Capítulo 26 ¡Te esperaré a que estés lista! —Yo entiendo que él que no tiene nada que hacer aquí es él, así que debe irse. —volvió a decir Sebastián —Estás muy equivocado, todo lo que se refiera a Britania me interesa—le aclaro Alexander sin dar marcha atrás — ¡Mamá, Sebastián, escuchen! Me gustaría hablar con Alexander en privado, por favor—les rogó tanto con la palabra como con su mirada y Victoria se llevó a Sebastián de allí. Este estaba renuente a marcharse. pero vio la mirada de súplica de Britania y se fue lentamente con la mirada fija en Alexander, a quien consideraba un intruso Al marcharse tanto Victoria como Sebastián, Britania con las mejillas sonrojadas lo miro a los ojos viendo la necesidad de aclararle—Alexander, debo aclararte algo, actualmente en mi vida hay tantos desafíos que me estoy volviendo loca. El más grande desafío y mi prioridad número uno es llevar adelante este embarazo y llegar al momento de su nacimiento y verlo con mis propios ojos, tenerlo en mis br
Capítulo 27 ¡No estás sola, estoy contigo para todo! Alexander observó a la descarada chica arcoíris que lo abrazaba sin medir las consecuencias—frunció el ceño y estudió su rostro ovalado—quizás detrás de sus cabellos de colores y prendas de vestir anchas y de múltiples colores, sí de alguna manera era una mujer atractiva, pero no se notaba. Aparentemente, no era una verdadera belleza, solo era una mujer de facciones agradables, aunque no más bella que Britania, además esta última no era tan descarada como esta chica. Se sacudió de su agarre con violencia, aun así la chica arcoíris no se sintió avergonzada. De ella inmediata se le quedó observando, tenía unos ojos particularmente cálidos, una boca perfecta, no es que quisiera notarlo, es que así era. Hizo una mueca al mirarla. Su cabello era un asco, tenía una melena larga pero pintarrajeada. —Vidal, dime como te hiciste esas cicatrices —le pregunto ella con curiosidad —Me llamo Alexander Ruso y tú me puedes llamar Señor Ruso— la
Capítulo 28 ¿No te quieres casar conmigo?Britania emitió un suspiro corto, pero no menos profundo. Lo observo detenidamente, Sebastián era guapo, extremadamente guapo, atrayente, y la miraba con esos ojos llenos de aparente sinceridad. — Claro, te lo dije cuando nos vimos aquí, voy a aceptar toda la ayuda posible, porque en este momento priorizaré por mi hijo y realmente he entendido que no tengo nada más que amor para brindarle. Ya escuchaste, no tengo un hogar, poco dinero— comenzó a enumerar con los dedos— la gran riqueza que tengo es mis ganas de luchar por él, y si tengo que aceptar ayuda lo haré, mi hijo es mi prioridad, uno— le dijo sencillamenteSebastián asintió. La entendía. Sus ojos tristes se lo decían todo. No le gustaba verla así, desde que la volvió ver parece que era su estado frecuente.— Escucha— siguió diciendo ella— tú puedes continuar con tu vida si quieres, yo no soy una víctima, parte del madurar es reconocerlo, solo soy una mujer que está viviendo una situac
Capítulo 29 ¡No les permitiría ser felices jamás!Britania observó a la mujer que había entrado, esta la miraba con un gran odio en su expresión. Recordó todo lo que había dicho Sebastián, lo cual se contradecía con todo lo que ella le dijo.— ¿Qué haces aquí de vuelta? ¿Por qué no te quedaste dónde estabas? Incluso podías haber muerto fácilmente en alguna alcantarilla tú y tu hijo.—le dijo con todo el desprecio que podía—Señorita Salvat, ¡No entiendo! ¿Qué le hice?—¡Te atreves a hacerte la estúpida! ¡Ya Sebastián te debe haber dicho que rompió nuestro compromiso por culpa de tu embarazo!—También me dijo que fue un compromiso por conveniencia—agrego Britania defendiéndose— ¿Eso es lo que te dijo? ¿Y le creíste? ¡Qué tonta eres! Fue un compromiso por toda la norma. Tenemos el mismo status social, los mismos intereses. Lo único que lo une a ti es ese embarazo, lo cual reconozco fue una medida inteligente. El modo ideal de quedarte en su vida.—No obstante, según me dijo, usted tamb
