Poco después, Ava y Mateo llegaron al corporativo, la recepcionista los saludó amablemente, subieron hasta la oficina, Camila los recibió con un saludo forzado, ya se encargaría Ava de hacerle saber a esa chica que Mateo le pertenecía.—Regreso en unos minutos, puedes llamar a mi secretaria si necesitas un café o algún aperitivo. —Mateo esperaba que la reunión terminará pronto.—Gracias amor. —Ava tomó una revista para entretenerse en lo que él regresaba.Mateo se apresuró hacia la sala de juntas, los demás ejecutivos ya lo estaban esperando, recibió un llamado de un oficial que trabajaba con Tadeo, estaban haciendo una investigación en la otra compañía por lavado de dinero, él se deslindo de eso ya que la dueña era Daría, tendrían que investigarla a ella que aún seguía en Estados Unidos.Tadeo aún no había podido presentar las pruebas contra Teodoro, se había enterado que estaba protegido por un alto mando de la corporación, así que primero tendría que investigar quién era y desenmas
A Teodoro le agradó esa respuesta, entendió que Grecia dejaba abierta la puerta para que él la conquistara, o al menos así lo había entendido.—Me gustaría poder verte, que me dejes estar cerca de ti. —Decidió ser directo de una buena vez, no sabía si volvería a tener otra oportunidad con ella.—No crees que vas muy rápido, creo que debemos conocernos poco a poco, por ahora estoy enfocada en mi trabajo, no es mucho el tiempo que tengo libre.—No te preocupes, yo sabré esperar.Dijo esto y se acercó a ella, tomándole la barbilla con su mano, ella se apartó de inmediato.—Lo siento, no creí que te molestara..—No es eso, solo me tomó de sorpresa, además mientras tengas pareja, alguien podría malinterpretar las cosas.Ava trató de mostrarse fría el resto de la cena, Teodoro pensó que era un estúpido, no debería comportarse así en la primera cita.—¿Te molestaría si de vez en cuando te llamo o te envío un mensaje?—En absoluto, me dará gusto saber de ti, en cuanto tenga tiempo libre te ll
Después de esto la chica que acompañaba a Ava salió del departamento, Ava se sentó con las piernas abiertas sobre Mateo y lo besó, él estaba ansioso, no poder tocarla en el estado de excitación que estaba, era demasiado para él.Ava se levantó y soltó sus ataduras, él inmediatamente se levantó y la abrazó, ella besó el lóbulo de su oreja, después le habló con una voz sensual.—Buon compleanno amore.Él sonrió, con esa sonrisa torcida y sexy que derretía a cualquiera, dispuesto a disfrutar de su gran sorpresa.Por la mañana despertaron cansados y hambrientos, se quedaron un rato acostados, abrazados disfrutando de la mutua compañía.Mateo tenía un cargo de conciencia muy grande, por un momento había dudado de ella, eso lo hacía sentir muy mal.—Gracias por la sorpresa, quiero pedirte perdón, por un momento dudé de ti.—Ja, ja, ja, hasta yo hubiera dudado, Tadeo me dio el número de la chica, le pidió que me enseñara un poco de lo que ella hace, quería sorprenderte.—Y vaya que lo has
Mateo alcanzó a detener a Ava antes de que subiera a un taxi.—Espera bella, te juro que yo no sabía que era Camila. —Exclamó desesperado.—Lo siento pero no te creo Mateo, salías con ella a todos lados. —Ava no estaba enojada con Mateo, era una profunda decepción lo que estaba sintiendo en ese momento.—En verdad amor no lo sabía, para mí, Camila no es más que mi secretaria, no tengo otro interés en ella, no volvamos a lo mismo, por favor mírame, dime que te has dado cuenta de que soy sincero.La besó apasionadamente, ella respondió al beso, tampoco quería estar lejos de él, Mateo la abrazó fuertemente, no quería perderla, además ahora tenían un hijo, y él quería que creciera junto a sus padres.En los siguientes días Camila trató de localizar a Tadeo, sin obtener resultados, en la oficina le dijeron que había salido de la ciudad, la chica se dio cuenta de que estaba equivocada, el miedo a perderlo la había hecho reaccionar, tenía que encontrarlo y demostrarle que quien le importaba
