Los acontecimientos ocurridos durante la reunión fueron desconcertantes para ambos, por darse cuenta que sus sentimientos eran correspondidos, sin embargo, no pudieron continuar con su conversación, por no estar el lugar adecuado.
Enrique se quedó expectante después que Iliana se marchara con Anahí al tocador, al fin había confirmado sus sospechas ‹ ella siente lo mismo que yo › pero, tuvo que dejarla ir otra vez. Sergio se dio cuenta de su mirada de preocupación y, le cuestionó si se encontraba bien.
-E: Sí, Tranquilo Maldonado, creo que me ha sentado un poco mal la comida-
-S: Entiendo amigo, si quieres puedes irte yo puedo llevar a tu hermana a su casa-
Eso no se lo esperaba, si tan solo pudiera de alguna manera aprovechar la oportunidad para escapar con Iliana, a los pocos segundos regresaron las chicas. Iliana se veía realmente incomoda, cosa que Sergio no paso por al
Casa de la familia Landaeta, 26 años antes: Mientras ordenaba su cocina después de un espectacular almuerzo de domingo junto a su esposo, una presión en el pecho de Camile apareció de pronto, provocando que se agitara su respiración, era más bien un presentimiento, lo que producía temor y angustia. Su única hija se encontraba fuera de casa y, ya que lo pensaba detenidamente estaba retrasada en su hora habitual de llegada, por lo que su preocupación no tardó en multiplicarse.Camile era una mujer con aptitudes particulares desde que era niña, pues era poseedora de un don muy especial, tenía la habilidad de ver a través del tiempo. De pequeña, esto le trajo muchas dificultades, por no comprender la magnitud de sus poderes, pero a medida que fue creciendo tomó control sobre ellos. A sus 56 años, con el apoyo de su esposo tenia total dominio de
De vuelta al presente, Caroline poseída por la rabia seguía azotando objetos en todas direcciones, ‹ ¿Cómo es posible que esté en blanco? › esa pregunta rondaba su cabeza una y otra vez, se supone que al estar resguardo en su mansión nadie tendría acceso a él. Evidentemente se equivocó, pero, ¿Cuándo?, es imposible que alguien entrara a su casa, además el libro estaba con ella desde hace siglos, muchos piensan que es no existe.A parte, lo que está desaparecido es su contenido, en ese momento un chispazo vino a su mente ‹ Usaron un hechizo de traslación, la información puede estar en cualquier lugar › su inquietud se incrementaba, había comprendido que en alguna parte un enemigo poderoso permanecía oculto frustrando sus planes.Por si fuera poco al revisar su medallón, se dio cuenta que este había perdido un po
La situación en el parque era bastante tensa, más porque ni el propio Sergio comprendía su actitud, no encontraba como explicarle a Iliana que le sucedía. De pronto un repentino alivio se apoderó de él, nuevamente sentía tener control de sus acciones.-S: Discúlpame Iliana de verdad no fue mi intensión incomodarte, simplemente estaba preocupado-El cambio en su actitud fue desconcertante para todos los presentes, ahí estaba el Sergio educado y caballeroso que ellos conocían. Lo cierto es que se debió a que la manipulación de Caroline sobre él fue interrumpida.-I: Tranquilo, vamos a dejar eso en el pasado-El silencio reinó por unos instantes hasta que Enrique lo rompió anunciando su retirada junto con su hermana, al oírlos Iliana se apresuró a detenerlos.-I: Esperen un momento, Anahí te gustaría acompañ
