‘¿Una diseñadora?’.

La expresión de Nolan se volvió ligeramente solemne, y no pudo evitar mirar fijamente a Colton. “¿Cuál es su nombre?”.

“Nuestra Mami no es muy conocida, así que no sabrás quien es aunque te revelemos su nombre. Por cierto, señor, ¿usted tiene novia?”, Colton cambió el tema rápidamente.

Nolan entrecerró los ojos.

‘¿Una novia? Hay una mujer viviendo conmigo, pero nunca he admitido que ella es mi novia’.

Colton sonrió. “¿Qué tal si te presentamos a nuestra Mami? Aunque nuestra Mami no es muy conocida, ella es muy asombrosa. Sin mencionar que nuestra Mami es hermosa. ¡Solo míranos, deberías poder imaginarte lo hermosa que es nuestra Mami!”.

Nolan presionó sus labios con fuerza y no pronunció ni una sola palabra.

‘Estos dos niños tienen un aspecto excepcional, por lo que la mujer que los dio a luz probablemente no se debe ver tan mal. Pero por alguna razón, me resulta casi imposible creer que ellos realmente no tienen nada que ver conmigo cada vez que los miro. Pero Willow no se quedó embarazada ni dio a luz a ningún niño antes de esto. Además, la cara de esta pequeña niña me parece familiar cuanto más la miro…’.

El reloj inteligente de Colton vibró, por lo que bajó la cabeza y echó un vistazo. Era una llamada de Waylon.

Dio una excusa y se levantó. “Señor, necesito ir al baño”.

Colton corrió a la entrada del baño, pulsó el botón de responder y se colocó el reloj junto a la oreja. “¿Waylon?”.

Waylon estaba en el hospital en ese momento y había conseguido los resultados de ADN. “Colton, el resultado ya ha salido”.

“¿Es él nuestro papi?”.

“Si, ¡Él es nuestro papi!”.

Colton asintió y frunció el ceño tras escuchar la respuesta de Waylon. “No me extraña que se parezca tanto a nosotros. Y ya que es nuestro Papi, ¿Por qué está con esa mujer maliciosa?”.

Waylon salió de la entrada del hospital con los resultados del ADN y dijo “¿No nos contó nuestra Madrina sobre el origen? A mami la echaron de la mansión de los Vanderbilt por un plan que la mala mujer le tendió hace seis años. Papi no sabe de nuestra existencia. Ni siquiera sabe de mami. Debe ser por culpa de esa mujer mala”.

El rostro de Colton se volvió sombrío. “Jum... ¿esa mujer mala quiere quedarse con nuestro papi? ¡Ni en sus sueños más salvajes!”.

‘¡Solo espera a ver como secuestramos a nuestro papi!”.

Colton cayó al suelo de repente cuando estaba a punto de darse la vuelta.

La voz de una mujer sonó de forma repentina. “¿De dónde ha salido este pequeño b*stardo? ¿Acaso no tienes ojos?”.

Leila se palpó la ropa en su cuerpo. Eran todas de marca de diseñador, muy costosas, y se resistía a usarlas en casa. Solo se los ponía cuando salía a comer con amigos.

¿Cómo podría sentirse encantada ahora que un mocoso los había rasgado?

Sin embargo, después de que su mirada se posara en el rostro del pequeño b*stardo, la cara de Leila se distorsionó debido al asombro.

‘Este mocoso… ¿Por qué se veía tanto como el señor Goldmann?’.

Colton se levantó del suelo y se sacudió la ropa. “Tú eres la que no tiene ojos, tía”.

“¿Quién…quién es tu madre?”. Leila tuvo una premonición siniestra en el fondo.

‘Un niño que se parece al señor Goldmann ha aparecido repentinamente de la nada… ¿Es posible que sea un b*stardo que una mujer cualquiera haya concebido con el Sr. Goldmann?’

‘Pero, esto no me parece correcto. El señor Goldmann no ha sido muy aficionado a las mujeres, excepto aquella noche de hace seis años…’

Al pensar en hace seis años, Leila no pudo calmarse por más.

‘¿No se había acostado esa z*rra con el señor Goldmann solamente esa vez? ¿Cómo era posible quedarse embarazada en tan solo una noche?

‘Me he topado aquí con un niño que se parece mucho al señor Goldmann cuando Maisie también ha regresado a Zlokova recientemente’.

Leila lo agarró del brazo abruptamente. “Pequeño b*stardo, ¿tu madre no te enseño a cómo hablarles a tus mayores respetuosamente?”.

Colton volteo la cabeza y la miró con su expresión fría. “¿No te enseñó tu madre a querer a los niños?”.

La mirada de sus ojos se parecía a la del señor Goldmann cuando estaba furioso.

