tiempo, tenía que recuperarlo a como diera lugar.—A… perdón…es que, te pareces mucho a Jack…—Dije sintiéndome muy tonta y avergonzada.—Si, me lo dicen muy seguido, puedo saber, ¿De dónde lo conoces?.—Perdón, que tonta, soy Iris, Iris L
Estaba con el cepillo de dientes dentro de mi boca, cuando el timbre de mi puerta sonó, lo cual era raro, eran cerca de las diez de la noche, debía de ser Sofía, salí del baño aun cepillándome y fui a abrir. Casi me atraganto con mi cepillo al ver a Jack.Sentí que estaba alucinando, hasta que se bajó el cubre bocas y habló. —¿Esa es mi sudadera?.Yo me miré a mí misma, me sentí tan torpe, me había robado su sudadera la última vez, y olía deliciosamente a él, es que no pude evitarlo, si lo sentía cerca, dormía como una bebé.—N-no…— dije dándome la vuelta para huir, pero él me sujetó de la mano y buscó algo.Me miró y entró, cerrando la puerta detrás de él. —Toda mi ropa tiene mi inicial, ¿No te diste cuenta?.Yo mire la manga y si, tenía una J bordada, ¿Quién carajos marca su ropa?.—¿Toda tu ropa?—Pregunté.—Si, toda.Fui a escupir la pasta y a terminar de enjuagarme, volví hasta donde él estaba y lo observé detenidamente, ¿Así que no salía mucho he?, supongo que estaba motivado.—¿