Narra Alice Wright:
Recuerdo aquello como si hubiese Sido ayer, todo lo que viví junto a mi amado esposo Hades Dogaru...veo a Adrienna nerviosa, le he dado un té para los nervios, mientras tanto, me he sentado en mi sofá favorito esperando noticias, sonriendo dulcemente a Adrienna, le aseguro que todo estará bien, Masón Slorach es un buen hombre que la pondrá a salvó...aunque no sé si será lo mismo hacia Vicenzo.
Recuerdo a mi suegro, el infame Kronos y aquella guerra que contra el tuvimos en busca de encontrar la paz antes de que él encontrara su final.
Fue una mañana fría en que conocí a ese cruel hombre...nadie podría imaginar que un hijo bastardo suyo intentará hacer resurgir de las cenizas a la sacra spina, los recuerdos me invaden...y me lastiman.
Flash back:
La noche había caído en P
Hades Dogaru miraba como Vicenzo apresurado, buscaba tener todo listo para el escoare de su amada Adrienna...recordando a su vez cuando Alice estuvo en peligro.El oleaje del océano se dibujaba con calma ante sus hermosos ojos de zafiro, el vaiven de las personas que alegremente caminaban por la playa, ajenos a toda violencia y con aquellas inocentes sonrisas plasmadas en sus rostros, casi lo hacían olvidar las razones que tenía para estar allí, en aquel paisaje de ensueño que las playas de Palermo ofrecían, no solo había dicha para admirarse, también, se hallaba el horror más grande y profundo que todos aquellos que habían salido a dar un tranquilo paseo ignoraban por completo, las personas se miraban felices, desde que Figlio Di Satana había tomado el control sobre el tráfico y distribución de estupefacientes sacando a la Sacra Spina del camino, se respiraba en aquella c
Nunca me ha gustado pensar demasiado en nada, creo que realmente no merece la pena desperdiciar la vida en medio de pensamientos, siempre, tenemos que vivir el momento. A Veces estamos y de un segundo a otro ya no mas; la vida es tan fragil e impredecible, que en cualquier instante simplemente dejamos de existir, mas aun, cuando vives con los riesgos de pertencecer a una mafia.Los dólares llegan en abundancia, las mujeres se lanzan a tus pies dispuestas a lo que sea con tal de complacerte, vino, comida de lujo, costosas compañias, la vida de un mafioso se vive a toda prisa porque sabes que en algun momento moriras. Sea a manos de otro mafioso, sea por un accidente, en una balacera o con una ancla amarrada a tus píes, todos sabemos que en un instante, todo terminara.No puedo perdonarlo, no puedo simplemente aceptar que Vicenzo haya decidido tener una vida normal...sus manos estan cubiertas de sangre asi como las m&iacut
Narra Ángelo:El viaje hasta esas tierras peligrosas, no me ha parecido tan largo como debería ser, quizás se deba a la ansiedad que tengo de finalmente terminar las cosas. Se que Vicenzo no es un hombre cobarde y que saldrá a darme la cara, eso espero que haga. A estas alturas, el ya debe de estar plenamente consciente de que se en donde se oculta, después de todo, deje las cabezas de ese idiota traidor y de su esposa a las afueras de los territorios de Figlio Di Satana para dejar claro mi mensaje, que se en donde se encuentra mi querido y débil hermano. Hades Dogaru es un hombre temible y poderoso al igual que su hermano Zeus lo es. Ambos controlan prácticamente toda Italia con puño de hierro y son básicamente intocables. Me acomodo mejor en el asiento del avión que esta a punto de aterrizar y miro la hermosa playa de Positano. En alguna de esas casas allá abajo, se demasiado bien que
