—Entonces me quedaré con todo lo que tienes, solamente te quedará la casa con algunos animales. Y aunque te quedes con todo, yo no invertiré más. Entonces te quedarás pobre ¿Eso no te afecta? —quiso saber mia.—Seguiré pobre que le voy a hacer. Me cría hasta ahora siendolo, no me afecta volver a hacerlo. Estoy feliz con la mujer que amo, y pronto formaremos una familia. Así que lo único que te puedo pedir, es que te alejes.—Ya está bien, me alejaré por ahora. Los dejaré tranquilo en la burbuja de amor. Aunque no sé qué hará tu hermano.—De qué hablas con mi hermano ahora, seguramente te casarás con el. A ti no te importa nada, ni nadie —dijo Esteban.—Puede ser, me agrada la idea. Si le das el poder a tu hermano, no dejara desempleado a todas esas personas. No te aparece.—Lo conozco, y aún así no le quedara un centavo de un día para el otro. Prefiero buscar otros inversionistas y buscar la manera de seguir adelante.Mía, suspiro sabiendo que no podría convencer a Esteban de que se d
Después de esperar unos segundos apareció Melisa, con el cabello peinado en una coleta alta y con su típica sonrisa al ver a su amiga.—Por fin amiga, ya pensé que no ibas a ir más al curso —dijo un poco contrariado.Briana frunció el ceño y dijo:—Pero... pero si no falté a ninguna clase —comentó.—Lo sé pero estás tan pegada Esteban, que temo perderte.—Eres una exagerada —comentó divertida Briana ante sus dramática amiga.—Solamente digo lo que es la verdad, cómo estás tan enamorada y perdida en tu Esteban. Ya te estáras saliendo del curso de tu amiga —comentó con un puchero exagerado Melissa.—¿Y Ana? —pregunto.—Ana como siempre está con su padre, en estos días acordamos de que estuviera con él. Así yo el fin de semana la tenía para mi. Ya además, es cierto que habíamos organizado de tener el almuerzo.—Lo siento se me olvidó —comentó apenada Briana.Melissa puso los ojos en blanco, sabiendo que su amiga solamente tenía su mente en su Esteban, pero no dijo nada simplemente siguió
Miró por el rabillo del ojo, el sillón desarmado e hizo un gesto de sonrisa. Aún le da un poco de gracia ver el rostro de Esteban, cada vez que lo veía sabiendo que no se podría sentar cómodamente. Pero esperaba que solo fuera un tiempo.Pronto volverá con el sillón armado.Bosteza, una hora después. Ya eran las 7:30 de la mañana. Se fué dispuesta a bañarse, ya que había sudado mientras hacia ejercicio.Después de bañarse, tomó su cartera, su saco y fue a visitar a su amiga Melisa. En cuanto llegó,lo hizo dando pasos largos y un poco rápidos.Melisa, abrió la puerta deprisa.Brianna, ni siquiera había tocado la puerta. Su amiga abrió la puerta, dejando la mano extendida de Brianna dispuesta hacer lo mismo.Melisa en cuanto la vió la abrazó.Briana, no entendía muy bien la actitud de su amiga; puesto que ambas, eran amigas.Pero aún así, no eran tan cariñosas, la una con la otra. Fue arrastrada por su amiga, dentro de la casa. El silencio la invadió, supuso que su hija estaría haciendo
Briana, Después de varias semanas se sentía muy feliz. Me había acostumbrado a la vida con Esteban. Se levantaba muy temprano, y esperaba con ansias tomar el desayuno junto con su esposo.Esta vez, preparo el té de frutas, el cual le había hecho Esteban para que ella tenga todas las mañanas. Y empezó con su rutina diaria. Aunque esta vez tenía ganas de tomar leche por alguna extraña razón. Aunque ella, no le gustaba la leche a decir verdad t siempre evadía tomar ese líquido blanco.En ese instante había tenido mucha ansiedad de tomarlo. Después de calentarla, se sentó en la mesa junto con unas tostadas.Esteban llegó a la cocina y la miro con curiosidad.—Pensé que no te gustaba la leche.— Sí, pero hoy me levanté con ganas de tomar leche. Debe ser por la ausencia de café.En cuanto posó la taza en sus labios. Unas terribles náuseas y extrañas la invadieron. Dejó la tasa en su lugar y fue corriendo al baño.Esteban la miro con preocupación como se acercó a paso apresurado hasta llegar
