La medicina comenzó a hacer efecto, la luz del sol de la mañana rocío suavemente la piel clara y limpia de Astrid. Cualquier que lo viera diría que parecía un ángel… El ángel poco a poco fue arrastrada al mundo de los sueños – Joshua– pronunció el nombre de su amado en un murmullo.
En el aeropuerto de los Ángeles la gente iba y venía sintiéndose atraídas por el bullicio, cuando dirigieron sus ojos a la fuente del ruido vieron a un hombre alto de pie en medio de la multitud.
Su altura era aproximadamente de 1.90 metros. Le permitió ser el foco de atención entre la multitud, el hombre miro a su alrededor, como si estuviera buscando a alguien. En el momento en que el hombre giro su rostro, la nariz alta, la mandíbula firme y sus sensuales labios bermellón hicieron suspirar a las mujeres a su alrededor, como si les robasen el aliento.
Su rostro era tan bello, que nunca podría ser olvidado después de darle solo una mirada, y que seguramente se arraigaría como un árbol con raíces fuerte y firmes.
Pero lo único que daba pena en ese rostro era la frialdad que hacía difícil querer acercarse. La gente a su alrededor se limitaba a hablar entre ellos, sin que nadie tuviera el valor de acercarse a hablar con él.
Frunció ligeramente el ceño y alguien entre la multitud dijo – ¡Parece ser el presidente de Steel technology! Joshua Steel.
De repente la gente a su alrededor parecía haber entrado en razón y su entorno le recordó a una olla con agua hirviendo, mientras buscaban de forma desesperada y desprolija sus teléfonos celulares para sacar fotografías.
El sonido del obturador lo distrajo. Si esto fuera habitual, Joshua no dejaría que este tipo de cosas ocurrieron en absoluto. En tiempos normales, incluso si algo así ocurriera, Joshua se encargaría de inmediato de tal situación en primer lugar, pero hoy no, no quería que esa persona viera ese lado de sí mismo.
De repente, una voz sonó entre la multitud, una voz que Joshua reconocía y le resultaba muy familiar, una voz en la que había pensado en incontables días y noches.
–Lo siento, voy a tener que decepcionarlos a todos, pero él no es un presidente –era una voz suave y encantadora, era casi hipnótica para Joshua.
Joshua giró la cabeza, era realmente ella, ¡Había vuelto!
Al verla caminar lentamente hacia él, su corazón se aceleró sin razón aparente, estaba extasiado solo de ver el rostro de la persona que había anhelado desde hacía tanto tiempo, hacía más de tres años que no la veía.
–¿Verdad?– Marilyn se acercó a Joshua y le tocó el hombro, acción que hizo retroceder los pensamientos de Joshua.
Joshua miró con inmensa ternura a la Marilyn Dean la persona que se ubicó tranquilamente a su lado – Siento decepcionar a todos, no soy Joshua Steel, el presidente Steel debería estar en una reunió ahora mismo – incluso mientras están hablando sus ojos nunca se apartaron del rostro de Marilyn.
De hecho no mintió, Joshua tenía una reunión importante el día de hoy, pero para ver a Marilyn en su primer día de vuelta a casa, pero Joshua había cancelado la reunión de improvisto. Ella era más importante que la reunión.
Sin embargo, Joshua, no sabe que la persona en casa, como una tonta, había renunciado a todo lo que tenía por él, incluso su propia dignidad y aspiración, desechadas por y para Joshua.
Joshua tomó la iniciativa de tomar el equipaje de la mano de Marilyn. Marilyn miró el entorno desconocido, habían pasado tres años, todo lo que antes fue conocido, ahora no lo era, incluso él había cambiado.
–¿Tienes hambre?– Joshua miro a Marilyn que estaba aturdida y en voz suave hablo – conozco un restaurante de comida tradicional Europea que te hará volar la cabeza, es un lugar que acaba de abrir, es muy bueno, te gustará.
“¿Comida Europea?” Marilyn pensó que si fuera la misma de hace tres años, hubiera clamado que Joshua la llevará a ese lugar, pero por desgracia, después de permanecer tanto tiempo fuera de Estados Unidos, ya estaba cansada de comer platillos Europeos, incluía su comida antes de abordar el avión fue un Cassoulet – No realmente, no quiero comer comida Europea, vamos a ese restaurante de comida china, íbamos siempre en los días de estudios.
