Luther
Desde la primera vez que la vi, me propuse que fuera mía.
La primera vez que la ví fue en una fiesta del lanzamiento de una nueva ropa masculina de un diseñador que conozco, ella me cautivo, fue como si ella tuviera su propio foco que la iluminaba, me impactó tanto su belleza que Jessica, amiga desde la universidad que me acompañó para obtener algunos socios, tuvo que llamar mi atención varias veces, esa chica me dejó atontado.
Quise acercarme a esa rubia de curvas peligrosas, pero andaba con un chico, que segun vi en algunas fotos era uno de los modelos, este no se le despegaba para nada, me dije que lo más seguro era su novio y no quería ocasionar algún inconveniente, pero lo pensé muchas veces, por poco y no me importaba.
No me quedé quieto y averigue quien era, supe su nombre, Kesha, hermoso como la dueña, también me enteré que ella fue la que se encargó de toda la publicidad del lanzamiento, su empresa “Enchanted”, cuando supe eso, no lo pensé mucho y mande a mi secretaria a ponerse en contacto con esta, tengo un nuevo proyecto en camino y de paso quiero conocerla, mato dos pájaro de un tiro, si está comprometida me alejaré.
A la semana siguiente ya había conseguido una reunión con ella directamente, porque no permití que ninguna otra persona me atendiera, para el nuevo proyecto de mi revista Broken Heart, la cual me fue heredada de mi madre que, con mucho esfuerzo, la llevó a la cima, y como su único hijo, no puedo dejar que se destruya, además de que también se volvió mi pasión.
Mi madre es una mujer muy fuerte y vencedora, pese a que tuvo que ser madre soltera, pero nunca se rindió ni trató de depender de ningún hombre, y nunca volvió a casarse. La muerte de su gran amor, mi padre, no la dejó con ojos de querer ver a otro nombre, ni mucho menos de entregarse a otro amor. Ella decía que mi padre era su alma gemela y que cuando él murió, su corazón se fue con él, y sólo tenía amor para mí, así que se concentró en mí y en sacar adelante su revista.
Según me contaba mi madre, porque no conocí a mi padre, solo algunas fotos, pero en estas se veía mi parecido a él, que fue un gran hombre, su familia es la dueña de una gran cadena de hoteles, los cuales él no heredó, porque era el menor de cinco hermanos. Lamentablemente no conozco a mi familia paterna, al parecer no éramos bienvenidos, a mi nunca me importó, tenía a lo más importante conmigo, mi madre.
Con esa educación que me ha dado mi madre y toda mi vida estar rodeado de romance, busco tener ese amor que ella profesa que encontró en mi padre, yo quiero uno, que mi corazón solo le pertenezca a una sola mujer, en mis treinta años nadie me habia atraido tanto como esa rubia, siento que ella podría ser la correcta, lo dañaría si ella tiene a alguien sino es así, haré de todo para conseguirla.
Llegó el día y estoy nervioso, no sé porque si la mayoría de veces siempre estoy seguro de lo que quiero, haré negocios con ella y si las cosas salen bien, la invitaré a una cita.
Pero practicamente me comporté como un estúpido, no se de donde me salio ese descaro de lanzarme asi a ella, pero el tenerla cerca sacó de mi lo neandertal que no soy, si mi madre hubiera visto esa actitud me jalarias las orejas, esa actitud no es aceptable, pero es que la atraccion que siento por ella es demasiada intensa, es inexplicable.
A ella le gustó lo que vió y es un punto a mi favor. Cuando nos tocamos lo supe con más seguridad, tenía que conseguir llevarla a la cama o cualquier lugar horizontal, incluso quería hacerlo allí mismo, se que es una locura, pero por ella sentía un deseo incontrolable difícil de explicar.
Después de una semana con mucho trabajo y sin dejar de pensar en esa Barbie que me tiene loco, fui a mi club LUFER.
Muy sofisticado y exclusivo, quería tener mi propio negocio, no solo depender de la revista que mi madre me sedió.
Estaba chequeando y revisando algunas cosas cuando la ví entrar, parecía la p**a reina del lugar, es tan hermosa que llama la atención de todos los hombres del lugar, ella es la perfección hecha mujer, pero no andaba sola, estaba con aquel chico que la acompañó al lanzamiento y con ellos había otro.
