La Montaña Roja
Un extraño canto despertó a Caroline, quien al mirar su teléfono vio que aún faltaba un cuarto para las 5 am, la chica Escuchó con atención, traspasando el silencio y logró escuchar un poco del coro de voces que traía el viento, aquel canto decía:
&Roja, Roja, como fuego, de picos altos y largos senderos, montaña hermosa que entre cuevas y cavernas oculta sus secretos, todos quieren tus misterios hallar, pero poco logran salida encontrar pues dentro de ti hay un laberinto sin fin&.
La joven se levantó, con la curiosidad de saber el significado de aquellas palabras, y aún con el pijama salió de la choza y ya fuera, bajo la oscuridad del firmamento, observó la alta montaña y pensó en aquel canto, repasandolo en su mente.
De repente sintió algo tocar su hombro, lo cual la sacó de su concentración y la hizo pegar un grito que ella misma calló, al voltear y ver a Arthur, quien tenía su dedo índice sobre sus labios. La chica lo miró molesta y con el corazón a mil por hora y le susurró, dándole un empujón en el hombro.
—Idiota me asustaste.
—Ja, ja, ja, lo noté Caro.
—¿También te despertó el canto? — Preguntó la muchacha.
—Si, esa advertencia da mucho en que pensar —contestó— supongo que los miembros de la tribu, no quieren que exploremos las montaña.
—Bien, a mi me convencieron.
—Ja, ja, ja, ¿tú? la chica &quiero ver un dragón& estas asustada?— se burló Arthur.
—Oye, no te burles de mí— Reclamó Caroline.
—Ja, ja, ja, lo siento Caro, pero es un canto extraño.
—Es solo una forma que tiene la tribu de advertir el peligro que hay en el monte rojo, así llaman a la montaña—Explicó una voz detrás de ellos.
Los chicos voltearon un poco de temor ante la repentina voz, y al ver a su amiga la técnico bibliotecóloga Monique, reclamaron al unísono:
—¡Cielo Monique nos Asustaste!
—Vaya, ¿Porque?, ¿acaso estaban haciendo algo prohibido?— interrogó la mujer con picardía y sospecha en la voz.
—¡Claro que no! —Exclamaron Caroline y Arthur al mismo tiempo algo sonrojados.
—Ja, ja, ja— rió Monique y luego continuó— vayan a cambiarse, Jhon tiene trazado un intinerario, que en parte supongo es la razón del canto, puesto que incluye explorar la montaña.
—Bueno ya a mi se me quitaron las ganas de ir — confesó Caroline.
—Descuida, el profesor, ira a explorar primero y luego del almuerzo llevará al grupo—explicó Monique.
Los dos chicos asintieron y Caroline entró al tipi, para cambiarse. Unos minutos mas tardes se encontraban en una larga mesa desayunando y conversando. El profesor Laston les explicó, lo que haría, mientras el iba a explorar la montaña.
Luego de desayunar, despidieron a su profesor deseándole suerte y lo vieron marcharse junto con Denniel el Hijo de la Jefa y dos personas más.
Caroline se quedo en la mesa, estaba escribiendo en un hermoso cuaderno pequeño y con cobertura de cuero envejeciendo. Drantor, se acercó a ella y se sentó a su lado, esta sintiendo la respiración del joven lo saludo, con una rápida mirada y siguió escribiendo, curioso el chico le preguntó:
—¿Qué tanto escribes?
—Es un Diario de Viaje, el profesor Laston nos recomendó que realizaramos uno y ayer lo comencé y pues estoy escribiendo el día dos y...—Drantor le arrebato el Diario y empezó a leerlo— Oye regresamelo—Reclamó Caroline.
—Si, solo veré que escribiste de mí— anunció el chico —Vaya no dejes que Draco vea esto creo que te mataría.
Sonrió leyendo lo escrito sobre su hermano mientras esquivaba a la chica quien lo perseguía, hasta que finalmente se lo devolvió y mirando a la hermosa muchacha, le agrego:
—Tal vez pueda agregar algo mas interesante, que solo un chico misterioso.
—Es que ya todo tu eres interesante —respondió Caroline distraída, el chico sonrió burlonamente y cayendo en la cuenta de lo que acababa de decir se sonrojó y reparó— lo que quise decir es que todo lo que agregues a mi diario será interesante.
