Gracias por su paciencia. Me tomé unos días libres, espero que disfruten este capítulo.
PDV Luka. –¿ Pasó algo, por qué me llamas a esta hora? – pregunté tanto nervioso como extrañado ante la llamada de Christine. – Casi va a amanecer Luka y no has regresado, recuerda que estamos en casa de mis padres. – Lo que me faltaba, tener hora de llegada – le espeté. – Tu sabías Luka, no seas latoso – bajó la voz y la puso más melosa, para que no me molestara – será mientras que estemos aquí, esposito. Te lo recomendaré – Lo olvidé, Ok, ya salgo para allá.– suspiré profundo. – No tardes, te deje salir por mucho tiempo – dijo riendo. – Te estás tomando muy en serio tu papel. – Tú deberías hacer lo mismo querido, así que. Apúrate, suelta a esa que tengas de turno. – ¿Y hasta celosa me saliste? Su carcajada me contagió y reímos juntos. – Voy saliendo, en unos minutos estaré allá – colgué. Me pasé la mano por el cabello frustrado, aún cuando me ríera de sus ocurrencias, lo cierto era que este favor me estaba costando much
PDV Narrador. Pilar se sentó en la cama de su recamara para invitados a despertar a su amiga que seguía dormida, estaba emocionada por contarle su experiencia. – Vamos, Bella durmiente, despierta – exclamó pasando la mano por la cascada de cabellos que le cubría la cara de su amiga. – ¿Qué hora es? – respondió Isabel desperezándose. – Las tres de la tarde, ¿no tienes hambre? Te hice unas tostadas con ensalada de frutas. – ¡Oh, Por la virgen! Qué tiene esta cama que me hace dormir tanto. Dijo y ambas se rieron. – Déjame verte – pidió Isabel, ya levantada de la cama – Pilar, la sonrisa sin duda me dice que tuviste una noche con un buen orgasmo. Esta última se sonrojó antes de responder. – En realidad cuatro más que buenos orgasmos. Con la boca abierta de par en par Isabel solo podía parpadear ante su amiga que relucía aún trasnochada y sin maquillaje. Solo con un pantalón de mezclilla beige y una franelilla negra de tiros. – Déjame po
PDV Narrador. La respuesta la obtuvo al ver cómo su amiga la veía aguantando la respiración, así que se animó a continuar. – Isa, lo digo por tu bien, no es para que te cases, pero necesitas relajarte, darte una noche libre de tu perfecta lista y disfrutar. Tienes 27 años. – ¿Recuerdas que estoy saliendo con Leone? ya falta poco para que se mude a Madrid. – Ah, lo olvidaba. Mister perfecto, el que no te ha tocado más allá de la mano – le dijo con una perfecta ceja marrón claro levantada. – Es un caballero, no se ha querido adelantar. – Nenita, estamos en el año 2019 no en el 1919. Bueno, en fin, yo tú, hoy le diera un bocado a ese bombón de Luka, antes de oficializar la relación con míster perfecto. Total, quizá no lo vuelvas a ver más nunca en tu vida. – Regresa a Madrid así no tendré que volver aquí y estaré segura de no encontrarlo más. – Uuuhh, con que lo pensaste, así me gusta. – respondió la pelirroja haciéndole un baile a su amiga, luego
PDV. Isabel. Esa noche para evitar que Luka dijera que estaba fuera de lugar vestida, opté un mini vestido azul eléctrico como sus ojos, el cual no supe como terminó en mi maleta y unas sandalias de tacón de aguja plateadas con trenzas que subían cruzadas por toda mi pantorrilla. Me dejé el cabello suelto que caía en ondas y un maquillaje en ojos ahumados entre azul y negro, mientras que mis labios opté por un color nude con brillo. Cuando me apreciaba en el espejo me pregunté cómo fue que pensé en ese hombre mientras me vestía. "Será porque quieres que nos desvista " Habló mi consciencia porrista (CP) por primera vez en todo el día. Esta vez me sonreí ante su comentario, quizá no estaba tan alejada de la realidad. Esperé a Pilar hasta las nueve y media y nada que llegó, ya la había escrito par de mensajes que no respondió y no quise llamarla por si estaba ocupada. Así que me fui a D' Noir para no perder nuestra mesa, tal como me lo había pedido, decidí tomar un t
