Salgo del auditorio con una enorme sonrisa, el inicio de proyecto fue todo un éxito, tanto los miembros de la directiva universitaria como los de la empresa se veían muy complacidos; estoy muy muy feliz, ver realizado el fruto de nuestros esfuerzos me llena de satisfacción.
Suena el teléfono y es Luz, me comunica que la señora Gutiérrez quiere verme en su oficina, me arreglo un poco y voy directamente a verla, su secretaria me autoriza a entrar.
—Buenas Tarde Sra. Gutiérrez, dígame en que puedo servirle— ella levanta la mirada y me indica que tome asiento.
—Gracias por venir Iliana, quiero primero que nada felicitarte por la el éxito de la conferencia de hoy— yo me sonrojo un poco y recibo el cumplido con una sonrisa tímida.
—Te hice venir porque el día de mañana tenemos que asistir a la cede la UCE a solicitud del rectorado— sus palabras me preocupan un poco, ella lo nota en mi rostro.
—Tranquila, no hay de qué preocuparse en realidad el rectorado quiere coordinar nuevos proyectos, con nosotros— mi semblante cambia de inmediato.
—Ya mismo empiezo a organizar todo para mañana, tendré algunas propuestas lista por si se requieren— ella me mira complacida.
—Así me gusta, ahora ve ya no te detengo; ah! Una cosa más, yo no asistiré a la reunión en mi lugar ira mi hija Martha— eso ultimo no me causa nada de alegría, tener que ir con la malcriada y presumida de la hija de mi jefa.
—Entendido, Sra. Gutiérrez— salgo de allí rápidamente. Llego a mi oficina me tiro en mi silla y doy una gran suspiro; no puedo creer que me toque asistir con esa engreída, siempre quiere robarse el crédito por mi trabajo aparte que me menosprecia cada que puede en público, espero no me ha pasar ningún tipo de vergüenza mañana.
Termino de arreglar todo para mañana con la ayuda le Lucecita, quien se quedó horas extras para ayudarme tan linda, de verdad que todo sería más difícil para mí sin ella. Salimos al estacionamiento ofrezco llevarla a casa, pero a la niña ya la estaba esperando un guapo galán afuera.
—¿Algo que tenga que saber picarona? — pregunto con malicia, ella se pone como un tomate.
—Noooo Lili (así me dice fuera de la oficina) — me responde con gesto exagerado, le digo que se cuide y que cualquier cosa me llame, ella asiente me guiñe un ojo y se va con su guapísimo galán, entre nos estaba buenísimo.
Ha sido un día agotador y largo, tomo un baño y me acuesto a ver tv para quedarme dormida, mi mami se asoma a darme las buenas noches y a felicitarme por mi día, me da un abrazo y se dispone a ir a dormir yo también me acuesto ansiosa de descansar después de un rato lo consigo.
…
Ahí viene, sigue tratando de alcanzarme se ve cansado, desesperado como si me necesitara, la escena me conmueve mucho, aun no entiendo porque la distancia crece cada vez, alcanzo a extenderle mi mano y el reacciona, inmediatamente extiende la suya mientras corre desesperado; yo trato de acércame pero no puedo moverme es como si estuviese fijada al suelo —ya casi, ya casi un poco más— dice, quedo perdida en la profundidad de su mirada, es lo único que puedo distinguir en la oscuridad, el resto de su rostro es un misterio para mí; un árbol cae y el estruendo hace que me despierte nuevamente.
Otra vez. Vuelvo a despertar a las 3 am por culpa de una pesadilla, aunque esta vez no me dio tanto miedo, no puedo evitar sentir una profunda tristeza como si pecho se oprimiera, tengo una sensación de pérdida enorme, dos lágrimas ruedan por mis mejillas, sin que pueda evitarlo, sin tener idea del porqué.
Me quedo un rato más despierta, no puedo dejar de pensar en ese sueño —¿Qué querrá decirme? ¿Sera una advertencia? ¿Por qué ese hombre me busca con tanta desesperación? ¿Será que lo conozco de alguna parte y no lo recuerdo, por eso me da tanta tristeza que no podamos juntarnos—
Son muchas las preguntas que vienen a mí esta madrugada y aunque quiera tener las respuestas me doy cuenta de la hora y procuro tratar de poder dormir un poco las dos horas que me quedan.
***
Me siento cansado, por más que corro no logro alcanzarla, quisiera darme por vencido no entiendo porque esta necesidad de estar con esa mujer, mis ánimos están por el suelo cuando de pronto, ella me extiende su mano, no lo puedo creer, redoblo mis esfuerzos para tomarla —ya casi, ya casi un poco más— digo mientras estiro mi brazo, de repente un árbol cae y el fuerte sonido me devuelve de golpe a la realidad.