Sería un poco difícil acercarme a ella, ¿alguno de ellos será su pareja?
Me quedé observándola a lo lejos, para mí era imposible despegarle la mirada, cuando se pararon a bailar y vi que los dos se le pegaban demasiado, sentí celos, celos de no ser yo el que bailara con ella.
Vi mi oportunidad cuando vi que los chicos empezaron a bailar entre ellos y comprendí con alivio que eran pareja, así que aproveché para acercarme y ver esos movimientos sensuales y ese redondo culo. Quería morderlo. No podía evitarlo, bailar con ella y sentirla en mi cuerpo, el cual ya estaba duro con solo verle ese culo apetecible, pero me fue imposible quedarme a espaldas de ella, así que la giré y la besé. Era dulce y picante a la vez, adictiva. Después de una pelea con nuestras lenguas, la suelto, porque de lo contrario, la follaría aquí mismo, no importa si nos ven. Me reconoce, pero está confundida, alterada, y me aprovecho… La llevo a mi oficina.
Ni bien entramos la sigo deborando hambriento, esta mujer me vuelve loco.
La suelto y me empuja. Me dice que no es así, que lo siente y… se va, dejándome con ganas. Ninguna mujer me ha dejado así, siempre quieren más.
Cuando llego a la reunión del lunes, después de trazar un plan el fin de semana, no dejo de mirarla, porque está preciosa y la deseo. La pongo nerviosa, lo sé, y es lo que pretendo. Pido hablar con ella a solas después de presentar tan excelente oferta. Mis directivos no se equivocaron, es la mejor empresa de publicidad.
Llegamos a su oficina, y sin que se dé cuenta, ya la tengo en mis brazos devorándole la boca. No podía aguantar, ella me pone duro solo con su presencia. Pero vuelve y me rechaza. Como le dije una vez, lo que quiero lo obtengo… Y la quiero a ella.
No me rendiré.
Y la enamoraré, la cautivaré tanto como me tiene a mí.
Kesha ¡¿Qué se cree el estupido ese para besarme así?! Cree que porque yo lo besé el día en la discoteca él puede hacerlo cuando quiera, engañándome así mientras trabajo, diciendo que solo quería hablar conmigo a solas. Paso la mañana revisando las diferentes propuestas que se preparan para otras empresas, así como los proyectos que ya están en función. Está todo fríamente organizado. Sin darme cuenta, llega la hora de comer. Decido bajar a un restaurante que hay cerca, allá me encuentro con Carlos y charlamos un rato. Claro, omitiendo lo que ha sucedido con Luther. Hay cosas que solo guardo para mí. ─ Kesy querida estas muy ida, ¿te pasa algo? ─ No te preocupes, es el trabajo ─ le digo par
Luther ─ ¿Y te gustaría que fuéramos a un lugar mas intimo para conocernos mejor? ─ Si es para una habitación, pierdes el tiempo ─ su carácter me fascina. ─ Barbie ─ sonrio de medio lado ─ como este restaurante es un hotel también, el único lugar que tiene privado no es sola las habitaciones, tienen una terraza con una vista hermosa, claro no tanto como tu ─ se sonroja. ─Lo siento, está bien, vamos a la terraza. La ayudo a levantarse, con mi mano en su espalda nos encaminamos a un lugar más privado y tranquilo. Nos sentamos en uno de los sillones, se que la vista aquí es maravillosa, pero no puedo dejar de verla si su belleza es más interesante que el mismo cielo o la ciudad.
