__ ¡¿Como demonios se les escapa una simple mujer?! - estalló Mauro contra el grupo de hombres que regresó cuando la noche cayó. - Es una mujer, ustedes están armados. ¡Ella es una! No dio crédito a tal situación, no tenía sentido, mucho menos al saber que se les perdió en la zona más cercana a la fortaleza, ¡Era imposible! __ El general Cock acaba de llegar. - le avisó uno de sus hombres. __ Que pase. - dispuso sentándose nuevamente en la silla que tenía en su espalda. - Y ustedes, regresen a ese sitio. Encuentrenla y la traen a mí, antes que la pelea termine. Todos salieron con las nuevas órdenes, porque aún cuando sabían cuan peligrosa era esa zona, órdenes eran órdenes. __ Usted dirá, señor Lance. - el general dijo cuando estuvo frente al bioquímico que soltó el aire que estaba atascado en su pecho. __ Quiero que custodien este lugar durante las dos horas que faltan para la pelea. - tomó el expediente que tenía cerca. - Hay algo que aún no me cuadra con esto y no quiero pens
El sonido de la campana hizo que Joseph no le quitara los ojos de encima a los tres sujetos que se vieron entre ellos como si se comunicaran con la mirada para encerrarlo. Eran una manada, así se consideraron siempre y así atacaron cuando uno fue el primero en lanzarse sobre Joseph, el cual logró esquivarlo, viendo al otro que también iba por él. Rompió la fila empujando al segundo contra el tercero, causando que el primero de ellos actuara por impulso, algo que ayudó a Joseph a coger el cuchillo que le quiso enterrar para cortar a su compañero. Pero no se quedaría quieto, y estampó su cabeza contra la del mafioso que la sacudió para no dejarse tomar ventaja y con una patada lo hizo doblarse, tomando su cabeza para estampar su rodilla en la cara. Un puñetazo hizo que Joseph cayera al suelo, no obstante rodó para evitar que la hoja filosa se incrustara en su cara. Recibiendo a uno de ellos que llegó a una velocidad bestial para intentar rebanarle la garganta. Movió la cara y solo le
Los recuerdos de la paz que tanto profetizó Mauro no tuvo ni siquiera el inicio, pues ahora sus pisadas solo tenían un camino, salir de ahí antes que los sujetos que cayeron de todos lados la derribaran por completo. La rapidez con la cual cambió el ambiente a uno donde él no tenía el control lo devolvió a su realidad y no solo se trató del cambio abrupto para llegar a ser la presa, sino del que cada salida la vió cerrada y tuvo que recurrir a buscar una dosis de su adoración, pues el dolor en sus articulaciones fue un impedimento para seguir su carrera contra el tiempo o los hechos. Todo lo que dijo le pertenecía o el poder que una vez probó, ahora se veía derribado con cada hombre que era derribado con la frialdad de aquellos que no dejarían la ofensa de haber tocado uno de los suyos, sin cobrarlo.Mientras buscó la forma de mezclar cada una de las sustancias que ahí tenía, en la parte exterior del lugar Joseph salió con el rifle contra su costado, derribando a cada uno de los que
Advertencia: escenas de muert3 muy explicitas. Pasa los párrafos si eres sensible. .Por más que los pulmones de Mauro se movieron de un lado a otro para obtener el aire que su rabia le exigió, nada aminoró el enojo por lo que estaba pasando.Lo habían atrapado. Lo habían capturado. No logró escapar. Esas tres frases se repitieron una y otra vez en su cabeza al punto de no oir nada más que eso cuando lo instaron a ponerse de pie. __ No seré tu burla. - le dijo a Joseph cuando este se plantó frente a él. - No seré el payaso con el cual te quieres divertir. Joseph elevó las cejas y se rió de las palabras del hombre que se sostuvo de una mesa metálica para seguir de pie. __ Ni siquiera para payaso sirves. - declaró con seriedad. - Pero me causa risa que aún te tomes tanta importancia.Vió el termo que contenía lo que este había creado y lo recogió sacando la sustancia amarillenta que estaba en las jeringas que preparó. __ Cariño, necesito que vayas por Leonardo. Hay algo que debe v