Paso las manos por mi cara —Fue solo un sueño— digo soltando un suspiro ahogado.
Esta vez fue un poco diferente, aunque no conseguí alcanzarla, ella trato de ayudarme — ¿Será que por fin me corresponde? — salgo de mi trance y miro el reloj que marca las 3:03 am
— ¿Por qué tiene que ser siempre a esta hora? — Yo solamente quiero poder dormir, estoy mentalmente muy agotado, no tengo ganas de pensar en nada, doy vuelta a mi almohada e intento recuperar mi sueño profundo.
Mi celular empieza vibrar indicando que es hora de levantarme, con desgano apago la alarma y con mucho fastidio me pongo de pie para bañarme e iniciar mi día, no estoy de ánimos pero el deber llama. Hoy hay una visita guiada a los miembros de Eight8nigth, y quisiera estar presente, claro aún no me lo piden formalmente, pero eso no significa que no lo vayan a hacer.
…
Entro a mi oficina y le pido a Susan por el intercomunicador que me consiga algo para desayunar, Salí bastante apurado y no me dio chance de prepararme algo. Empiezo a revisar los expedientes pendientes de los estudiantes postulados al programa por mi facultad, me encuentro bastante entretenido cuando Susan entra con mi desayuno, lo deja lentamente sobre mi escritorio dándome una vista sublime de su escote, =esta mujer quiere hacerme perder la cordura= ignoro sus insinuaciones y ella se marcha con un expresión leve de molestia.
Seré honesto me encantaría complacerla aquí mismo en esta oficina, la muérgana está como quiere, y seguramente podría disfrutar mucho haciéndola mía, pero como dije antes hay muchas cosas en juego, y no las quiero perder por una calentura.
Retomo mis actividades, examino el perfil de los estudiantes postulados y me doy cuenta que es bastante elevado, sus calificaciones y aptitudes son impecables, debo hacer un seguimiento minucioso de su evolución en el programa, para constatar que sean consecuentes con el perfil que estoy leyendo; en eso recibo la llamada de Sandra la secretaria general de la facultad, quien me comunica que la comisión de la empresa está en las instalaciones, y me indica que si deseo puedo acercarme hasta el grupo guiado.
De inmediato cierro los archivos en el ordenador, me acomodo un poco mi vestimenta y salgo al encuentro de la comisión.
Desde que salimos de la empresa, Martha no ha hecho otra cosa que no sea alardear delante del resto de los miembros del comité directivo, sobre el éxito del proyecto que ella supervisa, bla, bla, bla, me da tanta rabia, porque ella posee un cargo de papel, y soy yo, quien hace todo el trabajo; respiro profundo y controlo mis impulsos de desmentirla, no me conviene hacer un show delante de los ejecutivos que pronto descubrirán quien hace en realidad el trabajo.Llegamos a las instalaciones de la UCE, quedo maravillada el campus es impresionante, hay jardines hermosamente diseñados a los alrededores, y la infraestructura sería un deleite para cualquier arquitecto. Al entrar, justo en el medio del enorme salón se encuentra una señorita con look estilo bibliotecaria, quien nos da la bienvenida.—Buenos días, mi nombre es Margaret Fuentes, soy la secretaria de la rectoría de la UCE, seré su gu&iacut
Voy caminado por los pasillos de la universidad, creo que estoy perdida, no recuerdo que Sergio dijera que me esperaría tan lejos. Doy un par de vueltas en círculos, cuando decido preguntarle a una amable chica, cual pasillo me lleva a la cafetería, ella noto mi vergüenza y con una sonrisa me señala con la mano la dirección correcta, yo la miro agradecida y me dirijo hacia allá.A lo lejos puedo ver a Sergio hablando con un hombre que esta de espaldas, parece importante, yo sigo caminado el pasillo es realmente largo, en eso el sujeto se marcha y Sergio camina hasta donde estoy para alcanzarme.—Disculpe Señor Maldonado, la universidad es tan grande que me perdí— le digo realmente apenada con mis mejillas rojas, y la mirada baja.—Tranquila, Iliana, no te preocupes, y por favor no me digas señor que me haces sentir viejo, dime Sergio— me dice con una dul
Hacia muchos días que no me levantaba con energía, a pesar de que soñé toda la noche, puede dormir más que otras veces durante el último mes, la identidad de ese hombre me tiene intrigada, porque vamos, tiene que ser alguien importante para mí, llevo días con ese sueño recurrente donde es protagonista.No dejo de pensar en el asusto mientras hago mis labores domésticas, hoy es Sábado, así que me dispongo ayudar a mi mami en todo lo que puedo mientras estoy en casa, oigo sonar mi celular, es un WhatsApp de Sergio, me desconcierta un poco, porque no recuerdo tener ningún pendiente con él.Abro el mensaje y leo:—Buenos días Iliana, espero hayas descansado y te deseo un bello día—Eso es todo lo que dice, me parece un bello gesto y después de mucho pensar encuentro una respuesta.—Buen día Sergio, muchas graci
El día está muy bonito, el sol no esta tan fuerte, la brisa es fresca, no está haciendo calor ni frio tampoco; así que podría decirse que es el domingo perfecto para salir a pasear. Camino lo más rápido que puedo porque se me hizo tarde esta mañana —¡Rayos no quiero que Sergio piense que soy una impuntual, qué pena! —Al llegar al parque central, me quedo maravillada por la inmensa cantidad de flores que pueden observarse, ¡Son hermosas! Y en tantos colores, inmediatamente me lleno de energía ante tanta naturaleza, simplemente ¡Me encanta! Mi andar se vuelve lento, en este punto no me importa ya llegar tarde, lo único que quiero hacer es disfrutar de la vista.Camino unos cuantos metros, y a lo lejos se puede mirar el restaurante al aire libre en el que Sergio me cito —tiene un lindo ambiente, espero la comida sea igual de buena— digo con una sonrisa.
