No mas

—Mi amorcito ¿Por qué me dejaste sola? Todos me veían raro.

Reclama como si no fuera consciente de que nos descubrieron en el acto, acaso ¿Está loca o que?

—Leila, baja, enserio no te das cuenta del lío en el que nos metimos ¿Cierto?

Soy bastante brusco en mi forma de hablar, pero de nada me sirve un bulto sin cerebro, que en lugar de ayudar me joda.

—No me grites —ahí vamos de nuevo —Parece que te enfadara mi presencia, ayer eras un osito fogoso y hoy un ogro.

—Deja de comportarte como una escuincla boba, abre los ojos y ve en el maldito hoyo en el que nos metimos, por dejarte entrar en mi cama, ahora he perdido todo.

—Eso no es verdad, aun tenemos el nuevo negocio.

—¿Tenemos? Ja, ja, ja, ja, ja, enserio te faltan tornillos —le digo mientras con mi induce presiono su sien —entiende que sin Amanda no hay nada, no hay negocio, no hay capital, nada.

—Pero la idea es tuya la podemos vender o algo así, yo que sé.

—Obvio que no sabes nada, y tampoco quiero explicarte, mejor vete y déjame
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo