Me mostré enfadado con ella. Pero al instante se me pasó cuando ella me dio un beso que me reinició todo.—No, no pienses tonterías. —Me confortó. —Siéntete afortunado de ser el primer novio que les voy a presentar.Es solo que… Bastian, mis padres… están muertos y… es al cementerio que venimos a visitarlos, es por eso que este lugar te parece extraño. —confesó, de golpe, el mismo golpe que yo sentí en mi corazón cuando lo dijo con sus palabras entrecortadas.Puedes quedarte aquí y esperarme si no te agrada la idea de entrar en ese lugar.—Oh, cariño, ¿por qué no me lo habías dicho?¿Cómo crees que te dejaré sola? Estoy contigo en las buenas y en las malas, por favor. No llores, vida mía.Con mi mano sequé sus lágrimas y como pude la abracé para tranquilizarla y demostrarle que ahora cuenta con mi apoyo. La acompañé a la tumba de sus padres y la consolé, a pesar de que ha pasado mucho tiempo, ella los extraña mucho y aún le duele su partida.Ella me comentó sobre su hermano también, s
CELESTEEra de esperarse que la madre de Bastian se mostrara muy arrepentida y nos pidiera perdón a ambos. Incluso quería arrodillarse para demostrar que en verdad estaba arrepentida. Nosotros, como no queríamos que se marcharan con rencor, les perdonamos. Ella prometió aceptarme y apoyarnos moralmente en nuestra relación. Ya los demás miembros de la familia, al parecer, se habían dado por vencidos y no estaban al tanto de los planes de la señora Cantoral.Yo no sé a Bastian, pero a mí siempre me ha quedado esa espina de que quizá esa señora esté mintiendo y trate de que bajemos la guardia para atacarme nuevamente. Pero eso es algo que no lo compartiré con él, porque se pondrá de los nervios de nuevo.Finalmente, ellos se marcharon contentos a su pueblo, pues ya no dejan a un hijo enemistado. También nos invitaron a recibir el año nuevo junto a ellos allá en su rancho; a decir verdad, a mí me pareció fantástica la idea.—Creo que no ha sido buena idea haber aceptado viajar a su lugar.
Bastian es un hombre amante de la limpieza, puedo decir que me siento humillada a su lado, pues, yo soy un poco desastrosa. Lo que me agrada es que ha aceptado darle vacaciones al personal de la cocina por unos días. Le pedí que antes de iniciar a trabajar quería ser yo quien preparara los alimentos y él a regañadientes, pero lo aceptó.—Te advierto que soy muy delicado y estricto a lo que concierne con mi alimentación, es por eso que temo que no soportes mi malhumor si las cosas no te quedan como a mí me gusta. —murmuró.—De eso no hay problema, amor mío. Sé que te comerás lo que sea, con tal vaya preparado con mis manos. —Bromeé. Pero tuve cierto temor de que él lo dijera en serio, es por eso que hablé con su cocinera y le pedí consejos.—¡Oh!, esto está mucho mejor de lo que esperaba, bendigo tus manos, novia mía.Joder, yo me sentí como si estuviera en la gloria en ese momento. A él le ha gustado cómo cocino y en cada ocasión me dice que está encantado con todo lo que hago.Justo
BASTIANEstoy en la oficina, acabo de terminar una reunión con Thara y mi asistente. Él y yo nos hemos quedado unos minutos más para discutir un último punto acerca de una nueva empresa que estoy planeando adquirir. Él ha ido al baño privado en este momento, es mi amigo y por eso se toma tal atrevimiento. De pronto la puerta se abre con fuerza y por ella entra Celeste, trae un termo y supongo que es mi almuerzo, eso me llena de emoción y me levanto para recibirla como se merece.—Mi amor, qué sorpresa de tenerte en mi oficina.Llego hasta ella y le quiero dar un abrazo, pero ella se aleja y no me lo permite. Además, se nota que está molesta y es conmigo.—¿Te sorprende verme aquí?Pregunta en tono serio, cosa que me hace cuestionarme qué le ha ocurrido para que esté así. Hasta sus ojitos se ven tristes y eso me mata.—Más que sorprenderme, me agrada tenerte aquí, mi amor. Por favor, toma asiento, en unos segundos termino un trabajo y te atiendo.—¡No me voy a sentar, solo quiero saber
