Capítulo 155. Otra vez en peligroNarra Alondra Ferreyra PérezSemanas después de esa noche del cumpleaños de Nacho, un día que llegué del taller a casa de Carmen, la noté a ella muy triste sentada en la sala y con todas las luces apagadas. No sabía qué le pasaba, pero mi cuerpo se tensó de inmediato pensando que algo muy malo le pudo haber pasado a mi güero y rogaba porque eso no fuera así.–Hola, Carmen, ¿Por qué estás con todo apagado? – Pregunté – Me preocupa que sea así.Me entró un miedo terrible, Carmen no es de las que están a oscuras, algo malo le tuvo que haber sucedido a David, tenía tanto miedo hasta de preguntarle a Carmen que era lo que le pasaba.–Hola, hija. Ven acércate – Me pidió Carmen – Siéntate aquí conmigo, hay algo de lo que quiero hablarte.La sangre se me fue completamente de la cara, sentí como mi cuerpo se desinflaba, de la forma en la que Carmen me estaba hablando me hacía temblar las piernas, como si fuera un presagio, de que algo malo iba a pasar o ya est
Capítulo 156. Cambiando de airesNarra Alondra Ferreyra PérezDavid no podía ser molestado por mí y menos en la situación en la que se encuentra eso sería demasiado irresponsable y tonto de mi parte, no le iba a contar como me sentía yo estando él tan mal.Le mandé un libro con Carmen, uno de mis libros favoritos para que en su encierro tuviera algo que leer y ella se lo llevó consigo para dárselo como un regalo de mi parte con todo mi corazón. Mi Batman y yo, la llevamos a Ciudad de México y al aeropuerto y de ahí nos fuimos a casa de sus padres ese fin de semana, en la que tenían algo organizado.–Alondra, mi amor quita esa cara que tienes – Mi Batman me abrazó – Mejor ponte feliz, mañana es el cumpleaños de mamá y no tienes idea en donde lo quiere celebrar tu suegra.No me podía imaginar que era lo que iba a hacer su madre para celebrar su cumpleaños, no sé cuáles son los gustos de la señora. A decir verdad, nunca le he preguntado a mi Batman que le gusta a su mamá.–No lo sé, mi B
Capítulo 157. Pasos en firme, parte 1Narra David De María RamírezGracias a la ayuda de mis amigos de Paloma y de Sabadelle, yo me sentía muy animado de ir a internarme a un centro de rehabilitación. Era lo mejor, yo tenía que hacer muchas cosas por mi bienestar y esto sin duda iba a ser el primer paso y el más importante que tenía que dar. Mi madre llegó un día antes de mi primera consulta y entrevista en el centro de rehabilitación y me fui a quedar con ella al piso de escapadas.–Madre, qué bueno que estás aquí para acompañarme a ir a mi entrevista mañana – Le dije muy feliz – Gracias, por estar siempre conmigo cuando yo más te necesito.La mejor madre de todo el mundo, ella es la que siempre va a estar a mi lado, en las buenas y en las malas, nunca me va a dejar solo, no importa como me comporte, ella me sabe aconsejar. Me daba tanto gusto tenerla aquí, es mi fortaleza.–Siempre estaré acompañándote en todo lo que tú necesites. Te amo hijo y me siento orgullosa de ti, por esta de
Capítulo 158. Pasos en firme, parte 2Narra David De María RamírezLa doctora se representó y yo di un paso al frente, para que me reconociera y viera que era yo el paciente.–Buenos días, claro que sí doctora.Me fui caminando con la doctora por el estrecho pasillo por el que ella me condujo, mi madre se quedó con Paloma y con mi colega y estaba seguro de que se quedarían esperándome en la cafetería como ya lo habían dicho. La doctora abrió un consultorio y a diferencia de lo que yo pensaba, el lugar no era oscuro. Era hermoso y estaba muy bien iluminado.–David, primero que otra cosa, bienvenido a este lugar donde vas a comenzar una nueva vida, quiero que me cuentes los motivos que tienes para estar aquí.Tengo muchas razones para estar aquí, la primordial la adicción de la cual he sido víctima por mí mismo, de mi propia mano, llevándome casi a la muerte, como si me estuviera suicidando cada vez que tomo de las cápsulas.–Gracias, doctora. Vine aquí por lo obvio, porque soy un adict
