Cap. 4 No va a ser fácil.
Emily comienza a trabajar en la mansión Evans, allí solamente vivían el padre y su pequeño hijo.
Aunque Dean, seguía con sus aires caprichosos y su actitud de niño mal criado, ella se llenaba de paciencia para poder conservar el trabajo, trataba de manejar sus desplantes, y su falta de aceptación.
Quería darle el amor que por el día no podía brindarle a su propio pequeño, pues todo el día debía dejarlo en casa de Sam, al cuidado de otras personas.
Ya había pasado una semana desde que su rutina comenzó, y aunque sentía que se iba a volver loca en poco, sólo había algo que la motivaba, llegar a ver los ojos de su amado Ángel.
- ¿Cómo te fue hoy querida? - Sam le entrega a su pequeño.
-Hola Sam, bien muchas gracias- ella recibe a su hijo, y lo llena de besos- no se cuánto lo resista, pero creo que tratare de que sea un buen tiempo.
-Hija, debes entender que Dean y Frank tuvieron una pérdida muy grande, es algo aun relativamente reciente, quédate allí, con el tiempo el niño te tomará afecto
- ¿Usted cree que sea así?
-Claro que lo será- él le sonríe, los conocía de hace años, aunque simplemente atendía la tienda, conocía a Frank a la perfección.
Ya era viernes, el último día de la semana, y Emily rogaba por volver a casa a ver a su hijo, pero ese día fue diferente, las cosas en la casa Evans tendrían un cambio.
Ella estaba con Dean en su cuarto haciendo los deberes, cuando siente que alguien llega.
- ¡Hola, mi hermano! ¿Cómo estás? Tanto tiempo sin verte.
Bruno Evans, era el hermano mayor de Frank, desde que su esposa había muerto no había ido de visita, ahora tenía unos negocios en la ciudad y se quedaría allí unos días.
-Hola Bruno, yo estoy bien ¿y tú?
-Como ves mi hermano, a la perfección, ¿Dónde está mi sobrino?
-Está arriba.
Frank no se la llevaba muy bien con su hermano, pero no se negaba a la idea de que pasara unos días en su compañía.
Tal vez eso le ayudaría a mejorar su genio, en seguida Frank llamó a Emily para que trajera su hijo.
Ambos bajan por las escaleras, pero Bruno solo pudo concentrar su atención en la mujer que cuidaba a Dean.
Para él era una niñera bastante atractiva y sin medir reparo, de una vez manifestó su interés por ella.
-Vaya hermanito, que bien que hemos comenzado a seleccionar mejor el personal- la devora con sus ojos, la mira de arriba abajo- y tú pequeñito, ven para acá- toma a Dean de los brazos y lo alza, pero el niño no da ni una sola muestra de alegría.
-No le gustan las visitas- Frank interviene.
-Pero si soy su tío, ya se acostumbrará, mi campeón- Frank tuerce los ojos, como si hubiera hecho méritos para que el niño lo quisiera- pensó para él mismo.
-Si supongo, ven, vamos al estudio y hablaremos.
-Espera, primero preséntame a la niñera- él le guiña un ojo.
-Ah si, ella es Emily, Emily es mi hermano Bruno, se quedará aquí por unos días.
Bruno se acerca a ella para darle la mano, pero ella se escuda en que las tiene ocupadas alzando a Dean, así que simplemente le da una sonrisa fingida, se había sentido realmente incómoda por la forma en que la miraba.
- ¿Vamos? -Frank lo increpa.
-Claro vamos- Bruno no deja de observar a Emily, pero su mirada no era para nada agradable, él hermano de Frank tenía fama de mujeriego y también de acosador, y por lo visto Emily, se estaba avistando a ser una de sus víctimas.
- ¿Cuánto tiempo estarás en la ciudad? - Frank le sirve una copa de alcohol a Bruno.
-No lo sé aun, pero si te incomoda que está en la casa que era de mi padre, no hay problema, me iré al apartamento de soltero que tengo a las afueras.
