—Es una buena idea, de acuerdo. —Todos aceptaron unánimemente. Berwin tomó un puñal y lo alzó en alto. —Vieja, gracias por abrirme la puerta a tu hogar y permitirme desaparecer en un rincón de tu casa. Hay momentos que necesitamos desconectar y ese tiempo me otorgaste. Agradezco ese espacio y también tus sermones. —Berwin soltó su montón de ceniza por el suelo e Imogen suspiro al darse cuenta de que una pierna desapareció por completo de su cuerpo. —Una vez que vayan soltando las cenizas, te irás desapareciendo para siempre —apareció Melinoe con sus dos perros y antorchas en cada mano—. Luke, cuando Imogen desaparezca por completo, te despides y te llevaré a tu siguiente parada. —No tengo problema, diosa. —Luke se inclinó nervioso. —Melinoe, no tenía el conocimiento que nos otorgarías tu presencia. —La molesté y ella sonrió de lado macabramente. —Era mi obligación venir a ver a la semidiosa que ha dejado mal parada a la diosa de la tierra —caminó hacia mi lado—. Además, cualquie
BranEstamos al otro lado de la casa de la hermana de Elin, sentados en mi motora roja y el agarre de Elin es fuerte en mi cintura. El miedo a enfrentarse a su familia es enorme, no obstante, le insistí en dar la cara. Ella debe despedirse de frente, al menos con su hermana. Hemos venido en horario de clases, porque mi chica se negaba por los niños. Obviamente, antes de venir con mi chica, investigué con Berwin, la vida de su hermana. Su esposo la abandonó como quiera. Eran excusas de que su hermana no lo atendía. Lo planeó para irse con su amante. No pude evitar hacerle una visita con los chicos. Le dimos un susto al aparecernos en el motel donde había terminado de follar. Aparecimos y pude darle un par de ganchos. Ese hombre me lo debía por hacer sufrir a Elin, con sus mentiras para follar. Luego Craig le comió el cerebro, lo hizo creer que unos hombres lo asaltaron y por eso lo golpeó. Volviendo a mi rayo de luz, se ve hermosa como sea, pero se maquilló excesivamente para ocultar s
—¡Oh, sí! Sigue… —me separé de ella para admirar su sensualidad y me encendí con tan solo ver su calentura—. ¡Joder, muérdeme, Berwin! —Rogó mi chica y la mordí en su cuello. Sé, tensó y saqué el vibrador. Lo suelto en la cama y me marché hacia el baño. —¡Berwin Dee, vuelve o te golpearé el trasero sexy! —odio irme, me cuesta no poseerla—. Lo pondré rojizo. La ignoré, abrí la ducha y puse el agua fría. Mi polla me dolía y me recosté en los azulejos permitiendo que el agua fluyera por mi cuerpo. Mi chica arcoíris se apareció, siendo un ciclón y me golpeó el pecho. Caímos debajo del chorro ambos. Su panza le dificulta la cercanía y sonreí en su cara. —¡Fóllame! —Alinor exigió y negué sonriendo mientras echaba el cabello para atrás. El agua me masajea el cuero cabelludo—. Te estás zafando. —Te gusta el vibrador, búscalo. ¡Ay, no olvides recargarlo! —le doy la espalda y su mano sostuvo mi polla—. Incluso, si no querés llamar por celular, con tan solo introducirte en mi mente y mostra
—Aprovecha que el pelón es soltero —susurré y Selig tosió marchándose. —Mi chica haciendo de casamentera —mi lobo me abrazó por detrás y acarició la panza—. ¡Huele bien! —aspiró mi cuello y le di una mordida a mi hamburguesa—. Dame una probada. Capté el morbo, pero quise hacerme la lerda y arqueé mi cuello. Sé que lo estoy tentando y eso me prende. Mi licántropo vampiro es increíble, él puede tolerar estar sin sangre por mucho tiempo. No se desestabiliza al oler sangre. Berwin es adicto a mi sangre. Su mordida me hizo mojarme y se me escapó un gemido. Por inercia cerré los ojos y tranqué mis piernas. —¡Váyanse lejos, no nos enciendan! —reclamó Elin y su vampiro arrogante la besó acallando. —Lo siento, fue culpa de mi lobo que me enloquece. Me portaré bien —respiré profundo y seguí comiendo ansiosa por ver su polla dura—. Siéntate a mi lado. —Dame un momento —su voz en aprieto y puedo imaginar lo dura que se ha puesto. —No soy la única adicta —me burlé traviesa. Craig, lo veo con
