*Relata Andrea

Comenzamos a tener una vida normal, cómo una familia.

Mi día empezaba bañándome y arreglando mi ropa, Luci hacía almuerzo, mientras yo cambiaba a mi bello hijo, poniéndolo guapo para la guardería.

Lucifer llevaba a la guardería a Cai, mientras yo me dirigía al colegio.

Trabajaba día y noche para alcanzar mis metas, quizás era ambiciosa y codiciosa, por no conformarme a algo sencillo, quería más, y cada vez más.

No gane el concurso, pero me ofrecieron un contrato como costurera, y lo tome, ya que eso me ayudaría a ir implementando mis conocimientos en costura de ropa de alta costura.

Camine vagando por la ciudad comprándole ropa a mi bebe.

Encontré un local en renta en la zona céntrica de la ciudad, era pequeño, pero la ubicación era buena.

Platicando con Lucí de mi idea, de un taller, al día siguiente me sorprendió con un contrato en mano, solo tenía que firmarlo.

— Cariño, pero el dinero...

— Tómalo como un regalo, por favor.

Prometo que de aquí en adelante no mete