Matilda despierta en una celda, la misma de aquella ocasión, ella se siente incómoda y con miedo, pero de pronto las celdas se empiezan a abrir, ella se pone contra la pared con miedo, pero cuando las puertas se abren nadie entra.
Ella sale un momento, fijándose por los largos pasillos, todas las celdas se encuentran abiertas, es de noche y solo las lámparas del techo iluminan los pasillos, un trueno se escucha, asustando a Matilda, quien se hace para atrás, pero algo es distinto, las celdas ya están cerradas, lo hicieron sin hacer un solo ruido, ahora solo le queda caminar.
Sus pasos se escuchan con un gran eco, algunas luces empiezan a destellar, ella empieza a sentir un frio que recorre su espina dorsal, en ese momento escucha las risas de los dos hombres que abusaron de ella a lo lejos, ella se asusta y se pone contra una celda.
- ¡Esta si es de las que me gustan! ¿Tú qué opinas? – dice el eco de uno de ellos
- ¡Perfecto! ¿Quién será el primero? -
Reiner se encuentra sentado en la cama de su habitación, bebiendo un trago, su rostro denota preocupación, a su lado tiene un walkie walkie encendido, está esperando un mensaje, de pronto este empieza a sonar a estática y él lo toma para recibir el mensaje. -Está hecho. - suena en el radio, el cual deja de transmitir, eso es todo lo que necesitaba dar a entender y Reiner lo hace de inmediato, él bebe aún más a la par de que lagrimas empiezan a salirse de sus ojos, ha hecho algo que no quería, a cambio de salvar el Santuario. Reiner deja el walkie talkie sobre una mesa, del otro lado de la comunicación, quien tiene el otro walkie talkie lo guarda en su bolsillo delantero, es Isaac. -Ahora solo queda una cosa más por hacer- dice Isaac mientras que enfrente de él, sentada enfrente suyo y con una bolsa de cuero cubriendo su cabeza se encuentra Sarah, ambos están en un vehículo conducido por sus soldados. Isaac sonríe. Edward y Zack mantiene
Tras un viaje de varias horas, varias camionetas preparadas para una situación de emergencia llegan a lo que parece ser el refugio de la Legión, es un pequeño barrio muy bien amurallado con torres de vigilancia, hay varios soldados en cada una alumbrando con linternas, no es un sitio fácil de ingresar. - ¿Todos listos? - pregunta Zack. Aiden le señala con el pulgar hacia arriba, en eso Zack y Jacob avanzan mientras que los francotiradores del grupo de Aiden apuntan a los vigilantes. -Disparen. - dice Aiden. Los francotiradores aciertan en los blancos, dejando paso libre a que los demás miembros coloquen escaleras en los muros, Matilda acompaña a uno de los grupos mientras se adentran en el refugio. Zack avanza por dentro con un arma silenciada, Jacob va con él. - Aquí nos separamos…-dice Jacob, Zack le indica -Cuidado, recuerda lo que debes hacer.- Jacob se separa de Zack, dirigiéndose hacia una zo
-En esta época del año el frio aumenta de manera insoportable, la nieve empieza a cubrir todo sitio y la comida es más difícil de conseguir, por suerte los grupos de sobrevivientes son más inactivos, pues es en verano cuando solemos verlos salir y ser una amenaza; gracias a Dios no moriré de un disparo en la cabeza, mi nombre es Sarah…y mañana tendre mi primera expedición fuera de Covenant.Sarah termina de escribir en su diario, al subir la mirada observa su ventana, la nieve empieza a cubrirla por completo y la sensación de frio se empieza a notar por la habitación, da la vuelta en su vieja silla con ruedas y mira su reloj, las 10:00 PM.Sarah camina lentamente hacia su pequeña estufa de leña, calentándose un poco, cubriendo su largo cabello rubio tan claro que hasta podría ser blanco. Con su diario en mano lo pone encima de un estante, sus notas por si muere, un