Joshua se congeló en ese instante, su corazón entro en pánico de manera inexplicable. De repente no podía recordar a qué restaurante se refería Marilyn.
–Restaurante Hua Yuan– respondió Marilyn al ver la cara de Joshua, para Marilyn esa reacción hizo titubear su corazón, y tuvo un sentimiento de perdida, “¿lo ha olvidado?” con una sonrisa añadió – Es a pocas calles, muy cerca del distrito Chino, tú mencionaste que su sabor era como la auténtica comida asiática.
Solo entonces Joshua reaccionó, se refería a ese lugar, hacía más de dos años que no iba allí, cierto, desde que llevo a Astrid allí una vez, no había vuelto a ir.
Astrid... Astrid White… Se quedó pensando en lo que estaría haciendo esa descarada mujer en este momento, que molesta.
–Qué tonto – se palmeó la frente de manera juguetona – cómo pude olvidar algo tan importante – abrió la puerta del auto de manera cariñosa a Marilyn.
El Porsche circulaba suavemente por la carretera.
–En estos pocos años, veo todo tan diferente, todo ha cambiado mucho – dijo Marilyn mientras miraba las calles de manera pensativa. “Si han cambiado muchas cosas, todo es diferente”.
Joshua miró a Marilyn como si hubiera adivinado lo que pensando.
–Tonta, en qué estás pensando, aunque todo esto haya cambiado, seguiremos estando juntos – al escuchar esa declaración Marilyn giro la cabeza para mirar a Joshua, eran unos ojos suaves, como si le declarará abiertamente que era el mundo de Joshua.
Antes de darle siquiera tiempo a Marilyn de responder, Joshua continúo diciendo – Ya estamos aquí.
Marilyn no notó el sudor dejado por Joshua en el volante debido a su nerviosismo. Joshua estaba asustado. Realmente temía a ser rechazado una vez más, así que está vez decidió ser más cauteloso.
Joshua no sabía que la trayectoria cambiaría toda su vida.
Abrió la puerta del auto a Marilyn y llegó al restaurante que solían ir, hace tiempo atrás.
El dueño del restaurante era un hombre de aspecto corpulento, cuando vio llegar a Joshua se acercó.
–Señor Steel, hace mucho tiempo que no lo veía por aquí, la última vez que lo vi fue hace dos años– Joshua asintió afirmando el hecho – lo mismo de siempre.
Solo después notó la presencia de la persona cerca de Joshua.
–¿Cómo está la señora Astrid estos días?
Joshua se quedó perplejo. No esperaba en absoluto que después de dos años el dueño del restaurante recordará a Astrid a quién solo había visto una sola vez. Recordó que cuando trajo a Astrid aquí por primera y última vez, el dueño había estado preguntando por qué la persona que vino antes con él no había venido.
Mirando la cara pérdida de Marilyn, Joshua respondió fríamente – Señor, ella no es Astrid– el dueño sabía, había dicho algo incorrecto, se apresuró a disculparse y ya no dijo nada más.
Joshua, en estado de pánico, abrió la boca para explicar – Marilyn, escucha mi explicación, la señora Astrid, es una cliente, su nombre es Astrid White… Lo traje aquí hace dos años y no he vuelto a traer a nadie desde entonces.
Entonces un cliente, pensando en esto, Joshua se rio fríamente, ¿Cómo podría ser ese desperdicio ser un cliente?, Traerla aquí la última vez fue una molestia.
Para esa persona era mejor solo darle una sopa instantánea para que viviera.
Marilyn levantó la cabeza lentamente y miró a Joshua, en su rostro se veía claramente la tensión, pero ella soltó un suspiro de alivio.
–Tú, este lugar es nuestro secreto, ¿Cómo puedes traer a alguien más aquí?– después de escuchar la explicación de Joshua, se sintió aliviado su corazón y no le importo demasiado.
Sin embargo, está comida se sentía diferente al pasado, como si algo faltará.
