Llegó la pesadilla para Emperatriz.En la mansión de los Cimarro, se encontraba Emperatriz encerrada en su habitación totalmente devastada, tenía días sin poder conciliar el sueño pensando en la sola idea de no saber cómo iba a enfrentar el casarse con un hombre al que ella no amaba.Había amanecido sentada en su cama sin haber pegado un ojo en toda la noche, no había salido de su habitación, tenía el vestido de novia dentro de la misma caja en dónde lo había enviado Rogelio. Estaba totalmente ausente como si estuviera en otra dimensión, no quería ver a nadie y lo único que deseaba era refugiarse dentro de su cama y no salir nunca de allí.De pronto escuchó la voz de su madre que la llamaba del otro lado de la puerta totalmente preocupada en vista de que ella no había salido de su habitación aún y tenía que irse preparando para la boda.— ¡Emperatriz! ¡Emperatriz! Por favor ábreme la puerta hija, ¡Emperatriz! Por favor ábreme la puerta mira que tenemos muchas cosas que hacer y ac
Cuatro horas después…En la mansión de los Salinas ya todo estaba en su punto, el jardín estaba divinamente decorado y lleno de mesas con manteles muy finos y con adornos florales de las especies más exóticas que existían. Los invitados habían comenzado a llegar todos en su mayoría conocidos de Rogelio, había contratado los servicios de una agencia de festejos muy prestigiosa en toda la ciudad y la misma se había encargado de que no faltara un solo detalle para que los invitados se divirtieran y se sintieran totalmente bien servidos.Ya Rogelio había salido de su habitación para saludar a todos los invitados y compartir con ellos momentos antes de celebrarse la tan esperada boda.Estaba impecablemente vestido, con un traje negro, siendo este el color que lo caracterizaba y que lo hacía sentirse fuerte y poderoso, realmente se veía muy atractivo.Mientras conversaba con algunos invitados en el jardín que lo estaban felicitando muy sorprendidos de haber recibido la invitación para su bo
Había mucha gente en la recepción, Rogelio se había perdido de vista porque ya se acercaba la hora de la ceremonia, el juez ya había llegado puntualmente junto con su secretaria y ya los invitados estaban cada uno en sus puestos nada más a la espera de la entrada triunfal de la novia.Guillermo y Rogelio no se habían encontrado aún frente a frente, era casi imposible en ese momento por la cantidad de invitados que había además del personal contratado de la agencia de festejos que estaba laborando en ese momento. Sin mencionar a los guardaespaldas de Rogelio que eran unos cuantos y que estaban vigilando en cada punto del enorme jardín, todo estaba divinamente preparado, la mesa donde iba a ser realizada la ceremonia estaba decorada con flores naturales y muy exóticas que había mandado a buscar personalmente Rogelio desde un lugar muy especial del interior del país, todo estaba decorado realmente con un gusto demasiado exquisito donde se veía claramente el desborde de dinero que había h
Maruja saludó a Rogelio con mucho zalamería:— ¿Cómo le va don Rogelio? La verdad es que se ve radiante y muy guapo, definitivamente mi hija va a quedar muy deslumbrada cuando vea con el hombre tan atractivo y galán con el que se va a casar.Rogelio por supuesto correspondió al saludo efusivo de la que iba a ser su futura suegra, además debía mantener las apariencias delante de todos los invitados que tenían las miradas puestas en ese momento en él.— Gracias por sus cumplidos o mejor dicho por tus cumplidos Maruja, porque no veo necesario que nos sigamos hablando de usted, cuando a partir de hoy vamos a ser familia, ¿No te parece querida suegrita?— Pues tienes toda la razón querido yerno, ya falta poco para que nos convirtamos en una verdadera familia.En vista de que Julián se estaba tardando demasiado en llegar con el contrato, le preguntó:— Aprovechando que estás aquí Maruja, me gustaría saber, ¿Por qué se tarda tanto Emperatriz en entrar? ¿Acaso está dudando en firmar el contrat