Kesha Desde que deje que Luther y yo nos conocieramos ando en una nube de positividad, podría decirse que también de felicidad, porque él es tan considerado, atento, romántico, no es para nada el playboy que se mostró ante mi ese día en la oficina, lo que mas me tiene cautiva solo los dulce besos de despedida que me ha dado cada vez que nos hemos visto. Me pongo a darle orden a mi departamento. No es ostentoso pero es elegante, un sofá en L negro, amo ese tono de color en las decoraciones, así que todos mis equipos son en color negro, mi comedor, mi cocina, mi habitación…menos mis paredes y otros accesorios, son coloridos, es más, mi apartamento está lleno de vida, muchas cosas de los viajes que he hecho, recuerdos necesarios. Aunque como a toda chica que le gustan las compras, tengo un clóset digno de una famosa, pues amo darme mis c
Kesha ─ ¿De qué quieres que hablemos? ─ tome la decisión de sucumbir a la tentación, pero quiero ponerlo a sufrir un poco más. ─ De lo que sentimos, de la química entre nosotros ─ se acerca a mi, toma suavemente mi cara entre sus manos ─ de que cuando me acerco a ti y te toco, vibramos juntos, que cuando te beso es como ir al cielo ─ me da un dulce beso ─ de esto es que hablo, ¿por qué quieres huir a esto? ¿por qué no te entregas a mí si sientes lo mismo? No le contesto, me alzo en puntas y lo beso, uno nuestros labios empezando una danza con ellos lleno de una intensa pasión, quiero responderle así, que sepa que quiero estar con él, aunque sea con tiempo de caducidad, aunque esto no dure mucho tiempo. Coloco mis manos en su cuello para profundizar más el beso, que nuestras lenguas peleen
Kesha Los próximos días fueron maravillosos: regalos, flores hermosas… Todo eso llegaba a mi oficina. Mensajes de texto con frases románticas y algunas muy calientes, como las cosas que me haría y dónde. Estaba loco porque tuviéramos nuestra cita, y yo…, temerosa por no ser suficiente para él y que se sienta decepcionado con lo poco que vivamos o lo poco que le cuente aunque todo sea mentira, que algo detone mis temores. Por eso no duermo con nadie, por mis pesadillas. Mi subconsciente no olvida todas las cosas que he vivido, todo mi sufrimiento que quiero enterrar, pero cuando duermo sale a flote. Imagínense lo que es que te lleguen tantos regalos a tu lugar de trabajo. Mis empleados tienen la oreja parada de la curiosidad, de saber quién será el afortunado, ya que nunca lo han visto. Mi amigo Carlos está a la mar contento, estaba loco porque tuviera una relación.
Kesha Mi baile sensual lo cautiva, lo encienden, que es mi propósito, seducirlo, hacer que ese deseo que siente por mi fluya, que nuestros cuerpo sean los que hablen al final, que vea lo que siento por el, va mas alla de lo sexual aunque el sexo con el es fascinante. Me siento a horcajadas sobre él, y sigo moviendo mis caderas mientras agarro su cara con las dos manos y lo beso. Es un beso cargado de mucho significado, ya que viviré con él algo nuevo e inexplicable. Quiero entregarme a él, ser suya y que él sea mío, por lo menos, por el tiempo que dure. Mientras lo beso, sigo moviendo mis caderas. Si él no toma la iniciativa, lo haré yo, además, nadie lo manda a provocarme con su sexy vestimenta y su exquisita comida y después a hacerse el inocente, que eso no le queda. Luther en lo que voy conociendolo es un hombre completo, qu
Kesha Me despierto desorientada, no sé dónde estoy ni con quién estoy, tengo un cuerpo caliente pegado a mí y unos fuertes brazos rodeándome, es una sensación celestial, romántica, protectora…, especial. Es la primera vez que paso toda la noche con un hombre, espero no haber tenido una de mis pesadillas, aunque todavía sigo en la cama, por lo tanto imagino que no, porque cuando las tengo amanezco en el suelo o en otro lugar, dado a mi pasado, en las noches busco protegerme. Sé que debería visitar a un especialista porque no recuerdo lo sucedido de la noche anterior y cómo llegué a ese lugar, es como si mi subconsciente trabajará solo, diría que es un trauma, pero solo me pasa cuando duermo. Aunque, no me sentiría cómoda contando mi pasado, por eso evito quedarme toda la noche, pero Luther me dejó exhausta, completamente satisfec
Una semana después… Kesha Hemos pasado los mejores momentos del mundo, no sabía que podía ser tan romántico y pervertido a la vez. Me tiene loca. Hemos dormido juntos todos los días, si no es en su fantástico pent-house, es en mi departamento, que se ve muy pobre en comparación al suyo. Encuentro raro el no haber tenido pesadillas, aunque las noches de sexo agotadores me dejan en coma. ¿Me diría Luther si tengo algún comportamiento extraño? Lamentablemente tengo que viajar y nos separaremos, tengo una publicidad muy importante con una gran diseñadora, la cual llevará mi empresa a la cima, y no me puedo permitir fallarle. Esta diseñadora sacará una nueva colección de bikinis, y dentro del desfile habrá unas foto