Después de comer, Joshua llevó a Marilyn a otra de sus propiedades, otra villa privada.Al llegar Marilyn miró a su alrededor, pronto recordó que no parecía ser el mismo lugar al que Joshua la había llevado la última vez. Aunque solo había estado en su casa una sola vez antes, podía estar segura de que definitivamente no era aquí. Este era otro lugar.Pero Marilyn no preguntó, estaba segura de que Joshua debía tener sus propias razones para traerlo aquí, y ella simplemente confiaba en él, porque nunca la había defraudado antes.En el momento que encendió la luz, la habitación emitió lentamente una luz púrpura, salpicada de diminutos puntos de luz, como si fuera un cielo estrellado.–¿Esto es?– Marilyn miró sorprendida a Joshua, !Así que todavía se acordaba¡Hace cinco años, es decir, cuando ella y Joshua se conocieron por primera vez dijo casualmente que le gustaba el cielo estrellado y Joshua lo recordó durante esto cinco años.–esta es mi otra casa. Recuerdo que antes dijiste que te
–¿Mari?– Mirando el indicio de pérdida en la cara de Marilyn, Joshua maldijo a Astrid un millón de veces en su corazón. M*****a sea. –Está bien, mi mano está un poco fría, puede que te congele– Marilyn tampoco esperaba que lo evitara inconscientemente, su corazón estaba arrepentido. ¿Qué le pasaba, cómo podía sospechar de él?, debía tener alguna razón para no contarle ahora. Cuando el asunto se resolviera, se lo contaría definitivamente. –Tonta, qué palabras más tontas. Todo es culpa mía por tenerte aquí tanto tiempo– Esta vez, Joshua tomó directamente la mano de Marilyn. Y cuando las cálidas yemas de sus dedos tocaron la fría mano de Marilyn, el corazón de Joshua pareció ser agarrado por alguien. Sujetando su mano un poco fuerte, no podía esperar a sujetarlo más fuerte para mantenerlo caliente. La noche se va enfriando y la habitación se va oscureciendo poco a poco. La luz lavanda es un poco oscura y Marilyn no puede ver la habitación con claridad. De repente la habitación se ilumi
La mano de Marilyn no se soltó debido a las palabras de Joshua– ¡No te vayas! ¡Te lo ruego! Solo por hoy, quédate conmigo. Incluso si te quedes con ella mañana o en el futuro, solo por hoy, ¿puedes ser solo mío?– Marilyn se atragantó, ¿por qué las cosas resultaron así?, ¿Por qué volvió y Joshua ya era de otra persona? –Tonta, no digas tonterías, siempre te he pertenecido. Me divorciaré de ella. Mañana y luego nos casaremos, ¿de acuerdo?– Joshua se dio la vuelta y ahuecó suavemente el rostro de Marilyn, mirándolo con ternura. –¿De verdad?– Preguntó Marilyn temblorosamente. La repentina felicidad le hizo sentirse en un sueño irreal. Joshua limpió suavemente las lágrimas de la cara de Marilyn y dijo con firmeza –Sí, espérame. La simple retórica reforzó la determinación de Marilyn. Esta vez, nunca lo dejaría ir. No importaba quién fuera la otra parte, nunca entregaría a Joshua a nadie más, Joshua, el hombre que ocupó la mitad de su vida, solo podía ser de Marilyn. El Maserati negro
–Sánala rápido– La voz de Joshua parecía aún más fría en la sala vacía. Era simplemente un tono de mando, sin dar opción a la otra parte. Aunque no sintiera nada por Astrid, no permitiría que le ocurriera nada, de lo contrario, ese acuerdo de divorcio nunca sería válido. Siempre viviría como el marido de Astrid, y ese grillete invisible siempre lo aprisionaría. Aunque quisiera morir, Joshua tiene que esperar a firmar el acuerdo de divorcio. El médico no dijo nada, asintió con la cabeza y volvió a la sala de operaciones. Como médico, por supuesto, tiene que hacer todo lo posible para salvar al paciente. Esta persona frente a él, todavía debe ser respetada y permanecerá alejado de él. El secretario se limitó a permanecer al lado de Joshua sin decir una palabra. Sin las órdenes de Joshua, no se atrevió a actuar sin permiso. La luz quirúrgica roja se apagó finalmente luego de horas, seguida de una cacofonía de ruido. El médico que acababa de entrar dio un largo suspiro mientras camin