“¿Es tu madre Maisie Vanderbilt? ¿¡Es esa z*rra tu madre!?”.

Cuando Leila se dirigió a su madre como una z*rra, Colton le mordió su mano al instante.

“¡Aah!”. Leila, quien fue mordida, estaba tan furiosa que lo empujó.

Colton cayó al suelo y rompió en llanto bruscamente. “¡Buaaaa! Alguien está golpeando a un niño aquí. ¡Buaaaaaa!”.

Los llantos de Colton llamaron la atención de varios meseros. Los meseros vieron a un niño sentado en el suelo llorando miserablemente, luego vieron la mirada dominante de la mujer. Se apresuraron a dar un paso adelante para ayudar al niño a levantarse.

“Señora, ¿Cómo ha podido empujar a un niño?”.

“¿No es esto algo que no le incumbe? ¿Me has visto empujarlo? ¡La verdad es que él se cayó solo!”.

Colton exclamó mientras sollozaba “Solo me he tropezado contigo, pero me ha empujado y ha llamado a mi Mami una z*rra. ¡Buaaaaaaaaa!”.

Los meseros empezaron a simpatizar con el niño.

El gerente del restaurante se apresuró a llevarle la noticia a Nolan. Después de todo, el niño había venido a comer con el señor Goldmann.

Después de escuchar la explicación del gerente, Nolan se levantó y se fue con el gerente del restaurante.

Al mismo tiempo, Daisie y Quincy también los alcanzaron.

“¡Waylon!”, Daisie vio a Colton sentado en el suelo, llorando. Por lo que, se apresuró a acercarse y miró a Leila. “¿¡Por qué empujaste a mi hermano!?”.

“¿Me viste empujarlo con tus propios ojos? B*stardos, Están intentando echarme toda la culpa hoy, ¿cierto? B*stardos, ¿no saben quién soy? ¡Les enseñaré como me ocupo de mocosos como ustedes dos!”.

La rabia dentro de Leila ardía aún más cada vez que pensaba que esos niños eran muy probablemente los hijos de Maisie. Levantó el brazo y estuvo a punto de blandirlo contra ellos.

Daisie avanzó deliberadamente para esquivarla.

Su pequeño cuerpo cayó al suelo tras recibir una bofetada de frente, y los meseros que rodeaban la escena se enfurecieron al ver esto.

Daisie no lloró, pero una marca enrojecida apareció en su blanca y delicada mejilla.

“Tú…tú misma te lo buscaste”. Leila fue tomada desprevenida cuando la niña se había precipitado antes de que su mano pudiera alcanzarla.

Sin embargo, al siguiente segundo, el rostro de Leila palideció en un instante al ver a Nolan. “señor Gold... señor Goldman…”.

Después de ver la marca en la mejilla de Daisie, la expresión de Nolan se volvió sombría, y la temperatura del aire rodeándolo bajo en el mismo momento. “Señora Vanderbilt, ¿Por qué ha hecho un movimiento tan duro a una niña?”.

“Yo...No, Mr. Goldmann. Este niño fue quien chocó conmigo primero. No solamente no se disculpó después, sino que me replicó. Incluso me mordió. Puede echar un vistazo a esto”, Leila extendió la mano que acababa de ser mordida. La marca del mordisco era aún muy visible.

Colton sollozó. “Tu fuiste quien me regaño primero. ¡Incluso llamaste a mi Mami una z*rra! ¡Por eso te mordí!”.

Enormes lágrimas caían de sus ojos y el llanto sonaba tan desgarrador que los meseros se sintieron sumamente angustiados.

“Aunque este niño se haya tropezado contigo, es más bien por accidente. ¿Por qué discutir por un asunto tan trivial con un niño?”.

“Si, tú también eres madre. ¿No te da lástima este niño?”.

“Después de un golpe tan grande, temo que este incidente pueda ensombrecer la infancia del niño”.

Nolan se acercó a Daisie y Colton. Primero se dirigió a Daisie, que era demasiado terca como para llorar, y le frotó la mejilla, la cual se había puesto roja e hinchada. Después secó las lágrimas de Colton.

Las emociones de estos dos niños realmente habían afectado su estado de ánimo.

Nolan se levantó y le dirigió una mirada irrefutable a Leila. “Discúlpate con los niños”.

“Señor Goldmann, ¿Cuál es su relación con estos dos niños?”.

Los delgados labios de Nolan se apretaron con fuerza.

‘Los dos niños no tenían nada que ver conmigo, pero yo…’.

“No tienes que preocuparte de mi relación con ellos. Solo necesitas disculparte con el niño porque eres la madre de Willow, y te prometo que no volveré a complicarte la vida por este asunto”.