Briana asintió feliz, Y tomó la orden de derivación entre sus manos.En cuanto salió a la sala de espera, Esteban la miraba con curiosidad y estaba un poco asustado. No sabe muy bien que esperar, estaba nervioso y la echaba de menos a pesar de haber sido tan solo media hora.—¿Estás bien? — quiso saber Esteban.—Más que bien estoy embarazada —comentó con una sonrisa auténtica. Esteban, no le importó ni siquiera está en el hospital.La elevó los aires y le dio un profundo beso . a su alrededor se escucharon aplausos, y un montón de personas los miraban con la inversa ternura.—Es el día más feliz de mi vida Briana, Muchas gracias por hacerme tan feliz. Cuando yo no lo merecía.—Yo también me siento feliz. Te amo.Esteban la miró con sorpresa. Ella por alguna razón que él no entendía no le decía que lo amaba, y en ese momento después de tantos meses, lo había escuchado de nuevo de su boca.Se volvió a sentir muy feliz, Le alzó de nuevo y la llenó de besos. Salieron del hospital, y Brian
Briana en ese instante se sentía morir. No podía creer que su amiga ya no estuviera con ella.Ya no podrían volver haz almorzar juntas. Ya no podrían, estar la una con la otra tomando un café y hablando de todo o del clima.Suspiró en ese instante se sentía con el corazón en una puñalada. Entendía porque el destino era tan cruel, tampoco entendía porque ellos no habían llegado al sótano.Esteban la miraba con tristeza, Briana no pude evitar aferrarse en los brazos de Esteban llorando una y otra vez, hasta que los ojos empezaron a pesar.Se vió inmersa en un extraño sueño. Estaba en un gran prado de colores, había mariposa que volaba muy cerca de ella, incluso estiró la mano para poder tocarlas, de pronto una voz la distrajo. Al prestar atención hacia adelante, se encontró con Melisa. La mira con curiosidad, se acercó a su lado dando unos cortos y pequeños pasos. Pudo sentir el césped húmedo y esponjoso debajo de sus pies descalzos. A levantar la barbilla, sus ojos se encontraron con l
Miro de reojo a la pequeña niña que dormía muy plácidamente junto con un peluche Suspiro como ni siquiera sabía qué hacer . Aunque de algo estaba segura como nunca abandonaría a esa niña. Era su pequeña Ana ahora. Esteban, la abrazo.Las lágrimas, se mezclaban en los rostros de ambos .s los dos están muy sensibles en ese instante, Esteban había conocido por muchos años a MelisaLe había parecido siempre una buena vecina como más predispuesta y una buena mamá. Le dolió en el alma ese triste final. Suspiraron ambos .s brianna queda posada en el pecho varonil, sintiéndose embriagada por los aromas que el emanaba .s aunque se sentía muy triste. Se había quedado dormida de nuevo llanto.en que en uno silencioso, para que su hija no lo escuchara.Suspiro, miro de reojo los papeles de la niña. Sin saber muy bien que hacer, estaba segura, debía tomar una decisión rápida. Así que sin duda tomó la lapicera hermano relleno todo, y finalmente la puso como su hija y de Esteban. Él mismo estado de a
En la mañana siguiente, al parecer el temporal había pasado. Ambos se miraron algo confundidos.—Creo que ya pasó la tormenta Briana. Tengo que ir a fijarme.—¿Estás seguro? — quiso saber aterrada Briana.—Si quieres puedes acompañarme.Briana asintió . poco a poco pesaron a ir por las escaleras hasta que llegaron en la parte de la puerta.Esteban empuja con fuerza hacia arriba . y la puerta cedió. La casa, no estaba intacta para nada, ninguna casa lo estaba.Briana gritó... todo estaba destruido.Por fortuna no habían dejado ningún mueble, todo lo habían entrado al sótano. Al cual parecía abarrotado de muebles. Brianna tenía ese presentimiento, y tenía razón.Miró con profundo terror, todas las plantas destrozadas. Aunque entraron la mayoría de las Flores, todo estaba destruido.Briana miro a Esteban con pesar. Después su vista se dirigió a la casa de su amiga. Intentó llamar, pero por más que intentó nadie contestó.—...—Nadie contesta ¿podemos ir a ver si están bien? —quiso saber