- ¿Siempre tienes que hablar de la casa de mi padre? -Frank frunce el ceño
-No comprendo porque te dejo la mansión al morir, si sabía que ya estabas a cargo de la empresa y tu capital es enorme- había un poco de resentimiento en sus palabras.
-Imagino yo que no hiciste lo suficiente para ganártelo, siempre derrochaste dinero y vendiste todo lo que mi padre te dio, todos tuvimos partes iguales de la herencia.
-Como sea, ¿puedo quedarme aquí o no?
-Claro que si Bruno, eres mi hermano- Frank de manera hipócrita acepta que se quede, lo hacía nada más por respeto a la memoria de su madre, quien siempre le pidió que no dejará desamparado a su hermano.
-Será por poco tiempo, lo prometo, un par de meses tal vez.
-Quédate lo que necesites- Frank sale del estudio dejándolo solo, aunque le había dicho que se quedara el tiempo que quisiera, deseaba que se fuera en ese instante, pero lo conocía, sabía que en pocos días migraría, su hermano no era de estar en un solo lugar.
Contrario a lo que él pensó, los días fueron pasando y la presencia de Bruno seguía presente en la mansión, esto no solamente incomodando a Frank, sino que también a Emily, que se sentía asediada por él.
Bruno aprovechaba las ausencias de Frank para molestarla, hasta un punto que ella no podía soportarlo.
-Eres muy hermosa ¿sabías?
-Permiso señor, debo ir a llevarle estas mantas a Dean.
-El niño está dormido, deberíamos aprovecharlo tú y yo.
- ¿Aprovechar?
-Si, ya sabes a qué me refiero, no puedes negarte, todas las mustias como tu saben cómo complacer un hombre- Emily sentía como sus mejillas ardían de la ira, pero sabía que debía conservar su trabajo
-Con permiso- ella se quita de su presencia, pero él la tomó por el brazo, halándola hacia él
- ¿Para donde crees que vas pequeña? Yo soy el hermano de tu jefe y conmigo debes ser complaciente.
-Señor, me está lastimando, suélteme por favor- los ojos de Emily se aguaron inmediatamente, ese hombre la estaba acosando y posiblemente quería abusar de ella.
-Me gusta como huele tu miedo, ¿te excita que te esté tomando salvaje?
-Por favor suélteme, o tendré que gritar- en ese momento Emily comenzó a forcejear con él, Bruno evidentemente tenía mucha más fuerza que ella, asi que de un solo empujón hace que se caiga al piso, ella como puede se levanta y sale corriendo, Bruno sale detrás y nuevamente la toma por el brazo.
-Mucho cuidado con decirle algo a mi hermano, porque te juro que te hago echar, ¿entendiste?
- ¡Si le voy a decir! - ella lo mira desafiante
-No, no lo harás, nadie va a creerte, a ver, mírate y mírame, soy el hermano del dueño y señor de esta casa ¿crees que alguien le dará crédito a tu versión? ¡Claro que no!, ahora vete con mi sobrino, después completaremos esto pendiente.
Emily se suelta como puede y sale corriendo a la habitación de Dean, el niño aún duerme y ella siente cómo su corazón se quiebra, de repente estaba en una encrucijada.
Si ese hombre seguía en esa casa posiblemente abusaría de ella.
Pero si ella lo acusaba la haría despedir, y ahora ese era un lujo que no podía darse. Pues sus obligaciones con su hijo cada día eran más grandes, y muy pocas sus posibilidades.
No tuvo más alternativa, que hacer de cuenta que no había pasado nada, lejos estaba de imaginar, que ese sería el comienzo de un verdadero infierno.