Estoy muy ansiosa, tengo alrededor de dos años que no veo a Caroline. Ella es mi mejor amiga desde que tengo 19 años, somos muy cercanas pero, es una nómada natural, le fascina viajar por el mundo, además que hace parte de su carrera como conservadora de arte. Últimamente estuvo viviendo en Paris por un par de años, así que nuestra amistad estuvo limitada, a video llamadas y chat a diario, es por eso, que estoy muy emocionada de verla y que me cuente sus aventuras.Mi círculo de amistades es muy limitado, siempre he sido una mujer muy solitaria, aparte de Caroline, Lucecita es mi otra amiga cercana, se puede decir que en cierta forma es mi culpa, porque no dedique mucho tiempo a las relaciones interpersonales, así que esas son las consecuencias; claro, prefiero tener pocas amigas valiosas, que tener muchos conocidos de juguete.Llego a la puerta de su casa, toco el timbre y después de unos minutos, a
Mi teléfono no deja de sonar y vibrar, una cantidad absurda de mensajes entraron en cuestión de segundos. De paso que en las noches tengo pesadillas, ahora me levanto sobresaltado por el ruido de mi celular, = No debí mudarme a esta ciudad = pienso mientras agarro el móvil de la mesa de noche.Con pesadez abro la aplicación de WhatsApp para ver de qué se trata, al instante me doy cuenta que no es ninguna emergencia (llegué a pensarlo por un momento), debido a que el chat de Martha tiene 15 mensajes sin leer. =Dios, ¿Por qué? ¿Por qué ésta loca tenía que ser tan Sexy?= miro al cielo mientras lo pienso. La mayoría son Stikers y emojis pero:Textos de Marta:-Guapo levántate, vamos a desayunar juntos-- Pronto estaré en tu puerta-No puedo creer lo que está en la pantalla, no puede ser, yo no le di mi dirección, tiene
Las cosas están marchando mejor de lo que habría imaginado, la junta directiva de la empresa ha constatado de primera mano los resultados positivos del programa, además están muy contentos con la calidad de futuros empleados provenientes de la UCE, en pocos días el avance ha sido más que notorio.No solo estoy contenta por eso, Sergio tiene gran porcentaje de participación en la sonrisa de oreja a oreja que cargo, sus detalles me deslumbran cada vez más, admito que me causa algo de temor, pero estoy dispuesta a tomar el consejo de Caro, y darme ese chance en el amor.Otra cosita que ha contribuido a mi buen humor, es que hoy he podido destacar libremente ante los directivos, esto debido a que la simpática de Martha decidió dejar tirada la junta de hoy, por alguna causa desconocida, que confieso no me interesa. El que no se encuentre por los alrededores es una bocanada de aire fresco para m&iacu
***Después de la cancelación de mi cita con la rectora, me quede en mi oficina trabajando en varios pendientes, aprovecho el tiempo para ponerme al día con los deberes administrativos y demás cosas. Me pongo a pensar en el éxito que tendrán las conferencias, así que me parece buen momento de llamar a Sergio Maldonado.Busco en la agenda de mi celular y marco el número, después de un par de repiques lo escucho del otro lado de la línea.Sergio: ¡Kikee! ¿Cómo estas hermano? ¿A qué debo el gusto de tu llamada?Enrique: buenas tardes Maldonado (ríe), ¿Qué no puedo llamar para saludar a un viejo amigo?Sergio: (Ríe) no te hagas la víctima, y dime para que soy bueno. Enrique: está bien me descubriste (ríe), ya tengo la aprobación de la universidad para tus