Alex entró encontrándose a las dos mujeres casi llorando. “Dejen de llorar, se supone que las bodas son pura felicidad”.
Sara miró a Alex. “Viniste”. Se lanzó a él abrazándolo.
Alex la tomó en sus brazos oliendo su aroma embriagador. “Claro que vine no podría dejarte sola en un momento tan importante”.
Alex decía esas palabras con gran dolor en el corazón.
Dan entró detrás saludando a Amanda. “Te ves hermosa Amanda”.
Ella sonrió. “Gracias Dan, es bueno que estén aquí”.
Amanda llevaba él mismo vestido que Elena, ellas eran las damas de honor.
Dan se acercó a Alex y Sara, felicitó a la novia. “Sara te deseo lo mejor en esta nueva
Frank se acomodó en el escenario junto con otros músicos, Aldo le hizo la seña y ambos hermanos se sonrieron. Frank empezó a cantar la canción que Aldo dedico a Sara: Only You - The Platters Ellos bailaban al ritmo de la música mientras Aldo le cantaba a Sara mirándola fijamente. Only you, can make all this world seem right Only you, can make the darkness bright Only you, and you alone, can thrill me like you do And fill my heart with love for only you A-ha Only you, can make all this change in me
Alex escuchó los gritos y corrió hacia la habitación encontrando a Sara llorando, tenía en sus brazos a Aldo quien trataba de consolarla entre palabras cortadas mientras sus ojos se abrían y cerraban tratando de aguantar el dolor. Alex se acercó notando la sangre en su pecho. Sara cubría la herida y hablaba con Aldo. “Por favor, por favor, no me dejes, no me dejes…” Ella estaba en shock. Alex quitó la mano de Sara y abrió la camisa de Aldo, notando la entrada de la bala, lo giró despacio tratando de no lastimarlo para buscar el orificio de salida, pero no lo encontró. “¡Sara!” Alex le gritó para que lo mirara. “Debemos llevarlo al hospital”. Ella asintió nerviosa, besó los labios de Aldo susurrando. “No puedes morir… estoy embarazada, no nos puedes dejar”. Aldo sin p
Frank y Elena también entraron a verlo, estaba rodeado de cables y una mascarilla de oxígeno, las máquinas pitaban cada cierto tiempo. Nunca se imaginaron ver a su hermano de esta manera, era un hombre fuerte y valiente. Elena lloró en brazos de Eduardo y Frank solo se recostó en la pared cansado. Amanda se acercó. “Debes descansar, todavía estás débil”. El giro su cara para verla. “¿De verdad te preocupó?”. Ella se quedó en silencio mirándolo. El río tristemente. “Olvídalo… iré a descansar”. Se fue dándole la espalda, ella se sintió tan mal con el comportamiento de Frank. Celeste despidió a la gente en el restaurante, la mayoría de los invitados estaban preocupados por Aldo, el alcalde prometió m****r un aviso en el centro de la ciudad para que se supiera del
Siete meses después… Aldo besaba los labios de Sara, mientras bajaba despacio por su cuello. “Aldo se hará tarde…” El solo murmuró. “Solo un poco más…” Ella trató de aguantar las ganas de gemir, con el embarazo su cuerpo era más receptivo. “Aldo …”. El bajo besando su pecho, se detuvo en el vientre abultado besándolo y acariciándolo con la mano, bajó más hasta llegar al final … “Sara se retorció de placer, mientras Aldo hacia su trabajo en aquella zona. Él se detuvo mirándola. “¿Quieres que me detenga?”. Ella negó controlando su pecho agitado. Sara regresó a su oficina, tenía algunos pendientes antes de poder tomar los dos meses para poder tener a sus bebés y recuperarse, tocaron su puerta y ella pidió que pasaran Axel y Dan entraron saludándola. Alex se acercó besando la mejilla de Sara y después se agachó para tocar y besar su vientre. “Hola pequeña, ¿Te has portado bien con tu madre?”. Dan beso a Sara en la mejilla y se acomodó en el sillón esperando que Alex dejara de saludar su próxima hija. Alex se levantó. “¿Tomaste tus pastillas a tiempo? ¿Has comido vegetales verdes? ¿Los análisis como han salido?”. Sara cerró sus ojos por un momento, miró a Alex. “A tus preguntas… Si, Si y salieron perfectamente”. Aldo lCAPITULO 68 ¿PORQUE DUELE TANTO?
Aldo se acercó besando su mejilla. “Está feliz, es papá primerizo”. Sara hizo unamueca curiosa suspirando no muy conforme. Aldo la miró diciendo. “Además… eso es bueno, tengo mas tiempo para estar solos los dos”. Sara sonrió recordando sus noches con Aldo, quería recuperarse rápido. Amanda entró a la casa necesitaba encerrarse en el baño a llorar, se sentía tan mal ver a Frank con la chica feliz. Limpio su cara mientras se miraba en el espejo, salió del baño acercandose a la ventana para ver a través de ella el jardín donde todos conversaban. Al girarse para regresar se encontró de frente con Frank. Ambos se miraron en si
Frank se quedó en silencio. Amanda se apretó los ojos. “Tu silencio lo confirma…” Ella miró hacia arriba tratando de calmar sus lágrimas. “Recuerdas lo que te dije en aquella ocasión, deseo que me ame un hombre que sepa lo que quiere, te lo dije eres muy joven, necesitas conocer chicas, salir, disfrutar de tu soltería, yo quiero algo serio, no puedo estar con alguien que apenas está viviendo su vida, te falta pasar por tantas cosas Frank”. Frank negó. “Yo te amo Amanda, las cosas no son como piensas”. “Frank… por favor. Sales en televisión y dicen que estás en una relación con la chica, regresas al pueblo con ella, dices que solo es tu amiga, me hablas de que me extrañas y quieres volver conmigo, pero me entero que si tienes una relación con ella ¿A que estas jugando
Pasaron las semanas, Frank y Samara salían en revistas y noticias en televisión, pero era parte de la publicidad que al representante se le ocurrió, las ventas subieron de ambos cantantes, era un éxito, los fans querían saber más de la pareja. Frank, fastidiado, había pensado en varias ocasiones dejar el medio y volver al pueblo, seguir trabajando desde lejos. Cuando Aldo lo llamó para avisarle de los bebés se puso feliz y empaco sus cosas, mientras llamaba al representante para avisarle que viajaría. Samara lo observó. “¿Te vas?”. “Tengo que ir a mi hogar, mi hermano es papá otra vez”. Ella se alegró y preguntó. “¿Puedo ir contigo?”. El representante escuchó desde el teléfo