Cap.5 Un fin de semana desesperante Emily esta lista para salir a su fin de semana de descanso, después del bochornoso encuentro con Bruno, lo único que quiere es salir de allí y ver a su bebe.Ángel ya iba a cumplir 3 meses de nacido, pero prácticamente pasaba la mayoría de tiempo con Sam y su esposa, ella solo lo podía disfrutar el fin de semana. Ya casi esta lista para salir, pero Frank la detiene. -Emily, necesito que me ayudes con Dean este fin de semana, tengo un evento exclusivo, y no puedo llevarle, te pagare los días extras-él ni siquiera le consulta si ella está disponible. -Señor, disculpe, pero usted sabe que tengo un pequeño bebe al que no puedo descuidar, y estos dos días son para pasarla con él. - ¿No leíste la letra pequeña de tu contrato? ¿verdad? -él la mira con seriedad y apatía. -No, ¿a qué se refiere? -Que, siendo niñera de Dean, cuando yo lo requiera debes estar disponible las 24 horas para su cuidado- en ese momento ella palideció, efectivamente no había
Sin embargo, no pudo resistir el peso de sus ojos y se quedó dormida, en el frio de la madrugada siente como está siendo observada, y no estaba equivocada, de repente da un sobresalto, y siente como un frio y nauseabundo aliento estaba frente a ella. Cuando sus ojos se abrieron, intento gritar, pero una mano le tapo bruscamente su boca. -Shh, pequeña, no grites porque vas a despertar a los niños, y no los necesito despiertos para lo que queremos hacer.- ella solamente mueve su cabeza, y sus ojos en señal de negación. Bruno la toma por el brazo y la saca de la habitación, ella intenta zafarse, pero siente como algo le está apuntando en su estómago. Él sin pensarlo dos veces la mete a su habitación, que estaba solo a unos cuantos pasos de donde estaban los niños. -¿Qué…que es eso Bruno? -Hoy vas a ser mía, quieras o no quieras- ella lo mira despavorida, no solo por el arma, sino por lo que él tenía pensado hacerle, la sola idea de un abuso, y más con los niños en casa, le provocab
Frank llega directo a la habitación de Bruno, ni siquiera toca su puerta, sino que sigue derecho, él estaba durmiendo, pero el sonido lo despertó. - ¡Buenos días hermanito! - Bruno aún estaba somnoliento. - ¿Qué tienen de buenos? ¿me puedes explicar por qué razón te llevaste a mi hijo ayer sin mi permiso? -Porque soy su tío, pensé que podía hacerlo, además estaba algo solo, la niñera estaba durmiendo mientras le daba de comer a su bebe, no le vi nada de malo en llevarme el niño - Bruno lo mira como si se tratara de algo completamente normal. - ¿O sea que Emily no tenía idea de que el niño estaba contigo? - eso hizo que Frank ardiera más en ira. -No, pero no nos demoramos, fue mi culpa, no fue culpa de la niñera, te conozco no vayas a tomar represalias con ella. -Ya mismo la voy a despedir, y a ti te sugiero, más bien te exijo, que con mi hijo no vayas ni a la esquina, ¿entendiste? - ¿Cuál es tu desconfianza hermanito? -Que se perfectamente la clase de hombre que eres, y no con
Sam habia decidido irse de viaje a donde uno de sus hijos, no soportaba la ausencia de su esposa, dejando a Emily completamente sola, él se habia convertido en su apoyo, pero no soportaba la ausencia de su mujer. Los días pasaban, Emily tocaba todas las puertas que podía para conseguir un empleo, pero nadie la aceptaba con su pequeño, resignada a que no conseguiría nada, simplemente decide hacer lo que una mujer con su fuera haría. -A ver pequeñito, debemos ir a trabajar, ¿sabes cuál era el sueño de tu abuela? Ella quería tener una gran floristería, pues bien, vamos a cumplir ese sueño- Ángel solamente le sonríe, el pequeño no tenía ni idea de que era lo que hablaba su madre, sin embargo, ella lo abriga bien contra el frio, habia comprado una pequeña carreta, y un arsenal de flores sencillas para la venta, habia puesto su ultimo capital, esperanzada en que haría dinero con que comer. En algun momento de su vida, cuando su esposo estaba presente, salir a vender a las calles sería al
