Cielo se sonroja hasta sus mejillas, y sus manos se tornan frías por los nervios de que el capitán, haya podido descubrir un poco de lo que ella tanto oculta. —¡Dios!— se cubre aún más bajando su mirada porque no es capaz de verle—¡Joder! ¡Es tu culpa!— Aarón le da la espalda —¡No intentes escapar! ¡Entiende que no puedes huir de mí!— espetó empuñando sus manos —¡Camina!— le ordena con esa voz firme y prepotenteCielo siente que ya no tiene salida, más que obedecer a ese cruel capitán que la tiene por beneficio. Sus pasos son lentos a comparación de Aarón, que camina con esa firmeza y buena postura. Al ingresar al Dúplex, Cielo alza su mirada para contemplar semejante lujo, por un lado su corazón se calmó porque desconfía de Aarón y pensó que la llevaría a un lugar de perdición, pero cae en cuenta que es su propiedad. Cielo continúa cubriendo su pecho con la tela del vestido desgarrada, y ya se siente súper incómoda con la situación.—¿Cuál será mi habitación oscura? ¿Me tendrás e
—Soy la única mujer para ti— se mueve la rubia viendo todos los grandes atributos del capitán que lo hacen el hombre hermoso y varonil que es. —Dime qué eres solo mío— pone sus labios sobre su longitud arrancándole jadeos de placer. —¡Joder! El deseo está en el aire, la carne reacciona al tacto del uno al otro haciendo que Aaron se relaje lo suficiente para cerrar los ojos dejando que la modelo lo lleve al cielo y es precisamente ese pensamiento que interrumpe todo, la imagen de la pelinegra que lleva su apellido llega a su mente y hasta causa un poco de susto en el cual abre los ojos y por unos segundos ve los ojos celestes de su ahora esposa en lugar de los verdes de la mujer que ama. —¡Mierda...!— gruñe imaginando que fantasea con los pechos voluptuosos de quién no está ahí y la rabia lo hace tomar a Cassy para cambiar posiciones, él sobre ella devorando sus labios, tomando un preservativo para entrar en su interior. —No te lo pongas, sabes que me cuido. —yo también— se pone
Cassy saca su talento, ese que tiene para caminar como si estuviera en la pasarela, sacando ese porte de sensualidad al caminar, resonando sus tacones.—tengo sed, dame de beber— le ordena apoyándose en la isla, por lo tanto Cielo la voltea a mirar y observa lo hermosa que es Cassy, usando ropa de diseñador, el cabello perfecto, accesorio costosos, piensa que así le gusta a Aarón, así que niega con la cabeza —no ¿Qué?— le pregunta arqueando una ceja—le puedo dar de beber, si me pide el favor— Cielo continúa cocinando, lo único que le gusta de esta cocina, es que es hermosa y que la despensa tiene de todo —¡El favor! ¿Estás loca? Estás en la propiedad de mi hombre, así que debes ser agradecida y darme lo que te ordenó—lo siento, pero conmigo las cosas no funcionan así— Cielo desea que Cassy se marche, pero no esperaba que la mujer se acercará más y le hablará al oído —¿Qué parte no entendiste?— su voz es suave pero firme —te voy a aclarar una cosa, siento que eres una de esas mujer
—Zamor, solo me haces reír— se burla el militar que si bien es cierto está sorprendido, pero su orgullo jamás lo haría flaquear. —¡Eres un malnacido Aaron!, no sé que mierdas se te metió en tu puta cabeza para haberte robado a mi mujer, pero lo voy a pagar muy caro, yo sé que a pesar de la basura que eres, amas a nuestra familia, ellos te odian y yo haré que eso sea peor, has avergonzado al gran Evans Black, por tu culpa, tu padre y el mío están enfrentados, la manada se ha destacado por su unión y tú basura de mierda lo has destruido —¿Seguro que yo? — responde con cinismo el pelinegro. La forma en la que se me miden el uno al otro es tan tensa como dramática, nunca en sus mundos se hubiesen imaginado enfrentarse, un Black contra un Black, no tiene sentido, aún así la guerra se ha desatado, ambos son altos y atléticos, sin embargo, Aaron se destaca y sé supera, es un Black auténtico y eso es algo que siempre ha causado inseguridades en Zamir quien a pesar de ser muy amado por toda