Desde muy temprano Iliana se encontraba en la cocina de su casa preparando el desayuno, debido a que no pasó muy buena noche, así que siendo sábado se propuso a cocinar algo especial para su madre por su acostumbrado tiempo de calidad, juntas.Mientras batía la mezcla de los waffles no dejaba de pensar en la advertencia que le dejó su abuela mientras dormía, se esforzaba por recordar todo tal cual se lo dijo, pero era inútil, apenas algunos fragmentos eran claros ‹ ¿Quién podrá ser?, ¿Qué se supone que debo hacer? ›.Su madre apareció en la cocina sorprendida de verla levantada tan temprano, tomó asiento en el mesón mientras Iliana se apresuraba a servirle una taza de café.-E: ¡Caramba!, ¿te caíste de la cama? Pensé que ibas a dormir hasta medio día por lo tarde que llegaste anoche-Le dijo mientr
Aun consternados por toda la información que obtuvieron del maestro, los hermanos Marqués regresaron a casa, les seguían pareciendo increíbles cada una de las palabras dichas por él, sin embargo, estaban conscientes de que eran verdaderas. Ahora el problema real era identificar a esa mujer, o mejor dicho advertirle a Iliana que una de sus amigas en realidad deliraba por hacerle daño; hasta decirlo en voz alta sonaba descabellado.-A: ¿Qué se supone que debo hacer? No puedo llegar como si nada y decirle todo eso a Iliana, va a pensar que estoy loca, no tengo pruebas de nada--E: Lo sé, suena a locura. Ella me comentó que había acudido con un hombre que la ayudó a descubrir lo que pasaba, gracias a una de sus amigas. Ahora entiendo que es el mismo maestro--A: Eso no responde mi pregunta nanito, ¿Qué hago? Sabes lo mucho que me cuesta disimular se me va a notar
Abriéndose paso entre la gente apareció Iliana con los tragos, aunque no estaba sola, venia felizmente acompañada por otra chica, las muchachas disimularon su conversación mediante risas fingidas lo mejor que pudieron.-I: Disculpen la tardanza, pero me encontré a esta pajarita en la barra-Dejó las bebidas sobre la mesa y señalo a su acompañante del lado derecho, una mujer bastante joven y hermosa con una expresión algo hipócrita en su rostro, según la apreciación de las otras dos.-I: Chicas, les presento a Caroline, mi gran amiga desde hace muchos años--C: ¡Mucho gustó! Un placer conocerlas-Dijo algo forzada, lo cierto es que no le hizo nada de gracias ver a la hermana de Enrique en la reunión, por dentro ardía de rabia pues sabía que las cosas entre sus enemigos estaban marchando bien y, por el momento no había n
La expresión de Iliana era una mescla de decepción y asombro, no lo podía creer, se negaba a creerlo, su mejor amiga, la que ella consideraba su hermana, era la mujer que más la odiaba en este mundo. Inevitablemente los ojos se le llenaron de lágrimas. Por su parte Luz y Anahí confirmaron sus sospechas, el silencio reinó en el lugar solo las miradas hablaban hasta que:-I: ¡¿Por qué?! ¿Por qué tú?-Caroline no entendía a qué se refería, la mirada que recibía por parte de Iliana la intrigó, hasta que cayó en cuenta de lo que sucedía ‹ ¿Me descubrió? No puede ser, es imposible› pensó para luego tratar de hacerse la tonta.-C: ¿De qué hablas brujita no entiendo?-A Iliana le costaba asimilar el grado de su cinismo, ni por un segundo dudo de la palabra de sus abuelos, menos
LA solas con su captora en esa tétrica cabaña, la desesperación empezaba a dominar a Iliana quien intentaba inútilmente liberarse de sus amarres. Caroline disfrutaba de la escena que tenía ante sus ojos riendo eufóricamente.-C: Sabes ¿A dónde envié a esos enormes hombres?-Mientras hablaba Caroline jugaba con una Daga, con la cual acariciaba sus respectivas manos, Iliana lloraba desconsoladamente, sin poder articular ninguna palabra. Caroline se acercó a ella, haló de su cabello para levantar su rostro, pasándole delicadamente la daga por su rostro.-C: ¿Qué pasa? ¿Te comió la lengua el gatito?-Seguía pasando la daga por su mejilla, mirando fijamente el terror que provocaba. Iliana temblaba, la mezcla de emociones que experimentaba era abrumadora, ver que, quien consideró por mucho t