—Ja, ja, ja, si por supuesto—rio Drantor— por. cierto te vez mas hermosa con tonos rosas en tus mejillas.
Caroline no contestó y se coloró más y mientras ella le decía que se callara a Drantor, Arthur los observaba, con una enorme canasta llena de frutas, tenía el ceño fruncido y expresión seria, suspiro amargamente y negó con la cabeza, y de pronto una ya conocida voz femenina le dijo:
—Creo que te estan ganando la partida, Arthur
—Monique, puedes hablar claro por una vez
—Te estan quitando a Caroline, así o más específico— contestó ostinada la chica— no entiendo, si conoces desde hace tanto a Caroline, porque no...
—Porque ella solo me ve como su &buen amigo y protector, Arthur&— respondió con tristeza el chico.
—Así que te tienen en la Friend Zone— Bromeó Monique —Pues amigo nunca es tarde para arriesgarse a salir de esa zona, además estoy segura que con lo distraída que es la señorita dragones ni cuenta se ha dado.
—Ja, ja, ja, el que sea distraída es su mayor atractivo.
—Bueno, si piensas eso, pues es mejor que te apresures a darla por enterada, antes de que la secuestre un dragón o ese chico—aconsejo Monique
La joven mujer camino hacia los dos jóvenes que observaba, Arthur sonrió. Caroline reía a carcajadas, por una broma que Monique les había dicho y Cuando Arthur llego a la mesa con la gran cesta, esta lo vió y sorprendida pregunto:
—Wow, Arthur ¿y toda esa fruta de donde salió?
—Pues Monique y yo ayudamos a la anciana y ella nos regalo la fruta
— La abuela Danna es muy generosa—Intervino Drantor.
Cada uno tomo una fruta y comían y charlaban, entonces mientras Drantor buscaba una manzana, notó que su hermano estaba parado a pocos metros de ellos obsevandolos y se acercó a él, al llegar junto a Draco, este le preguntó:
—¿Te diviertes hermanito?
—No son malas personas y se integran a la tribu.
—No bajes la guardia, ellos buscan tesoros y revelar los secretos de nuestra montaña.
—Pero pienso que si encuentran una que otra cosa...
—No, Drantor no debemos fiarnos de nadie y cuando los llevemos a explorar nuestra montaña, mostraremos cosas superfluas, ningún humano conocerá, los verdaderos secreto y misterios del monte rojo.
—Bien, lo que menos quiero es traicionar a los nuestros— se resigno Drantor.
—Mas te vale o tendremos que hacer algo al respecto.
Draco se retiró sin esperar respuesta de su hermano, Drantor volteo a ver a sus nuevos amigos, y aunque Carolina, Mónica y Arturo, no le parecían malas personas, no podía revelar nada de la montaña, Suspiró con frustración y nego con la cabeza. Drantor Camino a la mesa nuevamente pero el grito de Monique lo hizo detenerse. El padre del joven lugareño y el prometido de
Monique, regresaban, pero Jhon Laston, tenia una pierna herida, la mujer nerviosa ayudo a Denniel a llevar a su novio a la cama para recostarlo.
Los estudiantes se encontrában fuera de la choza, preocupados, pero Monique les dijo, que ya el curandero, le había sanado la herida y que Laston estaría mejor, luego se acercó a Arthur y le susurró:
—Entra conmigo, Jhon quiere decirte algo.
El chico entró y miró a la cama donde el sr Laston, estaba recostado, con la pierna elevada sobre una pila de almohadas, y el invalido al verlo le dijo:
—Señor Welins, necesito que me haga un favor.
—Claro, profesor ¿qué necesita?
— Los chicos deben ir a la montaña mañana, temprano, ya que mi accidente estropeo la tarde. y necesito que los acompañe.
—Esta...bien Profesor—titubeó Arthur— Lo haré.
—Perfecto, gracias muchacho.
Cuando Arthur salió de la choza el grupo de estudiantes lo abordó, el joven le confirmó que el profesor se encontraba bien y le explicó lo hablado, luego antes de que el sol cayera, planearon la exploración, Drantor los ayudó, ya que el era uno de sus guías.