Guillermo no salía de su asombro porque lo último que él esperaba, era encontrar a Maruja en esa casa, pero como sabía que la familia de Emperatriz tenía un roce social con gente de clase alta como lo habían sido ellos antes de quedar en la ruina, se imaginó que tal vez conocían a Cándida y a su familia; y ese era el motivo por el cual Maruja se encontraba allí.Guillermo por su parte quería acercarse a Maruja porque no quería perder oportunidad y enseguida le dijo a Cándida:— Me perdonas un momento, es que necesito ir al baño. — Cándida enseguida le contestó:— Sí claro, por este lado al final están los sanitarios, si quieres te acompaño para mostrarte donde están.— No, no es necesario, tranquila, mejor mientras yo voy al baño tú encárgate de buscar otras copitas de champagne, ¿Está bien?— Jajaja claro que sí, ya las busco.Guillermo solo estaba tratando de distraer a Cándida mientras él se acercaba a donde estaba Maruja porque quería saber si Emperatriz se encontraba allí con ell
Margarita indignada enseguida exclamó sin quitarle la mirada a Brenda:— Rogelio, hijo, ¿Pero se puede saber qué hace esa mujer aquí el día de tu boda?— No sé Nana, créeme que yo también estoy tan asombrado como tú, no la veía mucho antes de que me dejara plantado como un imbécil en la iglesia, la verdad no comprendo cómo se le ocurrió aparecerse aquí y además quién le avisó que yo me casaba hoy.— Pero mi niño si quieres la mando a sacar en este preciso momento, no vaya a ser que venga a buscar problemas y armar un escándalo.— No nana, es mejor dejar las cosas como están y no empeorarlas, además todas las miradas están clavadas en ella y en mí porque están esperando a ver cuál va a ser mi reacción por su presencia aquí.Brenda comenzó a caminar hacia donde estaba Rogelio mientras todas las miradas de los invitados se dirigían hacia donde estaban ambos, esperando saber si ella era la tan misteriosa novia que iba a casarse con Rogelio.— ¿Cómo estás Rogelio? — le dijo Brenda mirándol
Para Rogelio fue la mejor noticia que había podido recibir en todo el día, estaba muy ansioso ya que tenía mucho temor de que Emperatriz no quisiera casarse con él a última hora, ya todo estaba hecho ahora solo quedaba ir a dónde estaba el juez y esperar pacientemente a Emperatriz entrar del brazo de su padre.A Brenda no le quedó otra alternativa que quedarse callada y controlar sus impulsos porque si formaba un escándalo en medio de la recepción, a Rogelio no le iba a temblar el pulso para que la sacaran a patadas de la mansión.Así que trató de serenarse un poco y tomar las cosas con mucha calma ya que lo más importante era estar cerca de Rogelio a pesar de que ya no podía impedir la boda. Pero sin embargo para ella no era nada imposible el hacer que Rogelio regresara con ella cuando lo decidiera, porque estaba muy segura de que Rogelio aún sentía algo por ella y por esa razón estaba tan molesto todavía por lo que le había hecho.Guillermo estaba alejado de donde se encontraba Roge
Emperatriz temblaba de los nervios, jamás se imaginó que volvería a ver a Guillermo justo el día de su boda, ella pensó que él estaba allí por ella, porque pretendía impedir la ceremonia, pero de pronto miró algo que definitivamente terminó por sorprenderla y confundirla más de lo que ya estaba.Estaba en shock cuando Cándida se acercó a él y lo tomó por el brazo mientras le daba un beso muy cerca de sus labios. Emperatriz no conocía a Cándida, ella no sabía que se trataba de la hermana de Rogelio y además no entendía de dónde Guillermo conocía aquella mujer.Maruja por su parte, estaba con una sonrisa que no cabía en ella, se sentía totalmente triunfante ante aquel espectáculo que estaba presenciando.Hasta en el fondo llegó a pensar:“Pero qué maravilla lo que acaba de hacer Guillermo, agarrarse del brazo con la hermana de Rogelio, eso no estaba en mis planes pero hasta agradezco que el tipejo éste se haya aparecido aquí en la boda, porque de esa forma Emperatriz le tiene que qu