Se habla sobre temas serios y fuertes, proceder con precaución.
Cuando se trata de los amigos, no hay que pensar demasiado.
El grupo apenas supo lo que había pasado y en cuanto recibieron la ubicación salieron corriendo, Jeff alcanzó a llamar una ambulancia, pero Fred no recibió explicaciones, los vio salir y aunque fue detrás de ellos llegó un momento en que los perdió.
No pensaron en nada.
Ni en fotógrafos, ni en la prensa, en el que dirán, en ese momento no eran Naseem, eran los amigos de Jareth, simples chicos que tenían el corazón al borde de un paro.
Ninguno entendía que pasaba, Jeff había escuchado a medias y con la voz tan entrecortada de Harlam logro solo entender que Jareth se había hecho daño, ese detalle lo omitido cuando les dio la información a los de
“Prefiero que la gente me odie por ser quien soy a que me ame por lo que no soy” Kurt Cobain“Soy optimista con respecto al futuro del rock. Los jóvenes músicos emergerán de nuevo, pero con un nivel de buena composición, con profundidad e intelecto. La composición regresará al nivel de la música clásica o el jazz.” Jimmy PageLo bonito de crecer es hacerlo al lado de personas que te aman y que amas es madurar a su lado y enfrentarse a los más grandes obstáculos y superarlos, dará una enorme satisfacción.Desactívate y encendamos juntos esta playlist.
Las luces eran violentas, golpeaban aquellos ojos claros con una potencia desmedida, le tomaba un esfuerzo enorme conservar la mirada fija al horizonte, sin embargo, con la creciente impaciencia que ese espacio provocaba en él, una falsa sonrisa se formó en sus pálidos labios, fingiendo con experiencia una felicidad que era apropiada para la situación, permitía que su mente viajara de vez en cuando organizando los pensamientos más relajantes que llevaban su cuerpo a una tranquilidad máxima y así poder sobrellevar la situación como el valiente caballero que creían que era, pero, no todo era así de sencillo. —¿Desde qué edad tocas el bajo? —La pregunta entro directamente en sus oídos llegando a su cabeza como una bofetada, lo saco de cualquier pensamiento extraño que estuviese disfrutando en ese momento, no podía fingir con su sonrisa, porque la pregunta era directa, iba hacia él. Aun con aquella apacible expresión, paso la punta de su lengua por sus resecos labios. —D
El rostro del manager, Fred, podía considerarse la encarnación de la frustración, desde que el grupo había subido a la camioneta, empezó con un sermón que parecía interminable, las cosas el día anterior habían parecido muy fáciles, pero el nuevo día llego con una cantidad enorme de titulares que anunciaban el fiasco de la última presentación, y Jeff que había sido nombrado el líder por votación unánime, estaba al lado del hombre tratando de calmarlo.—No te preocupes, tengo las palabras adecuadas para aliviar este impase.—No es un simple impase, chicos, empezaran la gira y lo que menos queremos son escándalos como este. —Se podía ver como la vena del cuello saltaba en el hombre, Jeff sonrió un poco tratando de aguantar la risa, le parecía gracioso observar las expresiones de Fred.—Les gustara
I've Been Thinking About You Londonbeat Cinco año antes… Una temporada de lluvias muy helada estaba cayendo sobre la ciudad, Harlam observaba perdido un enorme televisor en una vitrina donde se presentaba un programa de música, tenía el cuerpo cubierto con un impermeable azul y un gorro impermeable, tenía los zapatos mojados y parte de sus pantalones cubiertos por lodo, solo era lluvia, pero hacia tanto frío que no se atrevía a salir sin abrigarse correctamente. —¿No te parece genial? A su lado estaba Jeff, vestido casi igual para esconderse un poco de la tormenta, tenía el cabello húmedo y pegado en la frente, esté se puso frente a la vitrina para mirar como en la enorme pantalla enfocaban a un jurado eligiendo personas para entrar al programa. —Me parece aburrido. —Dijo encogiendo los hombros, miro
El turno en el bar iba desde las siete hasta las cuatro de la mañana que era la hora del cierre definitivo. Después de los ensayos con sus amigos y una buena cena, Harlam corría a cumplir con sus horas de trabajo, era extenuante, pero ya su cuerpo se había acondicionado al ajetreo, en ese establecimiento aprendió cosas básicas para ser un buen bartender, algo que agradecía. El bar tenía días de gloria, pero justo cuando estaban subiendo, llego una semana terrible para el lugar, dos compañeros renunciaron y el jefe estaba estresado buscando personal.—Harlam por favor, dime que tú no te vas a ir también a cumplir tus sueños de adolescente. —El jefe de Harlam era un hombre pequeño pero corpulento, con varias perforaciones en las orejas y tatuajes en todo el cuerpo, se llamaba Abel, estaba caminando de un lado al otro frente a él y su otro compañero, los &u
La noche de vampiros siempre era interesante, participar de ella era una de las cosas que más le gustaba a Jareth, habían trazado un pequeño plan para molestar a Harlam durante la noche, Jeremías les dio la fotografía donde esté se veía como un perfecto vampiro de película y la mandaron a estampar en todas las camisas, por detrás decía “Harlam Cullen”, sabían que no le gustaban esos libros y menos las películas, Jareth no siempre participaba en esos juegos porque eran pérdida de tiempo, pero si se trataba de fastidiar al angelical Harlam, él siempre estaría dispuesto.—Ya deberíamos irnos. —Dijo Jeff que movía los dedos sobre una de las botellas algo intranquilo, Jareth lo miro negando con la cabeza, las dos de la mañana los acosaba. Ya llevaban muchas cervezas encima, Tobías y Jeremías estaban borrachos b
Las noches de licor nunca eran buenas, al menos no en la cabeza sensible de Tobías, intentaba por todos los medios evitar la cerveza pero si estaba cerca de Jareth era imposible negarse, su amigo tenía un no sé qué, que obligaba a la gente a beber aunque no quisieran, después del evento en el bar se sentía avergonzado, supo que había hecho el ridículo varias veces gracias a los cuentos de Jeff, no sabía si iba a tener la cara suficiente para regresar al bar como si nada, aunque era algo simple, no dejaba de darle vueltas al asunto.—Te ves enfermo, ¿Qué te pasa? —Estaba con Jeremías en su casa, eran casi las cuatro de la tarde, los dos compartían un gusto que los demás no conocían, rescataban animales, justo ese día se reunieron para visitar la veterinaria donde habían dejado dos gatos la última vez, deb&iacut
Dos agotadoras semanas pasaron…En medio del caos del día a día, siempre danzaba una pequeña sonrisa en los labios de Harlam, trataba de estar calmado para que todo a su alrededor se desarrollara con esa misma tranquilidad, pero debía afrontar una realidad de la que huía cada minuto que pasaba. Frente a él estaban sus amigos, en silencio, todos mirando al suelo sin saber que agregar para que el ambiente se aliviara, Harlam abrió la boca varias veces pero se arrepintió al último segundo, Jeff llevaba su tercer cigarrillo y estaba claro que Jeremías tenía la mente en otro lado porque no le había quitado ninguno de los cigarros al otro, Tobías de vez en cuando intercambiaba miradas con Harlam, y ahí en el rincón donde siempre se paraba Jareth brillaba una ausencia y soledad que emanaba ese pedazo del garaje provocando escalofríos.—Bueno ya estuvo.