Narra Ángelo:Me he encontrado con un reten encabezado por el propio Hades Dogaru en la entrada a Positano, mis hombres que trataron de usar las otras entradas, me han informado que les ha resultado imposible pasar hacia aquel pueblo debido a los retenes armados entre la policía y Figlio Di Satana. Aquel hombre cubierto de tatuajes, incluyendo en su cuello, me mira fijamente antes de dar una señal ordenando a sus hombres el soltarme. Me lo han quitado todo, solo dejándome un arma corta. No entiendo que es lo que esta pasando.– ¿Tan cobarde es Vicenzo que ha mando a un enorme perro a acabarme? – cuestiono con ironía mientras esos helados ojos azules mi miran con cruel indiferencia.Un escalofrió me recorre, estoy frente al hombre mas poderoso de Europa, el mas temido y el rey de la mafia por derecho propio. Todos conocen a la leyenda de Hades Dogaru, hijo de un
Narra Vicenzo:Ángelo que mira fijamente, ninguno de los dos ha pronunciado palabra alguna. El odio y el desprecio que se ven en sus ojos, me calan profundamente en el alma, pero no hay nada mas para hacer. Durante un momento, mi hermano mira a la luna llena que brilla sobre nosotros. Ambos lo sabemos, este es el final del camino de odio y de sangre que decidimos vivir, gane quien gane, ambos hemos perdido.– tu una vez dijiste que la familia estaría siempre justa, que llegaríamos tan lejos como llegaron los Dogaru y que incluso, tu serias el nuevo Hades – me dice y luego comienza a reír como un demente. – Mírate ahora, eres un charlatán bocón y mentiroso, te dejaste seducir por esa perra rubia y perdiste el rumbo, hiciste que todos perdiéramos el rumbo. Eras mi hermano, se suponía que llegaríamos a la cima, no que te olvidarías de lo que prometist
Narra Adrienna:He tenido noticias de parte de Alice. Me ha llamado esta mañana para informarme que todo se ha terminado. Por un segundo mis nervios se hicieron presentes haciéndome imaginar mis peores temores, pero luego, lo que me ha contado a disipado todo miedo y toda angustia, y es que Vicenzo a sido el ganador. He prendido una vela para el descanso del alma de Ángelo, pues, aunque el realmente quiso asesinarnos, no deja de ser el hermano de mi amado Vicenzo, realmente lamento que las cosas hayan terminado de tales maneras pues considero que pudo haber una respuesta pacifica para todo esto. He empacado mis cosas, Vicenzo está herido y yo tan solo deseo estar a su lado.Narra Vicenzo:Veo el techo blanco de esta habitación de hospital. Según lo que me han dicho, he perdido mucha sangre por aquel disparo y casi muero por ello. Ángelo esta muerto, Hades me ha dicho que l
Observo mis ojos celestes reflejados en el espejo mientras trato de maquillarme sin causar desastres.– Vamos Adrienna, puedes conseguirlo – me digo a mí misma con premura.No amo perder el tiempo, y mucho menos para maquillarme, hoy es un día especial, mi cumpleaños, por fin soy mayor de edad… alcohol, licencia de conducir y libertad… esto es lo que me han dicho las locas de mis amigas.Estoy aterrorizada, me gustaría transcurrir mi día de manera tranquila, pero ellas han decidido que debíamos celebrarlo, preludio de una catástrofe anunciada, tanto es así, que mis amigas han organizado una velada llena de diversión: discoteca, que no encaja exactamente con mi idea de diversión, preferiría con creces una noche en el cine.Me quieren mucho, se han esforzado mucho para organizarme una noche especial y
—Felicidades, Adrienna. Sabemos que hoy es tu cumpleaños. —Dice uno de los chicos, sin embargo, estoy distraída porque mi atención está centrada inexplicablemente en Vicenzo.—Adrienna, ellos son Iván, Dimitri, Christopher, Liam y Vicenzo. El tono eufórico de Jianna me deja sin palabras. Todos me saludan excepto él, Alexander, el hombre con la mirada incandescente. Idiota, presuntuoso.—Son de Rusia —Me informa Carlotta. —Eso lo explica todo —Comento mirando intensamente Alexander. Frío. Carente de expresión. Solo podía ser ruso. Un capricho del destino, conozco su país porque siempre he tenido unaCuriosidad incomprensible por su lengua y costumbres. En ocasiones anteriores he confesado a las chicas que me gustaría visitar Moscú y espero que no saquen el tema.—E