La noticia se esparció por todos lados cuando la muerte de tantos en un lugar que salió a la luz, en el momento que muchos nombres aparecieron como caídos en un suceso que los dejó como un enfrentamiento que salió mal en todos los aspectos. Con la influencia de un hombre con poder para mover los hilos a su conveniencia, les resultó fácil que dicha información fuera la única recibida a los medios que en poco tiempo enterraron dicho tema. Pues no hubo mayo suceso, luego de eso.Gálata podía estar segura de no irían por ella o Johan, pero quién se acostumbró a vivir huyendo, ya lo tenía como un instinto vivo, el cual siempre sería su recurso. Que engañaran a Mauro Lance con que había sido enviada en un helicóptero que iba vacío, haciendo malabares para que hasta su propia gente le mintieran, le aseguró la lealtad que los Crown podía tener. Pero no era la única razón y ella lo sabía. Solo que vivir con un miedo constante no podía ayudarle. Dejó las muestras sobre una mesa y escuchó la
Una mañana tranquila con los Crown, que extraña y hermosa se sentía. La luz entró por la ventana y el viento frío pero delicioso de un nuevo día hizo a Joseph abrir los ojos solo para ver cómo el blanco tiñó todo lo que afuera podía verse. Vio a Keyla totalmente dormida en su costado, con hebras de su cabello marrón cayendo por sus mejillas rosadas, mientras su brazo descansó sobre el abdomen del mafioso que se vio sonriendo. Eran muy pocas las mañanas que despertó así, desde que la recuperó, luego de cinco largos años, donde millares de futuros fueron los que vio en pesadillas que lo acabaron. Pesadillas donde la sangre, un grito y la forma tan inesperada de perderla, derribaron barreras y lo dejaron indefenso.Pero ahora eso quedó en el olvido.Verla ahí borró lo que en ese tiempo existió, junto a él y con cara de estar satisfecha por dormir a lado de su esposo, no la quiso remover. Le gustó saber que lo viera como ese lugar al que siempre podía arrimarse y encontrar que estaba li
La noticia del embarazo de Keyla llegó a los oídos de todos, siendo recibido con gran alegría por parte de cada miembro de la familia Crown, quienes no dudaron en abrazar y felicitar a los dos. Luisa no podía estar más feliz. Era increíble que pudiera vivir eso una vez más, un nieto sumándose a su alegría. Al igual que Aarón, quien aún con el carácter de no ser tan emocional, no dudó en sonreír al saberlo.Braulio desde su sitio vió todo lo que su esposa una vez le comentó, su familia sería grande, tanto como jamás podría imaginarlo. Pero él lo puso en tela de juicio, ya que solo había tenido dos hijos y uno de ellos estaba extendiendo su propia familia más allá de lo imaginado.Vio a Marcelo y supo que este también tenía la misma duda, aunque vió que no era su intención quedarse solo. Por lo que él único motivo para seguir en ese mundo y negarse a dejarlo era verlo de esa misma forma. Quizá algún día no tan lejano sucedería, y él estaría ahí para presenciarlo. Miró a Keyla en la m
Quizá no era la mejor forma de acercarse a la plenitud, un mundo donde había todo tipo de entradas a las tragedias, pero también existían aquellos que evitaban que eso pasara más allá de un mal recuerdo.Braulio solía decirles que una caída de un Crown siempre llegaría, pero lograría levantarse a tiempo de que la segunda llegara a derribarlos. Eso, Joseph y Keyla lo tenían presente todo el tiempo y no descuidaron ni un solo segundo lo que tanto deseaban mantener con ellos. Joseph aún no podía creer lo que tenía en sus brazos, en una sala de hospital donde sabía que su esposa estaba segura, se atrevió a salir para ir con él y poder verlo de nuevo. No le costó mucho que la enfermera lo dejara cargar al bebé de solo una hora de haber nacido, quien tenía la cabeza pegada al pecho de su padre, quien estaba convencido que estaba escuchando un terrible ruido allí adentro. Y es que no fue fácil para él, el tener que atender un parto, pero con indicaciones que le dieron por teléfono pudo no