Tadeo escuchaba lo que sucedía por los pequeños micrófonos ocultos, colocados dentro de los pendientes, llamó de inmediato a Mateo para decirle lo que estaba sucediendo, Mateo a su vez avisó inmediatamente a los hombres que estaban cuidando a Ava, quienes para no levantar sospechas se habían quedado fuera del lugar, cuando ellos entraron encontraron la mesa estaba vacía.—¿Dónde están las personas que estaban en esa mesa? —Preguntaron desesperados al mesero.—Salieron por la parte del canal, se retiraron en una pequeña embarcación—¡Demonios! —Los guardias corrieron hacia el canal.Poco después, Mateo y Tadeo llegaron al lugar, Tadeo pidió apoyo y pronto se encontraban en una lancha rápida, fueron en busca de la embarcación siguiendo la señal que enviaba el localizador colocado en los pendientes, gracias a eso sabían a dónde ir, la corporación envió un helicóptero en su ayuda.Dentro de la embarcación Teodoro acariciaba a Ava, bajó el cierre de su vestido y después lo aventó a un lado
Ava se sonrojó ante la mirada de sorpresa de la nana, era una mujer conservadora y no entendía muy bien las libertades que se daban los chicos de ahora.—Está bien mi niño, pondremos sus cosas en la misma habitación.—Mañana saldremos al amanecer. —Mateo dijo a Ava.—¿Qué haremos? —Preguntó curiosa.—Te digo que es una sorpresa pequeña curiosa — Mateo depositó un beso sobre la punta de su nariz, ella sonrió.—Ok, señor Licciardi, tendré que esperar —la chica hizo una señal de saludo militar con su mano sobre la frente, lo que provocó una gran carcajada de Mateo.Aunque se sintiera bien al lado de Mateo, quisiera estar con su hijo, eso la ponía triste.Después de acomodar su equipaje bajaron a comer en compañía de nana, la tarde transcurrió entre anécdotas sobre la niñez de Mateo, al morir sus abuelos maternos, su madre procuró que él estuviera en contacto con la nana y la villa para que conservara recuerdos de su familiaEstaban tomando té en la sala cuando llegó la sobrina de nana, u
Camila se colocó una peluca negra de cabello muy corto, llegaba un poco arriba del hombro, el cabello liso enmarcaba muy bien sus facciones, se puso un antifaz de encaje negro y se vistió con un pequeño vestido entallado del mismo color.Llegó al club, reconoció a Tadeo enseguida, estaba sentado frente a la barra, se notaba distraído, tomaba apresurado una copa tras otra.La chica se acercó y obligó su voz para que saliera diferente.—Hola guapo, ¿Quieres compañía? —Pregunto de manera sugestiva.—Lárgate. —Contestó el detective sin siquiera voltear a verla.—Anda guapo, te veo desesperado, ¿Qué te pasa? Créame soy muy buena para escuchar. —Insistió, Camila estaba decidida a no darse por vencida, Tadeo lo valía.Eso bastó para que el chico sin voltear a verla comenzará a contar toda su historia, con Ava y después con Afrodita, como es que llegó a pensar que ella podría ser la mujer de su vida, una sonrisa se dibujó en su rostro al hablar de los pequeños niños con adorables pecas que te
Ava comenzó a besarlo, de su boca pasó al cuello y así fue bajando hasta llegar a su parte más sensible, él cerró los ojos, atrapado en un mar de sensaciones mientras ella movía su boca, la chica deslizaba sus labios suavemente, eran movimientos lentos, poco a poco fue aumentando el ritmo hasta que él pudo liberar toda esa presión, Ava se recostó sobre su pecho, el ritmo del corazón de Mateo se fue normalizando.—Problema resuelto —exclamó Ava.—Es usted muy buena para resolver problemas señorita Miller.—Cuando lo necesite señor Licciardi. —Ava guiño un ojo.Mateo dejó escapar una risa ronca, su tono de voz a Ava le parecía muy sexy, no olvidaba que antes de enamorarse de su apariencia, ella se había enamorado de su aroma y de su voz, esa voz que le había provocado tantas sensaciones cuando la escuchó por primera vez.—Sabes que me encanta tu voz, es muy sexy.—Vaya, entonces hablaré todo el tiempo.—Cuando te escuchaba entre la oscuridad siempre trataba de imaginar tu rostro.—Esper