Al Día siguiente, aun no amanecía cuando Caroline despertó, Escucho un rugido y este la asusto, como estaba casí en la hora fijada, la chica se vistió, y al salir, saludo a Drantor y Arthur quienes la saludaron con la misma alegría.
Cuando los demás estudiantes despertaron desayunaron todos y luego, se dirigieron a la montaña. Después de caminar unos cuantos kilómetros y subir un empinado terraplén, con los hermanos Draco y Drantor de guía, se adentraron en una oscura cueva, penetrando en el interior de la Montaña Roja.
Perdidos en la oscuridadLos estudiantes seguían a sus dos guías, en medio de la Oscuridad que solo se atenuaba, por la luz de las linternas y algunos orificios que dejaban pasar tenues rayos del sol. Húmedas y rojizas rocas los rodeaban y formaban las paredes de las cuevas.Mientras caminaba adentrandose en la cueva, Drantor se acercó a Caroline, Arthur que iba de tras de su amiga al verlo se puso serio y aunque el joven se percató, no presto atención, miró a Caroline y dirigiéndose a ella le contó:—Sabes Carolina, esta Montaña esta llena de cavernas y pasajes secretos ocultos entre sus paredes.—¡Fantastico! —Expresó la chica— y ¿tu hermano el gruñón y tú nos mostraran alguno de esos secretos? —Interrogó con ilusión la muchacha.—Bueno debo consultarlo con el lobo feroz —Añadió Drantor, señalando a Draco —, Pero no creo que haya problema.Draco, iba al frente del grupo abriendose camino por diversas cavernas, Drantor volvió al lado de su herman
El Mundo SecretoEl plan de rescate estaba listo y La jefa de la tribu se lo mostró al profesor Laston y Monique. Después ella su hijo y su nieto se marcharon a ejecutarlo al caer la noche. Monique y su prometido, les desearon exito y la joven mujer viendo alejarse a los jefes de la tribu le expresó a su novio:—Cariño me preocupan mis dos amigos, han estado muchas horas atrapados, ¿y si estan heridos?—Monique, no debes preocuparte, estoy seguro que regresaran sanos y salvos, Drantor los ayudará, y Caroline y Arthur son los mejores estudiantes que he tenido —la tranquilizo el Profesor.—Espero que sí, Jhon.Arthur y Drantor ya estaban terminando de abrir el túnel, aunque había muchas rocas incrustadas, las cuales con un pequeño pico lograban sacar. Caroline estaba sentada en un rincón con las piernas levantadas rodeadas por sus brazos y la cabeza posada sobre sus rodillas, se había ofrecido a ayudar a los chicos pero estos n
Criatura hermosas y peligrosasArthur y Caroline, no podían creer lo que habian oído y en un intento de convencerse, Arthur preguntó:—Eso significa que eres un...—¿Un dragón?, ¡¿eres un dragón?!—Exclamó interrogando a la vez Caroline.—Ja, ja, ja. sí, lo soy— Contestó Drantor y sonrió.—¡Incréible!—Exclamó Caroline.—Bueno, ya puedes escribir algo mejor de mí en tu diario.La chica sonrió. Arthur observaba el otro lado del risco, porque había algo que le resultaba familiar, sentía que ya había visto aquel lugar antes. Drantor se fijó en el chico y siguió sonriendo, luego Arthur deseó salir pronto de ese lugar y saliendo de su trance interrogó:—Y ¿Cuál seria nuestra salida, exactamente?—Bueno, primero debemos ir al palacio—respondió Drantor.—¡Aja¡ y ¿cómo bajamos del risco?—No hay manera, al menos no si no tienes alas—contestó el joven dragón nuevamente—iremos volando, pero para e
Revelaciones, peleas y confesionesLa mujer rodeo a la chica observándola, luego le extendió la mano para que la tomara y la acercó a la fuente, entonces al estar ante el brillo de la fuente, la reuna le dijo:—Bien señorita Caroline, mire hacia la fuente.La chica lo hizo y al tiempo que dejaba la luz de la fuente entrar en sus ojos, sintió las manos de la reina en sus cienes. La joven permaneció inmóvil y de pronto se desmayó, La reina la sujetó y tocando con un dedo su frente, la joven reaccionó, su respiración era agitada. y se tambaleaba un poco. Cuando logró mantenerse en pie miró a la madre de Drantor con los ojos muy abiertos. la bella mujer sonrió y expresó:—Vaya, eres una chica muy interesante para ser solo una humana, pude ver muchas cosas, pero entre ellas que has leído mucho sobre nosotros.—Si, majestad es fantástico su mundo, pero que fue lo que...—¿Lo que viste en la fuente Vistoré?, es un pasado propio, un presente estable, pero el fu
