Lo empujó con todas mis fuerzas—Te gustaría imbécil —le grito.
Fernanda, la secretaria vuelve aparecer en la oficina—Señor Frank, llegaron los socios para la reunión—le informa.
Levanta su mano—Ya voy—dice.
Lo observó con las manos cruzadas—Yo también iré a esa reunión—le informo.
Larga una carcajada—No, te vas a casa y listo—me ordena.
Salgo rápido de la oficina, pido indicaciones de dónde era la sala de reuniones y cuando logré llegar me encuentro con dos hombres mayores y otro joven como de mi edad. Dejo las carpetas a un lado—Buenos días, señores. Es un placer recibirlos acá —digo abriendo mis brazos.
A mi lado aparece Alan con un gesto furioso, nos sentamos juntos y dejamos que los socios se acomoden—Bueno empecemos—ordena.&nbs
Salí rápido de esa sala de reuniones, no podía dejar de que él jugará con mi cabeza ni con mi corazón y tampoco sería una más de su larga lista. Me chocó con alguien —Lo siento—dice ayúdame.Me levanto del suelo como puedo y lo miro—No pasa nada, lo siento también—sonrió.Ese hombre alto, morocho y unos ojos color miel me quedan mirando dejándome sin aire y poniendo una enorme sonrisa en su boca. Me dejaban sin palabras, solamente fue un delirio mío y negué con la cabeza. Apoya su mano enorme en mi hombro—¿Estás bien? —me pregunta.Muevo mi cabeza varias veces y me doy cuenta que no estoy hablando. Aclaro la voz—Si, si—respondo.Sonríe—Me alegro, ¿trabajas aquí? —pregunta mirándome.—Algo así, si puede
Esa parte de estar casada con él no me importaba demasiado porque sabía que no sentía nada. Apenas me conocía por mi nombre y ahora debía tratarme como su esposa. La parte que no entendía de su vida ya lo hacía y eso me aliviaba porque desconfiaba de mi misma.Respiro hondo—Entonces veo que Alan es así por culpa de alguien más. Gracias—la abrazo.Toma distancia—No le cuentes a nadie que te dije eso porque nos pidieron discreción—dice rogándome.—No te preocupes que no diré nada—le guiño el ojo.Después de esa conversación dónde conocí a más de Alan a través de otra persona, me acomode a entender varios documentos que se presentaron en la reunión que habíamos tenido y por primera vez sentía que estaba en mi mundo. La terminología que manejaban l
Niego con mi cabeza—Ya no quiero escucharte porque me haces mal—lo vuelvo a empujar.No me pude resistir a enfrentar lo que tenía para decirme y solo logré escaparme. Subí lo más rápido que pude las escaleras, me encerré en mi habitación y no salí de ahí hasta el día siguiente.Ya no aguanta más tener que fingir llevar un matrimonio feliz cuando apenas nos podíamos ver y nunca habíamos compartido como cualquier pareja una cama. Alan estaba siendo tan él que yo lo único que buscaba era la forma de regresar a casa y no tener que lidiar con tantas responsabilidades. Sabía muy bien que de este matrimonio dependían mis padres y debía darle un hijo a la familia Frank para terminar el acuerdo. La cosa más difícil es poder tener un hijo con Alan Frank y tener que estar atada toda la vida a su lado por la culpa de las ambiciones f
La propuesta de Drake parecía mas que buena para mi, pase mucho tiempo atrás suyo y quedaba como la ingenua enamorada de una persona que tal vez no sabia que existía. Supe que le habían roto el corazón, jugaron con sus sentimientos y él sin darse cuenta estaba jugando conmigo.—Esta bien pero ahora debemos ir a tu empresa porque quiero asesorarme con una cosa—sostengo.Entrecierra sus ojos—¿Qué tienes en mente?—pregunta sonriendo.Suspiro—Quiero dar una buena impresión en la empresa porque Alan piensa que no sirvo para este trabajo—le pido una ayuda para poder afrontar cualquier cosa que suceda.Llegando a su empresa pude enamorarme de toda la instalación, me quede mirando para todos lados y ver a Drake conectando con sus empleados. Entramos a una oficina enorme—Acá es donde empezamos a trab
Camina hacia mi—La parte de mi herencia como corresponde—responde riéndose.—No te me acerques, imbécil. Eres el demonio—le grito.Se ríe en mi cara, camina hacia otro lado y me voy directo a mi habitación, miro el techo y no entendía como fue que ocurrió tener que llegar hasta el punto de odiar mi propia vida. En cuanto a mi cabeza llena de pensamientos malos hacia él explotaba, me di varias vueltas en la cama y no logre dormirme. Nuevamente salí para poder comer algo y un ruido hace que grite —Dios—exclamo.Estaba ahí sentado tomando algo y mirando su celular —Deberías estar durmiendo porque es tarde— suelta de repente.Me volteo—Tu también, deja de comportarte como si fueras mi padre porque no lo eres —sostengo.Ya noto mi cambio de humor, no quer&iacu
Ya había pasado un mes, logré empezar a trabajar en la empresa y disfrutar de saber algo mínimo. Drake cada tanto me veía afuera del trabajo, podíamos compartir más comidas juntos y salidas.—Debes saber que Alan está loco por ti—me dice riéndose.Niego con mi mano—No, lo sé. Hay días que no nos vemos en la casa y en la empresa todo es raro—sostengo.Pide la cuenta de la comida, nos dispusimos a caminar por las calles de aquella noche cálida y logré entender lo más lindo que me había dado la vida:un amigo. Contaba con él hasta en los momentos más difíciles y no le escondía nada.Toma mi mano—¿Porque no intentas reponer la relación con Alan? —me pregunta.Elevo mis hombros—Porque sé que tenemos diferentes metas, no llegamos a entendernos y cada v
—Si— respondí sonriendo.Él me abrazo y después dejo un beso sobre mis labios. Darme ese espacio para verlo de otra forma hizo que más me gustará.Me suelta rápido y camina hacia su escritorio—Bueno ahora debo terminar de hacer unos asuntos—me dice.Entrecierro los ojos—¿Estás bien?— le pregunté.—Si.Sin embargo, así de la nada ese hombre que hacía unos instantes me declaraba su atención y ahora me apartaba. Se lo notaba sumamente nervioso y lleno de preocupaciones en su cabeza—Estas raro, ¿pensaste que diría que no? —pregunte.Se toca la cabeza frustrado—No es eso, Harper. Quiero terminar con esto— señala los papeles arriba de su escritorio.Desesperado de tener que dar explicaciones hasta en esos momentos, se levanta molesto y me se&n
—No es así, lo siento si te hice sentir eso—dice acercándose.No sabia si debíamos seguir o solamente creerle a lo que decía y simplemente me detuve a verlo—¿Entonces que querías hacerme sentir?—pregunte.Rasca su nuca nervioso, mira hacia el suelo y después se enfoca en mi —No se como hacerlo, solo no lo se porque me gustas pero siento que no podre darte todo lo que quieres—sostiene.Sonrió—Alan solamente necesito saber si esto que sentimos el uno del otro es mas que un deseo—le aseguro.El cambio de personalidad tan repentino de Alan hacia que dudara de todo hasta de mi misma, a veces parecía que quería escaparse y directamente no se volteaba a verme. En cambio en mi provocaba cosas con tan solo mirarme, hacia tiempo que lo venia siguiendo en la Universidad y tenerlo tan cerca provocaba que no pudiera