Para Cielo, las palabras de Aarón fueron la gota que reboso el vaso porque inmediatamente empieza a llorar como una pequeña niña, y no porque ella quisiera, es que literal le duele el corazón, y dejo brotar sus emociones porque no pudo más, por tal motivo, camina como una loca hacia Aarón, y con su manos empuñadas de la frustración, lo golpea en el pecho firme una y otra vez, sacando todo ese dolor, todo esa cólera que la tiene esclavizada.—¡Cálmate!— gruñó Aarón, porque tampoco está de buen genio después lo que pasó con Zamir —¡Eres igual que él!— Cielo lo sigue golpeando, impacientando a Aarón.—¡Ya, basta!— le grita tomándola de las manos con fuerza—¡Suéltame!— Cielo intenta zafarse, pero no puede, el hombre tiene mucha fuerza—¿¡Por qué no respondes mi gran puta pregunta!?— Aarón insiste en saber lo que pasa, sin darse cuenta que está actuando con celos —¡No vale la pena!— ella sigue forzando por soltarse —¡¡Para todo el mundo siempre seré una zorra!!— espetó con un llanto inc
—Eso... no es cierto— Cielo tiembla, queriendo ponerse de pie pero, el agarre del capitán no la deja. El capitán siente miedo de que ella intenté nuevamente atentar contra su vida. —Hay dos cosas que debes tener en cuenta— sostiene a la mujer en la misma posición hablando sin dejar de mirar sus labios rosados y carnosos. —uno— arregla un mechón de su cabello —te voy a proteger y dos— presiona levemente su cintura —aquí no hay, y nunca habrá amor. Las palabras del capitán rompen el pequeño encanto que la joven podría sentir, la tensión está en el aire y el calor extraño sobre todo para ella entorpecen un poco sus acciones por lo que al intentar ponerse de pie, su rodilla impacta la entrepierna del militar que chilla de dolor y cierta ansiedad cuando el cuerpo de Cielo lo aplasta sin un centímetro de distancia. —¡Oh Dios...!— rueda a un lado pidiendo disculpas una y otra vez llena de nervios —¡Joder! eso es sagrado— el dolor de Aaron se nota en la cara y ella no sabe qué hacer
—¿Hasta dónde piensan llegar? La llegada de Paloma, es una sorpresa para todos, Cielo se tensa de inmediato y Aaron no es la excepción, aunque lo disimula muy bien, ver los ojos llorosos de su tía lo hacen sentir mal, sin embargo, no es el tipo de hombre que se muestre débil ante nadie.—buenos días tía, qué sorpresa tu visita— su voz es firme —lo mismo digo, ¡Que sorpresa! aún no logro entender, cómo es que el hermoso bebé que hemos visto crecer, haya hecho algo así— lagrimea la mujer sintiendo su corazón añicos —definitivamente eres una mujer muy hermosa— mira a Cielo de pies a cabeza —bella por fuera pero, horrible por dentro. ¿Qué más hay de ti?— interroga con la voz entrecortada a la joven que tiene los ojos cristalizados.Paloma es una mujer muy bella y elegante, bastante pacífica para haber sido miembro del comando brasileño hace muchos años, encantadora y adorable para todos los que la conocen pero, no para Cielo, que siente su mirada fría, la repudia y no duda en hacérselo
Aaron siente culpabilidad por el estado vulnerable de Cielo, por más que quiere que ella se sienta segura a su lado, todo se le complica.—te llevaré a la clínica—no se preocupe— murmura Cielo con sus ojos cerrados y las lágrimas empapando sus mejillas—no te estoy pidiendo permiso Cielo abre sus ojos lentamente encontrándose con los de Aarón, dónde claramente se puede ver la preocupación y eso la intriga porque ha intentado descubrir si ese cruel capitán podría tener algún sentimiento por ella que no sea odio o desprecio.—si quieres hacer algo por mi, tan solo dejame ir a la habitación y déjame sola — su voz es a un hilo de quebrarse, literal, le duele el cuerpo pero, más el almaJustamente empieza a llover, y la lluvia cesa cada vez más, por lo que Aarón frunce el ceño, él no es capaz de captar órdenes si no más bien darlas, pero es tanto su sentimiento de culpa que le concede la petición.Pero antes de eso, la analiza de la cabeza hacia los pies, volviendo a subir su mirada has