Después de esa ocasión, Astrid no volvió a mencionar el tema. Como si ese nombre fuera como una historia infantil con moraleja que no permitiría que nadie tocara, ni siquiera él mismo. Y más tarde, ese nombre tampoco fue mencionado por la familia de Joshua, y Astrid dio por sentado que tal vez Marilyn era alguien que Joshua odiaba, y por eso reaccionó de tal manera. Pero desde aquel día en que Joshua tomó la iniciativa de pronunciar la palabra Mari, fue como si se despertara. Esa persona llamada Marilyn nunca podría ser alguien a quien Joshua odiaba, si realmente hay odio, ¿cómo podría pronunciar su nombre en esa situación? Cuando el secretario le dijo que Joshua había ido a recoger a esa persona llamada Marilyn, estuvo aún más seguro de que Joshua sentía algo por ella que no podía decir, pero en cuanto a lo que era, no podía estar segura todavía. Sin embargo, tenía miedo, tenía mucho miedo. De repente, la agradable voz de Joshua llegó a su lado: –¿Por qué lloras?– Solo entonces As
–Lo siento, Sra. Astrid, no estoy muy seguro de los asuntos de la Srta. Dean, solo sé que ella y el Sr. Joshua son solamente compañeros de clase de la universidad desde hace mucho. Espero que pueda descansar temprano– Al escuchar lo que dijo el secretario, Astrid no siguió preguntando, sabía que aunque preguntara, no saldría nada. Mirando por la ventana como oscurecía poco a poco el cielo, la figura de esa persona estaba en su mente de nuevo. Sí, la primera vez que lo vio, estaba en el hospital. Un día, hace tres años. No hacía mucho que la madre de Astrid acababa de caer en coma. Sucedió que Astrid volvió temprano ese día, y después de un simple saludo al guardia de la clínica, iba a saludar a su madre como siempre. Justo en ese momento, una persona entró repentinamente en la sala. Esa persona iba vestida de negro, lo que desentonaba con el blanco limpio de la sala. Vio entrar a otra persona detrás que también vestía de negra. Un anciano para ser exactos. Solo después supo Astrid
–¿Cómo está tu enfermedad ahora? ¿Te sientes mejor?– Michael miró con preocupación a la hermosa mujer que tenía delante, ¿cómo había llegado a ese estado? Astrid sonrió acaloradamente –Ya estoy bien senior, el doctor dijo que en dos días más puedo ir a casa a recuperarme completamente. –Eso es bueno– dijo al escuchar la noticia de que Astrid estaba bien, Michael dio un suspiro de alivio – Por cierto, esto es para ti – Levantó la bolsa que tenía en la mano – es tu favorito de carne y abundantes papas, recuerdo que te gustaba el que hice antes– Al mencionar una de sus comidas favoritas, los ojos de Astrid se iluminaron. Entonces se dio cuenta de que el senior también estaba sosteniendo un aislante térmico no tan pequeño en su mano... recordó que se la regaló en ese momento. Cuando el senior se lesionó jugando al baloncesto, Astrid se lo dio. No esperaba que, después de todo este tiempo, la siguiera usándolo. Tomó el termo aislante, dio las gracias, y lo probó. Realmente seguía sab
Un par de lágrimas claras corrieron por el rostro de Michael mientras lloraba desgarradoramente, ¿por qué tenía que hacer esto? Joshua miro triunfante a Michael, que estaba arrodillado frente a él –¿Has oído eso? No quiere volver a verte, así que te dejaré libre hoy. Si te vuelvo a ver seduciendo a mi esposa, no te perdonaré– Dando una mirada al secretario, –Llévalo a curar su mano– Entonces, Michael fue sacado por el secretario. Astrid miró distraídamente el lugar donde Michael acababa de arrodillarse. Su cuerpo tembló involuntariamente, se abrazó con ambos brazos, estaba realmente asustada. Al ver a Astrid así temerosa, el humor de Joshua mejoró de repente, ¿esto es cierto?, el personal no relacionado en esta sala debería haber salido hace tiempo. Camino junto a Astrid y le miró con cara amable –Bien Astrid, el suelo está frío, te ayudaré a subir a la cama. Con eso, levantó a Astrid y la llevó a la cama del hospital. En ese momento, el apuesto rostro de Joshua apareció de repente