_ Discúlpame si me he excedido Hannah_ dijo Ares suavizando su tono de voz al ver la expresión temerosa de Hanah._ Cómo que; si se había excedido? se preguntó la joven así misma mientras miraba a Ares. Pero lo que más la sorprendía era que hubiese irritado a su marido con ese comentario acerca de su disponibilidad con otros hombres._ Estoy estresado es todo... Además, sé tú no eres ese tipo de mujer. Si no, jamás me habría casado contigo_ añadió Ares, mientras se pasaba una mano por su húmedo cabello._Qué tipo de mujer? Una mujer infiel? ¡Vaya inquietud para un hombre como Ares! Porque él era un rompecorazones, poseía todas las virtudes valoradas por las mujeres: tenía personalidad, buena apariencia, era sexy, rico, poderoso... Cuántas mujeres se arriesgarían a perder al inigualable Ares Prokopis para acostarse con otro hombre?Hanah observó en silencio como Ares subía al dormitorio, mientras se le hacía un nudo en el estómago, deseaba a ese hombre más de lo estaría dispuesta a adm
Y Ares apenas la había tocado, excepto con los ojos. A Hanah casi le dio miedo pensar lo que ocurriría cuando la tocará con las manos. Cuando no solo tocará su cuerpo, cuando también tocará su alma, y su corazón.Despacio, y aún mirándola, Ares se quitó la toalla que le rodeaba el cuello y la dejó caer al suelo.Entonces, irresistiblemente, le puso las manos en los hombros y la estrechó contra su cuerpo, apretándole los senos a su pecho fuerte y cálido. Bajó la cabeza y, con la boca, saboreó la de ella... y empezó a devorarla con una brusquedad que la dejó jadeante, y deseosa.Después de lo que le pareció a Hanah una eternidad de besos suaves, apasionados, posesivos, y bruscos... los labios de Ares la abandonaron._ Tumbate_ dijo él con voz ronca.Aún rodeada por los brazos de Ares, Hanah se puso de rodillas sobre el colchón, y se dirigió a gatas hacia el centro de la enorme cama.Oyó la respiración de Arest antes de que las manos de él le agarraran de las caderas con firmeza, sujetán
Permanecieron tumbados el uno en brazos del otro._Eres como un gato _murmuró Ares sonriendo._Si? Por qué?_ le pregunto Hanah confundida._Estás ronroneando como uno_ se burló él.De repente, Hanah se dio cuenta de que realmente si lo hacía, y se echó a reír._Siempre ronroneas en momentos así?_ continuó Ares sin poder evitar una punzada de celos. Al imaginarla por un momento en brazos de otro hombre, disfrutando de su cuerpo y todo el placer que conlleva estar a su lado._No habia tenido momentos así, antes de tí; por lo tanto, no lo sé _respondió la joven._Que. nunca... qué quieres decir? Hemos estado así antes, o quieres que te lo recuerde_ dijo él sarcástico._ Pero por alguna razón siento que; está vez todo ha sido diferente, te sentí más cerca de mí_ dijo ella obligándose a callar, no quería decir cosas que lo hicieran darse ideas que lo alejaran se ella.Ares se quedó conmovido. La besó con un súbito estallido de deseo, la hizo tumbarse boca arriba y se adentró en ella una v
Hanah estaba en la cocina preparando su cena. Aunque en la mansión había sirvientes que la atendiera prefería hacerse la comida ella misma, el refrigerador estaba lleno, y la despensa estaba muy bien equipada así que podía comer lo que quisiera, aunque ahora mismo no tenía mucho hambre, pero al menos eso le daba un poco de entretenimiento a su mente, y dejaba de vagar por el dueño de los hermosos ojos verdes que la tenían completamente hechizada._ Se puede?_ se escuchó una dulce voz que provenía de la puerta. Cuando Hanah se giró se encontró con la cara de una hermosa mujer de cabello negro y ojos verdes un poco más oscuros que los de Ares, se trataba de la señora Emilia Prokopis, la joven se puso nerviosa. Desde que estaba viviendo en la mansión era la primera vez que veía a la madre de Ares, ya que evitaba por todos los medios de encontrarse con ellos._ Si, claro por supuesto puesto, está en su casa_ dijo la joven cordialmente._ También es tu casa ahora Hanah, ya que eres la espo
