Nos encontramos en el cuarto de Berwin, con el hombre sospechoso de la risa espeluznante. Nos cercioramos de que Reuben está durmiendo y los chicos registraron la habitación de arriba abajo. Supuestamente tenemos un espía según ellos. No les he dicho del libro que encontré, pues no he tenido tiempo y aún no sé qué hacer con este secreto. —¿Cómo te llamas? —Selig fue directo hacia el hombre en el medio de la habitación. Mi mamá gravitaba alrededor de todos y estaba sentada en la cama junto a Berwin. —Saith, era guardián de la línea. —Su voz es gloriosa con razón. Todos lo miramos asombrados. Puedo imaginar la pregunta que ronda en la cabeza pelona de Selig: ¿Por qué es un fantasma sin alas? —No me miren de esa manera, no estoy tan mal. Sus rostros me juzgan como si hubiera caído muy bajo. —Nos mira a todos supuestamente ofendido. —Karamat consiguió culparte cuando el que sacó los libros y se los robó fue Jason —dije lo que había asumido. —Algo parecido. —Las palabras cortas y pr
He aprovechado leyendo unas páginas de licántropo en el libro más deseado por todos y voy tomando anotaciones. No permitiré que me quiten a mi compañera de vida, haré lo que esté a mi alcance, más lo imposible por ella. Sigo buscando por las páginas, porque esto es lo que ya sabemos y cuando pensaba entregar el libro, al final en letra cursiva hay una pequeña nota. La memorizo y guardaré por si tengo que usarla en algún momento. Al levantar la vista me encuentro con los ojos grisáceos de Zetes, mi suegro. Puedo darme cuenta que su idea era que lo viera a solas, le entregué el libro y él asintió. —¿Encontraste algo fuera de lo normal Berwin? —Curiosea Belli. Ella se encuentra brincando en las nubes con esa chaqueta llamativa de gamuza en rojo, que se me había olvidado comentarle lo bien que resaltaba con su piel. Una mirada a Zetes me hace entender que dejemos ese pequeño dato al azar. —Nada de otro mundo, no has dormido nada y tienes tantas energías. —Me recuesto en la cómoda nube.
—Por mi parte no tengo nada que contarle nuevo, bueno que la amo y adoro —susurro y Zetes me dio una mirada altanera. —Déjalo papá, es un lindo lobito y todo mío —comentó Belli y me tiró una guiñada. —Pónganse serios. —Nos apresuró Zetes. Belli sacó una bola de papel y la desenrolló. —Toma Berwin, lo había olvidado. —Me pasó el papel arrugado. —La próxima vez, no lo hagas bola. —Le doy una mirada y solo espera que lo lea. —En ese momento fue buena idea —dijo levantando sus hombros Belli. La tarjeta verde, es de un detective llamado Argel Baker y no me cuenta nada. —¿Por qué un Dios y una semidiosa querrían los servicios de un detective? —Ponte serio —murmuró Belli y me golpeó la cabeza. Me alejé de su lado y volví mire la tarjeta, nada. —Es que si no te explicas —respondí en mi defensa. —Esa tarjeta estaba en la camioneta de tu madre, cuando íbamos al hospital a verte. —¿Le preguntaste a ella? —interrogo para ver si logro llegar a su punto y negó. —Tuve una visión, tu pap
Estoy en la casa de mis padres y mi papá no está feliz de verme con vida. Mi madre se tuvo que salir de la habitación, no pudo soportar la actitud de papá. Está acostado en la cama despotricando de su hijo. Después que terminé de bañarme vine a visitar a mi padre, porque tenía dudas sobre él y además quería saber como estaba.—Te desapareces y hubo una masacre. Usaron el mismo patrón que cuando los padres de Craig y tú solo perdido. —Es lo único que recibí de papá.En ningún momento me preguntó: ¿Cómo estás hijo? ¿Qué ocurrió? Eso me dolió un poco, siempre espero su amor por más que sé que no será posible. Belli tiene menos tiempo con su padre y se tratan mucho mejor. Pareciera que tienen una relación de toda la vida. No entiendo, ¿cuándo mi padre se olvidó de su familia? —Papá, no te reconozco —le comenté y salí de la habitación. No espero respuesta, he aprendido a saber cuándo marcharse. Al salir fuera de la asfixiante casa, en el patio del castillo las personas se ven asustadas y