Capítulo 30 ¡Visitaré a Britania cuando lo desee!—¡Lo lamento, hija, no quise perturbarte, es que no me explico como esta mujer logro entrar aquí! Tantos guardaespaldas que tienen Sebastián, y mira que escapársele esa mujer!—Porque no voy a hacerlo, acaso su hija es tan especial, es una princesa como para no poder entrar a esta habitación en el momento que me dé la gana—¡No la soporto más!— inmediatamente después de pronunciar estas palabras Victoria la tomo del brazo, al llegar a la puerta chocaron con Lucy que venía entrando, y ella dándose una idea de la situación y sin preguntar nada, tomo el otro brazo de Julieta y ayudó a sacarla, lanzándola hacia afuera con una advertencia de Victoria— La próxima vez que te vea dentro de la habitación de mi hija te golpearé hasta que me canse—la amenazo hastiada—Te arrepentirás de esto vieja bruja— comenzó a vociferar Julieta,—¡No vuelvas a entrar porque no respondo! —le advirtió Lucy tirándole la puerta encimaJulieta una vez afuera no de
Capítulo 31¿Podrías ser paciente? El traslado al apartamento de Sebastián se llevó a cabo, en compañía de Victoria y Lucy. Ambas no se quisieron separar de Britania. Sebastián estaba de mal humor, nada había resultado como lo pensó, sospechaba que sería difícil separarse de estas mujeres y que Britania descansara como era debido o comenzar una vida juntos con esas mujeres alrededor. Su mayordomo los recibió, a grandes rasgos les mostró el apartamento, este era según el pensamiento de las tres mujeres, una gran representación del lujo, el confort y la elegancia, no obstante la falta absoluta de colores llamativos, vibrantes, predominando el negro y el blanco, casi asfixió a Lucy, esos colores denotaban una falta horrible de alegría. El mayordomo, después de mostrarle, las diferentes estancias, incluyendo una bella terraza donde afortunadamente predominaban las flores rojas y blancas en macetas, los condujo a la habitación que habían preparado para ella, — ¡Hay bastante espacio! ¿Pu
Capítulo 32 ¡No te excuses!El tenue resplandor de la luz solar pasaba a través de un gran ventanal, iluminando el despacho de Sebastián, desde allí también se contemplaba parte de la ciudad.El apartamento se encontraba en el Penthouse, en el piso superior, y este era un piso con un diseño de lujo muy exclusivo.Todo el lugar se observaba muy ordenado y pulcro. Un escritorio magnífico de madera tallada dominaba la vista ubicado en el centro del espacio. Detrás del sillón donde estuvo sentado Sebastián anteriormente y había estado hablando por teléfono, había un sistema de reproducción para amplificar la música contenida en discos de vinilo.Allí, cerca de una pared al lado el ventanal, también se encontraba un reloj antiguo de esos de péndulo que obviamente estaba en buen estado, porque ese péndulo se movía hacia los lados, con un efecto casi hipnótico.Muchas cosas presentes en el despacho hablaban de un hombre conservador al que le gustaban las antigüedades y disfrutaba de ellas o
Capítulo 33 ¡Odio a ese sabelotodo!Britania se puso nerviosa. La expresión del hombre era cálida, su tono de voz sonaba muy cordial, y sus gestos muy amistosos, quizás no tenía que tener miedo, pero acababa de tener una discusión con Sebastián y todavía se sentía algo acalorada y nerviosa, además tenía mucha hambre.—Sí, yo soy Britania… y usted es…— ¡Ricardo Wash! Amigo de Sebastián y ahora tuyo por supuesto!, él la miró complacido y estiro su mano para saludar—Yo… mucho gusto—Britania sintió que su pequeña mano era tragada por la mano de este hombre, le estrecho la mano con amabilidad, la situación fue incómoda, acababa de conocer a un amigo de Sebastián después de tener una diferencia de ideas con él.Ricardo la miró con simpatía, sus ojos brillando con una calidez sorprendente. —Sebastián me ha hablado mucho de ti, — dijo con voz suave. —Mi esposa y yo acabamos de tener gemelos y pensamos que quizás te gustaría hablar con ella. No pudo venir porque los bebés todavía son muy peq