Celeste trata de salir, yo la detengo para que no lo haga y, en mi desesperación, le pido a mi amigo que salga. Prácticamente, estoy pidiendo auxilio para que ella vea que no le miento.—Uyuyuy, amigo, te juro que me he divertido hasta morir escuchando su pelea de pareja enamorada. —Se burla el muy cabrón, pero lo que se consigue es una mirada matadora de mi parte.—Lo ves, amor. Él es mi asistente y junto a Thara estaba en la reunión. —mencioné, abrazándola y con mi pecho cubriendo su rostro para que mi amigo no vea que está colorada por la vergüenza.—Vete. —Le ordeno.—Chica, no pierdas de vista a tu novio, por si no te das cuenta, te pondré al tanto. —comienza mi amigo, yo solo espero escuchar una de sus tonterías para molestarme a mí y luego burlarse. Pero al parecer le cae bien mi chica y ahora hasta le ha cruzado el brazo sobre el hombro para demostrarle confianza.Aquí en la empresa hay muchas mujeres preciosas que pagarían con su vida con tal de pasar una sola noche con este
Ella temblaba de frío y yo… yo me estaba quemando de fuego al imaginarme que la estaba follando. La ciudad se veía espectacular desde lo alto, pero mi novia se veía mucho mejor con ese vestido que le llegaba hasta el tobillo y se movía con la brisa.Me acerqué a la pared y presioné un botón para que el techo corredizo nos cubriera de la nieve. Amé su cara de sorpresa cuando lo hice, la observé con una mirada que decía todo lo que sentía por ella, y lo entendió.Sonrió y se lanzó a mis labios, su aliento caliente y dulce me chocó y me excitó de inmediato. Con ella no puedo estar tan cerca, con solo una mirada suya mi pene reacciona y si estoy delante de otras personas me sentiré avergonzado.Profundicé el beso, la presioné contra la pared, metí las manos por debajo de su vestido y le bajé las bragas. Ella no paraba de gemir y yo estaba feliz de que mi fantasía se hiciera realidad. Bajé un poco mi pantalón de traje junto con el bóxer y la follé de pie, minutos después estábamos completa
CELESTEMi momento de dulce venganza en contra de Thara ha llegado, sé que es ella la que ahora está en la puerta porque la he visto por el costado de Bastian.Ella está con una cara de pocos amigos observando la escena frente a sus ojos. Yo misma le envié un mensaje de texto del teléfono de mi novio mientras él estaba en el baño. Le pedí que viniera porque necesitaba su ayuda con un trabajo, ella ha venido casi volando y se ha llevado la sorpresa de su vida.—¡Ah! ¡No te detengas, cariño! —Pedí entre gemidos cuando Bastian se detuvo. Él me miró, frunció el ceño y yo le guiñé el ojo para que fuera mi cómplice.—¿Para esto me has pedido que venga? ¡Me parece una falta de respeto! —Protestó, Thara, también me dio una mirada furiosa, se dio la vuelta dando un portazo y se marchó.—¿Qué ha sido eso? —se pregunta Bastian sin entender a la loca esa.—Yo que voy a saber lo que le pasa, tú deberías de conocerla bien, supongo. Eres su íntimo amigo. —Comenté con normalidad para que él no descub
Bastian fue demasiado rápido y me alcanzó al nomás cerrar la puerta. Me tomó del brazo y me atrajo hacia él para abrazarme y que me calmara.—Por favor, no me hagas esto, Celeste. Thara no tiene a dónde más ir, su familia se encuentra al otro lado del mundo y es imposible que pueda viajar. —me explicó con voz pausada.Yo estoy a punto de renegar nuevamente. Pero en fin, decido comportarme como buena chica, no iba a permitir que por culpa de esa supuesta amiga de mi marido mi Navidad se arruinara. Acepté acompañarlo y ese fue mi gran error.—Celeste, ¿puedo ir en el asiento de copiloto? Es que ya estoy acostumbrada a viajar al lado de Bastian. —Me pidió la muy sinvergüenza.—Thara, entiende que como amiga que eres de mi marido ya debes hacerte a un lado porque ahora ese lugar está ocupado por mí. —Le respondí con tranquilidad, no quería discutir cuando desde hace rato estoy molesta.—Nunca serás la esposa de Bastian, podrás ser su mujer pasajera, pero jamás una esposa. No te hagas ilus