La emoción de haberme convertido en loba, se desvaneció y estoy exhausta. Necesito sentir mi cuerpo humano, me convertí y olvidé que estaba completamente desnuda. Todos están envueltos sellando almas y solo quedan pocos espíritus. —¡Zetes, buscaré ropa! —grité y no recibí respuesta alguna.Voy caminando con la mano puesta en mi pecho y de pronto escucho un ruido extraño. Es como si estuvieran peleando y entro a la cabaña. Paso la sala, en el cuarto más próximo proviene la discusión y veo al líder Madog lanzando cosas. El de pelo largo y ojos grises al verme se ve asustado. No pensaron en ayudarnos y se están preparando para huir. Lo puedo entender, lo han mantenido como títere y las cosas que debió soportar y ver. Reuben aún no habla, aunque literalmente lleva un día sin el espíritu. Recuerdo que estoy sin ropa y hay una chaqueta en una silla, la agarro enseguida.—Oye chico se que están asustados, pero no creo que escapando en este momento funcione. Eres el alfa y puedes recomponer
Estaciono mal la camioneta y solo hay una furgoneta blanca al otro extremo. El aroma de mi madre me indica que está cerca. No importa si es una trampa, no puedo abandonarla. Al adentrarse más al bosque el olor es más intenso, al igual que la sangre. Han pegado en un árbol una foto y la despego. Es la chica en el suelo, Kara y muerta de un disparo. Su muerte fue espantosa, pero mi familia no tiene la culpa. Si hubiera sabido lo que hizo papá, no lo protegería y me aseguraría que obtuviera un castigo. Recostada en un árbol hay una chica rubia, con los ojos rojos y parece que está esperándome. —¿Dónde está tu novia fantasma? —Camina sensual hacia mi encuentro, sin lugar a dudas sé que es Kara, —Kara, no sabía lo que te ocurrió. Mi madre no tiene culpa.—Tampoco tuve la culpa, ni mi padre —alzó su voz y me siento desesperado por ver a mi madre—. Una licántropa no puede correr por el bosque tranquila por monstruos como tu papá. —Se golpea la cabeza perdida en sus recuerdos.Se oye a la d
Ha pasado una semana desde que mi progenitor desapareció con Neal y que Zetes mató a Arial. Cualquiera pensaría que todo se calmaría y no habría peligro. Sin embargo, los espíritus nos han invadido dos veces en el castillo, cada vez intentan llegar a Alinor. Su cabeza parece que cuesta mucho y todos quieren el premio gordo. Con la ayuda del cuarteto, sí Reuben ha vuelto de a poco, no habla de lo que le sucedió, pero ha luchado con los ataques. No se paraliza cuando ve los fantasmas y se ve más fuerte. Hemos mantenido la manada en el área oeste, mi madre estuvo de acuerdo y no queremos estar divididos. Todo estos sucesos nos han unido como familia, nos pasamos entrenando y cuando nos atacan tenemos una formación sincronizada. No me crean, no sé si nos vemos bien. Pero estoy seguro que somos una gran manada, que se preocupa por el otro y nos damos la mano en las buenas y las malas. Los dioses siguen buscando los libros y en desaparecer a Alinor. Eso no será posible, todos incluyendo a l
La corte de los dioses sopesaba las opciones de conseguir los libros, Karamat les comía el cerebro mencionando que Alinor Watts, era una amenaza para el mundo. Según su argumento ella podría acabar con miles de vidas. En una pantalla de nube mostraron a la semidiosa convertida en lobo y eso los tenía preocupados. Esa chica sobrevivía a todas las especies y aumentaba su poder, era lo que rondaba en sus pensamientos. Cuanto antes debían borrarla del mapa, no permitirían que nadie fuera más poderoso que ellos.—Karamat, encárgate de desaparecer a la semidiosa —una de las grandes en la corte con su cabello corto oscuro y sus grandes alas doradas ordena—. No vuelvas sin buenas noticias —azotó el mazo y cerró la junta.Estoy en el cuarto nuevo que nos apropiamos en el ala oeste del castillo, acostada y con los pies en el respaldar de la cama. Berwin y el cuarteto fueron a conseguir una habitación para el pobre detective. Mi mamá está toda rara desde que apareció papá y se da unas pérdidas.