PDV. Narrador. Luka no podía creer que le estuvieran sudando las manos por los nervios, no sabia cuándo había sido la ultima vez que había estado tan nervioso, bueno sí, hace unos pocos meses atrás cuando tuvo que decir: sí acepto, pero este era otro tipo de nervios. Estaba sentado en su oficina en el segundo piso D' Noir aun no podía salir, debía aprobar el pago del DJ del fin de semana y a otros proveedores de licores, pero eso era pan comido para él, realmente su mente estaba a la expectativa de saber si lo que le compró a la niña bonita le gustaría. Sin duda se lo pidió a Christine quien también tenía un excelente gusto para la ropa. No se dio cuenta que había llegado hasta que ya estaba tomando de su copa y con la otra mano tenia el pequeño pero elegante top. Hoy sí que estaba sexi con esa falda pensó Luka y sonrió pensando que ayer le había dicho a la española que tenía un look muy serio solo por molestar, porque la verdad era que se veía sexi con lo que s
PDV. Narrador. – Con que esas tenemos – le respondió Luka juguetón y apretó la retaguardia de ella. Las manos de Isabel bajaron hasta la entre pierna de él la cual parecía una asta queriendo salir del pantalón, lo empezó a acariciar de arriba a abajo, él sin quedarse atrás empezó a jugar con el botón de placer que ella ya tenía húmedo. Escuchándole un nuevo gemido que hizo que Isabel vibrara entre sus hábiles manos. Sin esperar más sabiendo que la española estaba más que lista para él, sacó de su bolsillo un preservativo no por temor a una enfermedad pues todos ahí debían estar sanos, sino por pánico a un hijo no deseado, lo extendió sobre su hombría erecta, mientras ella permanecía allí sentada mirándolo con ansias hasta que se fijó en los dedos de sus manos. En ese instante la CI de Isabel salió a flote por lo ella puso una mano en el pecho de Luka. – ¡Espera! – exclamó con la respiración rápida. – no eres casado, ¿verdad? – le preguntó rogando que respo
PDV Narrador. – Déjalas – pidió ella – nunca he tenido sexo con los zapatos puestos – dijo mirándolo con las cejas alzadas. – OK, acepto ser tu primera vez – respondió, sonreído terminó de desvestirse, mientras ella estaba recostada en sus brazos mirándolo con descaro. “Viste que parece un adonis, oh Dios ¿le viste ese tamaño?” comentó la consciencia porrista saltando y dando piruetas de cheers leader' “Cállate” le respondió la C.I, quien quería retomar el libro, pero sería un pecado no ver al modelo que se estaba desvistiendo frente a ella, “lo estoy viendo y pues por fin estamos de acuerdo'” “Ves y tú que te querías ir, menos mal que esta no te hizo caso por fin”. Respondió CP moviendo las caderas al ritmo de una salsa. – Las estoy escuchando – dijo Isabel a su interior que al parecer estaban en cortocircuito. Pestañeó para concentrarse en el Tarzán que tenía ante ella con cuadritos incluido. Él caminó hacía un mueble que estaba frente a la cama y encendió el equipo es
PDV Narrador. Ella lo vio absorta de su magnifico cuerpo parecía un guerrero troyano y también se fijó que le había marcado las uñas en la espalda y su gran trasero. Se quedó dormida sonrojada ante su propia actitud con este hombre que acababa de conocer, ojalá viviera en España, pensó antes de caer rendida en un sueño con unos ojos azul eléctrico. El repique de un teléfono la despertó y se levantó apenas con un ojo abierto en búsqueda de su teléfono. Quizá Pilar la estaba llamando o peor aún, Leone. Alcanzó el teléfono y cuando iba a contestar vio la imagen de una rubia cabello corto sonreída con la palabra "esposa" llamando. De pronto como si le hubiesen echado agua fría en la cara, despertó y enfocó bien, no era su teléfono, era el de Luka y lo estaba llamando su esposa. La rabia se apoderó de ella, su CI y CP se vieron a la cara sin entender y ella buscó su ropa con la poca luz que entraba del amanecer, las lágrimas se asomaron en sus ojos miel y con ella l