Terminábamos de desayunar. Emiliano desde que nos mudamos a esta fortaleza había cambiado un poco para con el trato con Cameron. Quién debe bañarlo, vestirlo, curarlo, luego estar en clases, como todos nosotros. Mi padre instaló una de las habitaciones para nuestro estudio. Emilio y Emiliano frente a sus portátiles en su curso. Cameron en otro, Amelia y yo en los nuestros al pendiente de las clases.Las habitaciones quedaron; la de mi padre, los mellizos, mi abuela quedó compartía con Cameron y Amelia compartiría conmigo. Al terminar las clases esa habitación pasará a ser la de Cameron. De mi parte ya estaba mentalizándome para estudiar donde mi padre me dijera. Si él tenía un apartamento pequeño en la ciudad donde estudiaré no me pondré de remilgosa. Papá estaba gastando un dineral en este apartamento. La seguridad se debe pagar.Terminábamos las clases y cada uno se encargaba de distraerse como deseaba. Al menos el apartamento era grande. Emilio entrenaba en las canchas que había
Amelia se había quedado dormida por fin. Mi abuela fue de gran ayuda para calmarla. Sé lo que duele perder a una madre, pero al menos yo contaba con el resto de mi familia. Ella no, se quedó sola. Sus abuelos no los conocía mucho… —Dejemos que descanse. Con el calmante dormirá hasta mañana. Ayúdame a hacer la cena. —Jonathan no se ha ido, con la evidencia recopilada por la madre de Amelia podrán capturar a muchos. —Si mi amor, lo importante es ir solucionando cada caso. Por ahora es bueno liberar a Amelia, luego a Cameron y a su madre de esos bastardos, y al padre del imbécil que intentó abusar de ti. Llegamos a la cocina. El apartamento era hermoso. Escuchamos el tirar de una puerta y al asomarnos en el pasillo vimos a Cameron hacer pataleta mordiéndose la mano para no hacer ruido. —Este culicagado me va a escuchar. Terminé de hacer la cena para todos y Cameron me ayudó. No hablamos, cuando pasaron los minutos ya estaba calmada. Cenamos sin problema, Jonathan luego se despidió.
Me senté y la miré, unos hombres se acercaban y para alejar cualquier confusión la jalé y la besé. Me dolía el lado izquierdo de mi cadera por el golpe repentino de ella. Pero nada me importaba. Solo sentir los labios de mi Pelirosada.—¿Todo bien señorita?—Sí, él es mi novio.Y eso se sintió jodidamente increíble. Si ella estaba aquí fue porque el señor Braulio la trajo, no deseaba eso, pero al verla, sentirla solo puedo agradecerlo.—¿Te estaban molestando?—No. Pero ando paranoica, me pasó algo hace unos días. —No dije nada.Mi corazón se aceleró. Las imágenes de ella y yo bañándonos, en la cama, en el sofá, con nuestros cuerpos sudando, pegando hasta donde nos era posible nuestras pieles. —No seas tan primitivo Iskander—, sin embargo, no podía dejar a un lado mi instinto primitivo. Volvió a besarme y lo hizo de una manera que en vez de apartar mi libido lo que hizo fue levantar mi miembro.—Pelirosada, es mejor que no me beses de ese modo o no seré un caballero, sino un perfecto
Este hombre era el dueño de todo mi cuerpo, mi corazón latía a mil, mi alma lo reclamaba y verlo desnudo era un deleite. Como amo a este espécimen masculino. Ingresó a la ducha y esos ojos negros desbordaban el mismo deseo de mi parte.No se me nota como a él, pero si me tocara lo descubrirá con solo deslizar sus dedos en mí entre pierna, lo húmeda que estaba. Iskander aceleraba todo mi cuerpo. Y verlo, encontrármelo de nuevo era mi deseo más fuerte. Abrió la ducha, me tomó de la cintura para pegar nuestros cuerpos y sentir su dureza. El agua nos caía a los dos. Luego me sacó y él quedó bajo el agua. Sin tocarme ya estaba erizada. Rozó sus labios con los míos. Tomó el jabón para empezar lavarme y bañarme. Era una delicia absoluta dejarme consentir de ese modo. Lo más sensual que vivía, porque no me ha tocado donde deseaba que lo hiciera. Rodeó mis senos, pero no los tocó, mucho menos mi intimidad. Ha enjabonado hasta mis pies.—Lo haces adrede.—No sé de qué me acusas.Me dio la vue