Capítulo 159. Toboganes de la muerteNarra Alondra Ferreyra PérezMi Batman, Simone y Nacho, se andaban dando vuelo en las albercas ahí en el rollo. Yo no sabía ni nadar y me daba demasiado temor el meterme ahí, se veía que estaba demasiado hondo y nada más de ver como Simone casi termina hundida en la alberca, me dio pavor y no quise seguir viendo más. Cerré un poco los ojos ahí en la silla que estaba sentada, mirando todo, me estaba quedando dormida y me desperté porque me sentí toda mojada, mi Batman se había salido de la alberca y me estaba mojando por completo.–Alondra, mi amor. Estoy enojado porque no te has metido a la alberca conmigo – Mi Batman, me abrazaba mojándome más – No quiero que estés aquí aburrida. Mira a tu suegra y a tu suegro, todos están divirtiéndose.Lo que menos me gustaba a mí, estar en el sol y aparte no sabía nadar, por lo que no moriría ahogada en un parque recreacional, por eso no me había atrevido a meterme en ninguna de las albercas y mucho menos lanza
Capítulo 160. Mi protector favoritoNarra Alondra Ferreyra PérezTodo en mi vida era una tragedia, vivía temerosa de todas esas cosas que me provocaban pánico, por eso las evitaba siempre.–Vamos – Dijo mi Batman.Yo no quería ir, pero en ese punto yo ya no podía decir nada. No me quería ver como una persona nefasta y entonces caminamos hasta donde estaban los toboganes, nos dieron una llanta enorme para subirnos y ahí se colocó mi Batman, pero yo no me quería subir y cuando estuve a punto de regresarme él me envolvió en sus brazos.–Vamos Alondra, no tengas miedo que no pasará nada – Me dijo mi Batman – Tú traes chaleco salvavidas y mira, esos niños se están aventando ellos solos, si fuera peligroso no podrían subirse.Pero es que de niño uno no le tiene miedo a nada, nos subimos y nos tiramos de cualquier lado, de donde sea sin tener miedo y no importa si es peligroso o no, pero yo me estaba muriendo de miedo, así que esto iba a ser muy penoso para mí.–No lo sé, mi Batman – Dije ne
Capítulo 161. Pausa académica, parte 1 Narra David De María RamírezEstaba demasiado agradecido con el permiso que me dio la doctora Andrade, prácticamente me dio una semana más de tiempo, me tenía que internar el domingo, pero como tenía demasiados pendientes en la universidad y no sabía de qué manera se iban a resolver, tuve que aplazar la entrevista al lunes y con eso tuve otra semana extra de tiempo para solucionar mis pendientes. Mi madre me acompañó ese mismo lunes, al dejar la clínica de rehabilitación a la universidad, donde íbamos a hablar con el encargado de la ingeniería sobre mi situación.–Madre, en verdad siento mucho todo lo que te estoy haciendo pasar – Me disculpé - Te tuve que hacer que dejaras todo en México y eso no me gusta nada. Sé que tú tienes que hacer tus cosas y te he hecho descuidar todo por mí.No me gustaba causarle este tipo de molestias a mi madre y aunque estaba agradecido por haber venido, ella tenía también sus asuntos que atender allá en Méx
Capítulo 162. Pausa académica, parte 2 Narra David De María RamírezHabía perdido totalmente mi rumbo, lo había dejado todo atrás como si la carrera no fuera importante para mí, ni para nadie más, ahora tengo que resurgir y sacar adelante esta carrera que tanto le ha costado a mucha gente, no era una excusa el que me fuera a la clínica de rehabilitación, porque en primer lugar no debería estar en esta situación.–Nunca he sido un estudiante de 100, pero quiero mejorar y ahora no lo tomo como excusa, pero la adicción me ha desviado del camino y por eso prefiero tomar la pausa académica y después, ya que esté recuperado, poder retomar mis estudios aquí.Regresé de México para terminar la carrera en la universidad de Madrid y eso lo iba a conseguir nada me iba a impedir truncar mis sueños, yo lo iba a lograr fuera como fuera. Las drogas iban a dejar de ser un obstáculo en mi vida, porque las iba a dejar definitivamente, ese es el motivo de la pausa académica.–Nunca es tarde, par