_ Solo tienes que firmar Ares_ le dijo Hanah a Ares el último día del año mientras desayunaban ambos sentados en la mesa de su acogedor apartamento._ No... te daré el divorcio Hanah, ni ahora ni nunca, ya te lo había dicho, te dejaré libre cuando a mí se me de la gana. Ahora déjame desayunar tranquilo_ dijo él calmadamente y sin dirigirle la mirada directamente._ Entonces conseguiré que lo anulen_ dijo ella furiosa, levantándose abruptamente._ No empieces con tus juegos Hanah_ dijo Ares evitando mirarla directamente._ Estoy hablando en serio Ares. Si no me firmas el divorcio haré que lo anulen_ le gritó ella._ Tengo interés en saber como haras eso_ dijo él aún en calma_ Creo recordar que nuestro matrimonio ha sido consumado_ respondió Ares mirándola con un brillo malicioso en la mirada._ Diré que tuve un amante y que te he engañado_ le dijo Hanah negándose a dejarse intimidar por él.Ares saltó de su silla y la agarró del brazo bruscamente._ Acaso es eso cierto Hanah_ le dijo é
_ Solo tienes que firmar Ares_ le dijo Hanah a Ares el último día del año mientras desayunaban ambos sentados en la mesa de su acogedor apartamento._ No... te daré el divorcio Hanah, ni ahora ni nunca, ya te lo había dicho, te dejaré libre cuando a mí se me de la gana. Ahora déjame desayunar tranquilo_ dijo él calmadamente y sin dirigirle la mirada directamente._ Entonces conseguiré que lo anulen_ dijo ella furiosa, levantándose abruptamente._ No empieces con tus juegos Hanah_ dijo Ares evitando mirarla directamente._ Estoy hablando en serio Ares. Si no me firmas el divorcio haré que lo anulen_ le gritó ella._ Tengo interés en saber como haras eso_ dijo él aún en calma_ Creo recordar que nuestro matrimonio ha sido consumado_ respondió Ares mirándola con un brillo malicioso en la mirada._ Diré que tuve un amante y que te he engañado_ le dijo Hanah negándose a dejarse intimidar por él.Ares saltó de su silla y la agarró del brazo bruscamente._ Acaso es eso cierto Hanah_ le dijo é
Hanah abrió la tienda de libros, aquella fría mañana invernal, agradeciendo la paz que se respiraba adentro aquel día tan agitado, al parecer la señora Rose debido a la tormenta se había retrasado, lo cual a ella no le importó en lo absoluto, eso le daría un tiempo más en su lugar favorito de la ciudad, su refugió temporal.Al parecer los Prokopis habían decidido que ese año celebrarían la llegada del año nuevo con los trabajadores de su viñedo. Así que nuevamente abrirían las puertas de la mansión para que asistieran los empleados con sus respectivas familias, sería una gran celebración, rodeada de la magia de la época navideña tan característica de la pequeña localidad de Snowfiel, mientras afuera de la tienda, en las calles reinaba la algarabía características de esa fecha, las personas haciendo compras de último minuto emocionadas y ansiosas. Desde adentro de la tienda la joven podía ver las calles transitadas, los olores dulces mezclándose en el ambiente, las mezclas de panes y r
Hanna entró a la habitación pasadas las seis de la tarde, se había retrasado un poco en la tienda porque había prometido a la señora Rose hacer el inventario para que ella no tuviera que hacerlo y pudiera descansar hasta que le encontrara un reemplazo. Sé relajo un poco al ver el apartamento vacío, suponía que ya Ares estaría en el salón principal como buen anfitrión. Así que eso le daría algo de paz._ Pareces cansada_ le dijo Ares entrando en la habitación con pasos tan sigilosos que no lo había escuchado acercarse detrás de ella._ Pensé que ya estarías en la fiesta?_ preguntó la joven asorada._ Sin mi esposa? Eso sería un poco mal educado, quiero llegar con mi adorable esposa del brazo_ dijo él apacible._ A veces no sé cuando hablas en serio o cuando te estás burlando de mi? _ dijo ella irritada._ Vaya! Tú estado de ánimo va evolucionando, con el transcurrir del tiempo_ dijo él en tono burlón._ Ay Ares! _ dijo ella acercándose a la ventana, observando a Gianlucas quien se enco