Han pasado cinco maravillosos años, sí, han sido cuesta arriba como todo en la vida. Sin embargo, tener una familia espectacular logra que todo sea llevadero. Nos encontramos probando la pieza que Calais consiguió, para el Ford cortina azul cielo de los años sesenta, donde vivía Bellicienta. Le costó al tío conseguirla al ser una reliquia. Es una sorpresa que le daremos.—¿Calais, estás seguro de que encenderá esta vez? —Mi cabello lo tengo en una coleta, a mi chica arcoíris le gusta mi larga melena hasta los hombros.—Es una reliquia, cuando nuestra chica vea esta belleza se queda patidifusa —Calais está con sus músculos al descubierto debajo del carro—. ¡Kenzie, por favor, pásame la tuerca! —sacó la mano y mi adorada hija la puso en su palma grasosa.—¡Tío, qué asco, sucia tus manos! —Para tener cinco años es muy brillante y va adelantada en todo.Es una copia de ambos, su cabello blanquecino le llega hasta la mandíbula porque ella misma se lo corta con las tijeras (odia verlo más l
Al llegar al castillo, me encuentro con los chicos y sus parejas. Takeo tiene embarazada a Caron y viven enamoradísimos. Craig lo consiguió con la chica licántropa y tienen un bebe de un año. Mi amiga Keyna y Meir se niegan a tener hijos porque viajan mucho. Hoy llegaban de un viaje, no me pregunten a qué país, he perdido la cuenta. —¡Alinor, amiga! —corrió a mis brazos Keyna y se inclinó a darle un enorme beso a su ahijado—. Mi adorado niño, te traje unos regalos que amarás. Corwin se encaramó en su cuello y no paraba de sonreír. Él adora a sus padrinos y se fueron en busca de Meir. No veo a Berwin por ningún lado. Mucho menos su cola Kenzie, esa niña es locura con su padre. Además, que es muy centrada y viejita en un cuerpo de niña. Corwin va a su ritmo, juega con los niños y no le importa nada del poder. Realmente solo le hace caso a los animales y el contacto con el agua. Sin embargo, él alberga mucho poder dentro para sus cuatro años y todos lo sienten. Si mi hijo no quiere sab
—¡Hija, el tatuaje es precioso! —mamá lo observa por cuarta vez y nos encontramos en el baño esperando que Corwin juegue un rato con la espuma—. Disfruta esta noche, baila y canta en el karaoke. —Mamá, ¿me cuentas la historia de la bestia Galusan y sus aventuras? —Un poquito porque tengo que vestirme. —De acuerdo —sonrió con su cabello mojado. —La bestia Galusan era tan fuerte que todos le temían. Ella salió asustada y aterrada de la jaula que se escapó. En la plaza se formó el caos al ver una bestia y los gritos de la gente huyendo, la desesperaba. No quería lastimar a nadie. Sin embargo, no conocía otra forma de sobrevivir. Si no se defendía era su vida la que corría peligro. Hasta que una persona le dio su mano y la ayudó. Se dio cuenta de que si contaba con tan solo una persona que lo viera, él podría ser mejor persona. Se hicieron amigos y una noche en peligro no dudó en sacrificar su vida por esa persona. —Mis ojos se humedecieron. —¡La bestia Galusan, es súper! Me hubiera g
Gravitaba por las afueras del cementerio de Cathays Cardiff, Gales, aburrida. No recordaba cómo morí. Ni siquiera mi nombre, intenté agarrar una roca y la traspasé. La luna llena me llama la atención, mis ojos fijos en esa enorme bola brillante y de pronto escucho un lobo aullar. Nunca había escuchado uno tan cerca (bueno en mi vida de fantasma) por este cementerio. Mi inexistente cuerpo gravita hacia el aullido y de pronto siento una niebla que me cubre. Nunca en todas las noches que he venido, había sentido algo de esa manera y de pronto siento la fría tierra en mis pies. «¿Qué rayos sucede?» Me agacho, estoy consciente de mi cuerpo, ya no es incorpóreo. Estoy fascinada y agarro un puñado de arena. Cierro los ojos, sintiendo todo y oliendo la húmedad. A varios pasos escucho el aullido y por instinto abro mis ojos. El lobo enorme de pelaje gris y el hocico blanco se acercó vigilando. Sus ojos oscuros y poderosos fijos en mi cuerpo, pero se detuvo como todo un depredador a mitad del c