Mientras tanto Frank-Papi, quiero que te quedes, no quiero estar mas con Greis- Dean esa mañana no quería despegarse de su padre, ya habia pasado casi un mes desde que Emily se habia ido de la mansión, y para Frank, conseguir una niñera para su pequeño, se habia vuelto casi que un reto.-Dean, hijo, ya te lo he dicho, papi tiene que ir a trabajar, porque tiene muchos compromisos, pero buscaremos una niñera que te cuide.-Es que quiero jugar papi, desde que se fue Mily no he podido jugar- Dean cabizbajo recuerda los momentos que pasaba con su antigua niñera.- ¿Mily? ¿quién es Mily?-Papi, ¡Emily!, le decía Mily de cariño, ella me dejaba decirle asi.Frank se queda pensativo, Dean jamás recordaba los nombres de las niñeras que lo habían cuidado, comprendía en ese momento que no solamente él extrañaba la presencia de Emily en su casa, sino que también posiblemente su hijo.-Bueno pequeño, no te preocupes, que ya encontraremos una niñera que también juegue contigo como lo hacia ella- él
La vida para unos, no es la misma que para otros Más tarde, esta Frank parqueado frente a la casa de Emily, siente como un frio le invade su pecho al ver su humildad, aunque no era un lugar feo, era una casa pequeña, de color azul claro y sin una fachada llamativa, por un momento pensó que era imposible que ella viviera allí.Se quedo sentado en su auto por mas de diez minutos, no sabia que era lo que estaba esperando, lo piensa una y otra vez para bajarse e ir a golpear a su puerta. Pero, después de meditarlo varias veces, decide irse, sin embargo, su opinión cambia, cuando ve que ella sale sola de su casa, tenía una pequeña maleta, se le notaba por la expresión de su rostro que no la estaba pasando nada bien, en un descontrolado impulso, se baja rápidamente del auto y se acerca a ella.-Señorita Emily- cuando ella escucho la voz de su adonis, no era creyente, y siguió derecho, pensó que el cansancio le estaba jugando una mala pasada.-Emily, por favor espere- Frank cruza la calle
Continuos sufrimientosPor fortuna para Emily, la salud de Ángel habia mejorado, y aunque insistió muchas veces para que le dieran información acerca de esa generosa persona que habia pagado todos sus gastos en el hospital, se negaron en decirle de quien se trataba.Aunque habia sido una casualidad el encuentro repentino con Frank, lejos estaba de creer que era él quien habia tenido ese acto tan generoso con ella, pues un hombre tan gélido y frio como lo era Frank Evans, no tendría ninguna razón para ayudarle.-Que fortuna que estas bien mi pequeño, pero tendremos que buscar un lugar para que te cuiden, no puedo seguir vendiendo flores en la calle contigo-Emily esta embelesada con su bebe, cuando de repente tocan a su puerta. Ella se asoma por la ventana para ver quien es, se trataba de un hombre en traje y corbata, tenia un portafolio y unos documentos en sus manos, ella le abre enseguida.-Si dígame ¿en que puedo ayudarle?- ¿Es usted Emily Willys?-Si, soy yo, ¿quién es usted? - el
Regresando a la mansiónEmily aceptó finalmente la propuesta de Frank, y en dos días regreso a la mansión, nerviosa por no saber a lo que se enfrentaría de nuevo, el sueldo que recibiría le ayudaría a mejorar su vida, así que ya no lo pensaría dos veces.-Bueno Emily, muchas gracias por volver, de ahora en adelante yo regresare mas tarde a la mansión, tengo demasiado trabajo pendiente, no he podido concentrarme lo suficiente- No se preocupe señor, lo entiendo, tratare de hacer hasta lo imposible porque Dean este bien.-Gracias Emily, posiblemente llegare tarde esta noche, tengo una importante reunión, pero apenas acueste a Dean, se puede ir para su casa, mi conductor la puede llevar- ella ya prácticamente se habia pasado a vivir en la fundación por caridad, y le daba vergüenza de que él que se enterara.-No se preocupe, yo tomare un taxi.-No tiene que exponerse, el conductor la llevara, simplemente eso de las 8 de la noche se puede ir, pagare sus horas extras-Frank quería que ella s