Alexis llegó a la empresa y se dirigió a su oficina. Como siempre pasó sin saludar a nadie e ignorando a todo mundo.
Al entrar, su amigo Cristian estaba ahí sentado junto al escritorio, Alexis lo vio y se sentó en su cómoda silla.- Puntal como siempre – dijo Cristian, mientras observaba su elegante reloj.- ¿A qué has venido? - Preguntó Alexis, a la vez que prendía la laptop, había trabajo que hacer y perder tiempo no era una opción para él.- A felicitarte, lograste que Ashley firmara el contrato - Cristian estaba al pendiente de todos los planes de su amigo, pero jamás pensó que Ashley aceptará, al parecer la subestimó. Sonrio y volvió a decir con un tono desanimado - Todavía sigo sin creerlo – cruzó sus brazos e inclinó su espalda al sillón - pensé que ella era diferente, pensé que podía dejarte en tu lugar y hasta con las ganas.- Sólo ofréceles que le darás todo a bandeja de oro y ellas aceptaran – dijo Alexis muy serio con su mira-Esta es tu habitación - dijo Alexis abriendo la puerta para ella.Ashley entró muy despacio, miró la recamara, era mucho más grande que la de su departamento, muy elegante, de colores neutros y lujosa, se notaba que había sido remodelada para ella. .-Sino te gusta, podrás arreglarla a tu antojo - volvió a decir Alexis y caminó hasta estar cerca de Ashley.-No, así esta perfecta - Ashley no paraba de observar todo el lugar, era una buena decoración. Alexis asintió ante sus palabras, se acercó al armario, lo abrió y dijo, a la vez que dejaba ver nuevas y elegantes prendas dentro de este. -Esta será tu nueva ropa de ahora en adelante. Sólo podrás usar estas prendas, mientras estes a mi lado. Es necesario denotar presencia ante todos. -Yo he traído ropa, estas prendas no serán necesarias - habló Ashley viendo la ropa que en su mayoría eran vestidos y conjuntos de colores alegres.-Recuerda que eres mi novia y debe
“Alexis Smith tomó el poder de la empresa familiar a los 24 años de edad. Cuando regresó de Harvard, decidió vivir con su familia en la enorme mansión, sentía que los necesitaba aún después de ser un adulto responsable.Alexis lo tenía todo: dinero, mujeres, éxito, el amor y apoyo de sus padres ¡todo!No era hijo único, tenía una hermana mayor. Ibeth Smith, de 28 años, en ese entonces.El día que regresó de terminar sus estudios y a seguir con la empresa, su madre lo esperaba con los brazos abiertos junto con Ibeth.-Hijo, has vuelto ya – dijo ella dándole un enorme abrazo, lo había extrañado demasiado.-Así es madre – respondió este elevando a su madre por los aires, feliz por volverla a ver.-Hermano, bienvenido a casa - dijo Ibeth, sonriente. Lo había echado de menos en su estadía.-Te extrañe demasiado – habló Alexis a su hermana, al abrazarla sintió un pequeño bulto en el vientre – ¡¿No me digas que al fin vas
Las mujeres continuaron hablando hasta que fueron interrumpidas por Alexis. Él salió de la oficina y se dirigió donde Ashley, ya era la hora del almuerzo.-¿Nos vamos, Ash? – preguntó con una voz dulce, después volteó a ver a Mariela, quien se mantenía atenta a sus palabras y órdenes – señorita Davis, me disculpa, pero me llevare a mi novia a almorzar.-Claro, señor Smith - respondió ella a la vez que se colocaba de pie y dejaba escapar una gran sonrisa.-Nos vemos después – dijo Ashley tomando su bolso y el brazo de Alexis.Mariela los vio salir, sonreía mientras ellos salían de la oficina, hacian una gran pareja. Los perdió de vista en el ascensor y se fue a almorzar con las demás secretarias, también era su hora.Salieron juntos de la empresa, John los esperaba a fuera. Nuevamente Alexis abrió la puerta para que Ashley entrará al coche, él se sentó junto a ella.Llegaron a un lujoso y elegante restaurante, ubicado en med