Tal vez no es un adiósDraco a pesar de sus heridas, y su sorpresa al ver que Arthur era un dragón se volvió a transformar y sin decir nada fue al ataque del dragón plateado, quien lo detuvo y le propino un golpe así comenzaron su pelea.Caroline, miraba sorprendida la contienda, repaso en su mente las palabras de Arthur, que la hicieron darse cuenta de sus obvios sentimientos hacia, el que pensó querer solo como un amigo, y deseaba mas que nunca que saliera con vida de aquel mortal combate. Una voz familiar tras ella la saco de su concentración, la cual expresó:—Asi qué ya estan peleando.Y al voltear vio a Danna la Jefa de la tribu, vestía una hermosa bata dorada y plateada, en su mano sostenía un báculo con una brillante piedra carmín en su extremo. La anciana bruja le sonrió al notar la confundida cara de la chica y le explicó:—N
Despues de la gran batallaEl Dragón se movió, y escuchó los gritos de la chica, la forma Dragón de Arthur se desvaneció y el chico volvió a ser humano, tenía profundas heridas que sangraban mucho, pero este se acerco a la burbuja y miró a Caroline le sonrió y se desplomó en el suelo, la chica golpeó con más desespero la burbuja, gritando y llorando. Mientras Drantor también en forma humana se acercó a Draco, y mirándolo con odio le dijo al oido:—No te preocupes, Draco, de acuerdo a lo predicho, no sufrirás demasiado.Y transformando su mano en la garra de Dragón, la enterró en el pecho de el otro y vió como la luz de la vida se apagaba de los ojos de Draco. Los dragones que aun luchaban se detuvieron y formando una linea se inclinaron ante su nuevo rey Drantor.Danna desapareció la burbuja que la proteg&
Los Visitantes "En un profundo bosque, y en medio de un valle, podrás encontrar una flor, no diré que es bella ni de delicioso aroma, porqué aunque no es fea no se compara con otras, ni tiene ningún aroma. Eso si es Rara, muy rara. su forma es la de un capullo, y pareciera hecho de hilos delgados color rosa, su tallo es de un color verde esmeralda y aunque no se ven a simple vista tiene espinas, diminutas. el capullo flota sobre el tallo y quiénes han visto eso, no han podido determinar porque sucede. Las personas que viven en los pueblos aledaños y cercanos a los Lindes del bosque, no se acercan a aquel deshabitado valle y advierten a sus hijos, de lo peligrosos que puede ser el tocar aquella flor tan extraña"—Otra absurda leyenda— Digo en voz alta—¿es normal que una chica citadina, no crea en leyendas de pueblos?, supongo que sí, y mas cuando es uno tan
La Leyenda de una peligrosa y extraña flor. Mire el sobre con tristeza y repulsión, pero sin aún abrirlo. Me tumbe en la cama y seguí mirando el dorso y repitiendo mentalmente las palabras escritas &Srita. Jade Petersen&, &Srita. Jade Petersen&, &Srita. Jade Petersen&. Cerré mis ojos unos momentos, debatiendome en abrir o no el sobre y cuando los abro con manos temblorosas comienzo lentamente a rasgar la parte superior, pero el &Toc, Toc& de la puesta me distrae en el proceso. Miro desde la cama a la puesta, está vuelve a sonar y levantándome para sentarme, digo con voz Áspera &adelante&. La puerta que miro atenta y sería se abre y una pelirroja cabeza aparece tras está, Jake, me mira con sus ojos caramelo, algo tristes y entra un poco a la habitación y detrás de este su hermano, Ian, hace una mueca que buscaba ser una s