Por un momento nadie habló, la señora Margarita estaba roja por la vergüenza. Pero conocía a mi padre y él era un hombre que no jugaba con ese tipo de noticias. Mi cerebro trabajaba rápido para analizar en tiempo récord; salió a divertirse como todos le habíamos dicho y por casualidad se encontró con la madre de mi novio y de su noche loca, llegaron a la cama… deseché las imágenes, no podía pensar en mi padre de ese modo, aunque sabía que era la única manera de tener un bebé de manera natural.—Tu sencilla sinceridad Braulio es apabullante. —bajó la mirada la madre de novio.—Es uno de mis mayores atractivos.Intervino papá. Seguía sin poder hablar y no porque estuviera enojada. Si no por la gran casualidad de la vida.—Pelirosada…—Déjame y asimilo.—Lamento que… —Se iba a excusar la señora Margarita.—No, no, no piense que es una noticia inapropiada. —sonreí—. Al contrario, solo estoy sorprendida de la gran casualidad de la vida el unirlos a ustedes cuando Iskander y yo tenemos extr
El desayuno terminó en una conversación amena, luego de la tensión por parte de mi madre y de Emily, quien trata de entender el cómo pudo paras el que nuestros padres se hubieran unido de por vida.Espero que si llegue a prosperar su relación de pareja. Pero eso nos lo dirá el tiempo. Y de mi parte no pondré resistencia para que mi madre por fin sea feliz. Ahora esperábamos al señor Braulio y a mi mujer en la recepción para que suban sus maletas para irse con nosotros para su finca.—¿Qué te causa gracia, hijo? Yo aún siento algo de vergüenza con Emily. ¿Qué va a pensar? Que su suegra es una lisa que se metió con su papá.—No te metiste con el padre de Emily. Te encontraste con un hombre, en un país, en otro continente, hablaron, tomaron alcohol, bailaron y terminaron en una noche fogosa… —Mi madre me dio un pellizcón.—Respeto jovencito que soy tu madre.Solté la carcajada. Hoy nadie me quitará la sonrisa de mi rostro. Había estado con la mujer que amo y pasaré este fin de semana con
Ha sido maravilloso estar de novios, el escucharla por teléfono todos los días, varias veces al día con videollamadas y vernos una vez el mes para ser un par agotar nuestras energías en la cama, por tanto, sexo que tenemos, ha sido maravilloso. Amo a esa pelirosada.Mi madre también se ve radiante con mi hermanito creciendo a cada momento y con una relación que no sabemos, pero el señor Braulio duerme en la habitación de mi madre. Supongo que poco a poco se van conociendo.Emy y familia llegan mañana, porque son las vacaciones de verano. Yo ya terminé la escuela y hasta el otro año es que inicio la universidad. No puedo dejar a mi madre sola y menos al momento de su parto. Dado que una vez pasen los quince días, debemos llegar a Estados Unidos, dejarla en el complejo de viviendas seguras.A esa fecha Serkan ya debe de estar por salir o pudo haber salido; con ese demonio nadie sabe y no quiero ni pensar lo que ocurrirá cuando sepa qué mamá tiene un nuevo bebé. Matt sigue cumpliendo c
Owen estaba molesto y al mismo tiempo deseoso por escuchar lo que tenía que decirle y había decidido contarle la verdad de lo que le ocurrió a su padre.—No lo condenes hasta saber su versión y la verdad no me la dijo para quedar bien. La he descubierto a lo largo de estos meses en donde hemos recaudado pistas y en verdad temo por su vida, la cual corre peligro por haberme ayudado.Bebió el agua que había pedido. Le hice señas al mesero para hacer el pedido del desayuno. Al estar solos de nuevo continué hablando. » Matt se vio obligado a ingresar a una red de narcotráfico, trata de blancas, pornografía infantil, tráfico de estupefaciente, por ser el abogado de mi padre y mejor amigo. Lo vieron en ese entonces como un evento de hacer un negocio, ganar mucho dinero y nada más. Pero no fue así.» No dimensionaron que le vendían el alma al mismo diablo que se llama Eugenio. Mi padre se obsesionó demasiado con el dinero, el poder, las mujeres, la vida fácil. Hasta el punto de enlodar las