~Pov de Helena~
A la mañana siguiente despierto con los rayos del sol que ingresan a la habitación, estirando mi mano noto que Cristopher no se encuentra a mi lado.
>>Podría acostumbrarme a esto<<
Sonrió mientras me levanto y estirando mis brazos salgo al balcón. Desde allí observo que el está trotando a orillas del lago sin camisa mientras el sudor baja por su cuerpo.
Trago saliva y regreso rápidamente a la habitación con mi rostro sonrojado mientras me dejo caer sobre la cama ahogando un gritó en la almohada.
>>Ahhh... Es tan sexy<<
Despues de tranquilizarme desciendo a la cocina dónde bebo un vaso de jugo porque tengo algo de resaca. Estando allí sumida en mis pensamientos él ingresa secando su sudor con una toalla.
—Ya estás de pie ¿Cómo estás? ¿Te duele la cabeza.
Se acerca con su sonrisa y acomoda mi cabello detrás de mi oreja.
—Buenos días, no solo tengo un poco de resaca pero comiendo ya estaré mejor—respondo.
Cris amplia su sonrisa mientras toma mi mano.
—Que bueno