El grupo se encuentra en camino a las cercanías de Boston, para Duck es un viaje rutinario más del montón, nada nuevo que ver, para David y Verónica un paseo sumamente aburrido, para Sarah un nuevo mundo. - ¿Y si no encontramos nada? - pregunta David por simple curiosidad, a lo que Duck como líder nato ordena -Llevas preguntando eso desde hace una hora, cállate. - - ¿Y si encuentro una lata de comida y me da hambre? - vuelve a preguntar David con curiosidad, tentando a la paciencia de Duck, quien solo responde -David…- - ¿Y si aparece una criatura y me dan ganas de orinar? - vuelve a preguntar David, en este punto Duck y las chicas ya se encuentran un poco fastidiados -David. - dice Duck algo serio. - ¿Y si la criatura quiere orinar? - vuelve a insistir Duck, detrás de él, Verónica y Sarah fantasean con ahorcarlo para que se calle, pero David vuelve a las andadas. - ¿Me tengo que esperar a que termine o corro antes de que termine de or
Sarah se encuentra con la mano de ese sujeto llamado Zack cubriendo su boca, este hombre es más alto que ella, pero su aspecto es joven de cabello castaño y largo.-Te soltaré, pero no grites…necesito que me ayudes- dice el, a lo que Sarah solo puede asentir con la cabella, Zack la suelta y le dice con dos dedos que marche tras ella, pues escuchan unos sonidos, un sectario se aproxima a su dirección.Zack se acerca con Sarah detrás de si hacia el sectario, de un momento a otro Zack lo toma por la espalda apuñalándolo en multitud de veces y tapando su boca, posteriormente degolla al sectario, Sarah se asusta, para finalizar, Zack le rompe el cuello al sectario y dejándolo en el suelo.- Mi…mi amiga está afuera, no quiero dejarla. - dice Sarah preocupada por Verónica, a lo que Zack le responde –No te preocupes, iremos por ella, en marcha-- Entendido, en marcha. -
Verónica despierta en la enfermería de Covenant, lo primero que siente es un profundo dolor en su brazo, el cual se encuentra vendado, ella intenta levantarse sin éxito alguno, en ese momento, una joven de cabello rubio entra al lugar, trayendo un botiquín en sus manos. - ¿Michelle? - pregunta Verónica confundida, a lo que ella responde –Tranquila, aun estas en reposo, toma un respiro- - ¿Qué paso? ¿Cuánto tiempo he estado aquí? -No mucho- responde ella –Llegaste aquí ayer en la mañana, estabas muy herida, perdiste mucha sangre, pero sobreviviste de milagro- comenta Michelle. - ¿He estado casi dos días aquí? ¡Mierda! ¿Dónde está Sarah? ¡¿Está bien?!- pregunta Verónica con nerviosismo.
Zack despierta en su cama, algunos meses antes de su encuentro con Sarah, cuando todavía estaba con su antiguo grupo conformado por Roman, Karen y Bob, sin embargo, hay otro miembro, una persona de la cual no había hablado en su historia, es su hermano mayor Edward, un hombre de cabello rubio, largo, atado, una musculatura mayor que él y con una barba de varios días, el grupo mantiene sus elemento para la creación de alcohol y tabaco casero, el cual era vendido a las comunidades a cambio de comida. Sin embargo, por las noches hacían turnos de exploración a distintas ubicaciones.El verdadero Líder del grupo era Edward, quien mantenía el liderazgo del grupo, Roman era el pistolero, pues su experiencia con las armas hablaba por sí mismo, Bob era un cocinero nato y Karen era quien elaboraba el tabaco a la perfección.En la pared se ven escritos los turnos de exploraci&
Zack despierta en su cama, se encuentra en su antiguo refugio con sus antiguos compañeros, solamente que es después de la muerte de Bob, su nombre ha sido tachado de la pared y los turnos para ir a explorar se encuentran reasignados. Esta vez es el turno de Karen y Zack para salir.Ambos caminan directo hacia una casa abandonada, el estado de salud de Karen ha mejorado con el tiempo, sin embargo, el invierno ha iniciado y la nieve comenzó a caer más rápido de lo que imaginaron, por lo que el tiempo no era suficiente.Ambos llegan a la casa abandonada, revisando todos y cada uno de los alrededores, la pérdida de su amigo aun es latente en ellos, han pasado un par de semanas de lo ocurrido. El silencio se rompe cuando Karen encuentra una pequeña lata en un cajón.-Oye, unas latas de arvejas- dice ella, Zack solamente sonríe, sin embargo, Karen mira las latas con melancolía en su rostro.-