Llegaron a la empresa como la pareja amorosa que fingían ser y continuaron con sus labores, siempre fingiendo felicidad y sin dejar sus papeles.El reloj marcó las 8 p.m. y ya todos se habían ido. Los únicos en la empresa, aparte de guardias, eran Ashley y Alexis.El teléfono sonó.-Ven a mi oficina – dijo Alexis y golgó en seguida.Ashley frunció el ceño, definitivamente no tenía paciencia para sus juegos. Respiró hondo tratando de calmarse y fue donde él.Tocó tres veces la puerta, la voz de Alexis se escuchó invitándola a pasar.-Estoy aquí como me lo haz pedido – habló Ashley sin mostrar algún tipo de emociones, se mantenía erguida y firme frente al escritorio.Alexis se mantenía en su puesto, bajó la tapa de la laptop, la vio a los ojos y le dijo.-Toma asiento – Ashley obedeció y se sentó frente a él. Alexis sacó una carpeta de color azul y la puso sobre el escritorio – Ábrela – ordenó. Ashle
Ashley esperaba en su oficina, movía y resonaba sus dedos en el escritorio conforme pasaba el tiempo. Quería ir donde Alexis, pero Cristian estaba con él desde hace una hora.Harta de esperar, decidió ir y tocar la puerta con sus nudillos.- Pase - se escuchó la voz de Alexis desde el otro lado de la puerta.Ashley respiró y entró con una sonrisa dibujada en su rostro. Al ver a cristian lo saludó. -Buenos días, Cristian. - dijo mientras caminaba. -Hola Ashley - respondió él sonriendo.Alexis observó la escena, ya tenía conocimiento de que ellos se conocían y se trataban como amigos, pues Ashley podía tutear a Cristian. Se levantó de su puesto y la tomó de la cintura.-¿A qué has venido, Ash? - preguntó de forma dulce tocando su nariz, era más que un coqueteo. Ashley decidió rodearlo con las manos, pues estaban frente a Cristian y se imaginó que él no sabía nada y era como los demás, simples espectadores.
Alexis llegó a su departamento, lo sintió vacío. Ana se sorprendió al verlo llegar solo, curiosa por lo que veían sus ojos le preguntó.-¿Y la señorita Ashley?-No vendrá hasta el sábado – habló él observando fijamente las luces encendidas, mientras guardaba sus manos en los bolsillos.-Entiendo, apagare la luz de inmediato - Ana estaba apunto de hacerlo, hasta que Alexis la interrumpió. -No será necesario, déjalas prendidas – caminó a su despacho y estando apunto de cerrar la puerta, volvió a decirle – avísame cuando la cena este lista.Esto fue algo que sorprendió a Ana. Alexis tenía mucho tiempo viviendo en la oscuridad y este cambio tan repentino hizo que el corazón de Ana se alegrara, supo que Ashley era buena para él.- De acuerdo señor - respondió ella sonriendo....A la mañana siguiente Ashley se despertó al escuchar la alarma sonar un sin número de veces. Miró a su alrededor y como en los viejos
A la mañana siguiente Ashley ya se estaba despidiendo de sus amigas.-Cuida mucho de Jos, Susan – le dijo a la enfermera mientras la abrasaba.-No te preocupes, yo cuidare de ella, está en buenas manos – respondió muy gentil.Ashley se soltó de Susan y fue a los brazos de Jos.-Te veré el próximo viernes.-Ya te empiezo a extrañar – dijo Jos abrazándola con fuerza. Amaba mucho a su amiga y para ella era muy difícil separase de Ashley.Ashley no tuvo de otra y tuvo que soltarla, la vio por última vez y salió del departamento. Benjamin ya la esperaba.-Buenos días, señorita Ashley – dijo él abriendo la puerta del coche.-Hola Benjamín, me alegra mucho verte – habló sin ánimos y entró en el coche.Todo el camino estuvo en silencio, su mente estaba en otro lugar. No sabía cómo su libertad se redució aún día a la semana. Se tatuó, se enfrentó a sus padres, luchó con todo aquel que quería lastimarla, entró a
La siguiente semana continuaron de manera normal, tal cual lo tenían planificado. Iban a la empresa juntos, almorzaban juntos y salían a la misma hora.Los besos también se hacían presentes, frente a las personas y frente a los paparazis. Cada vez nuevas noticias se decían de ellos, ambos eran el epicentro de todo New York, la noticia del momento, el estallido. Una vez que llegaban al departamento, cenaban, pocas eran las palabras que se escuchaban de ellos y se encerraban en sus habitaciones. Viernes llegó y Ashley fue donde su amiga, jugaron, bailaron e hicieron actividades con Susan. Y en la noche, Ashley se preparó para su nuevo encuentro, el cual lo ganó.El sábado volvió a la hora que le dijo Alexis. En la noche tenían un evento muy importante donde muchos empresarios iban a asistir al encuentro y el lunes, la familia de Alexis iría al departamento a conocerla.Ashley tenía los nervios de punta, no estaba lista para conocerlos, pe