Capítulo 152. Unos tragos para olvidar las penasNarra Alondra Ferreyra PérezEn estos momentos no estoy muy segura d que pensar, Nacho es de los primeros que está puesto para las fiestas, ahora que es su día especial se ausenta.–No lo sé, Simone. Si quieres yo lo puedo llamar – Se ofreció mi Batman – Ya debe de estar por llegar.Eso esperamos todos y que no se le dé por no acudir precisamente a su fiesta sorpresa de cumpleaños. Simone se ve muy sacada de onda. Pero a ver qué nos decía Daniel, si su primo se iba a presentar, no por nada le habían organizado la fiesta sorpresa.–Sí, por favor, Batman. Llámalo y mientras que Alondra me pase sus secretos, para lucir tan hermosa.–Lo voy a llamar, regreso.Mi Batman se alejó de nosotras y del ruido de la música que había en la casa de Simone para ir a llamar a Nacho, era muy raro que siendo él el festejado no se hubiera dignado en aparecerse a su propia fiesta y en cierta manera, me parecía algo muy malo de su parte, no estar a la hora q
Capítulo 153. La misma pataletaNarra David De María RamírezNicky desapareció de Madrid y Paloma lo hizo al día siguiente de ese pleito que tuvimos en la Puerta de Alcalá, ella no quería estar cerca de mí y no conforme con eso, me había responsabilizado a mí de manera directa con todo lo que le pasara a su amiga. Paloma no asumía que por su culpa y por sus ganas de estar peleando conmigo, casi nos metíamos en un problema con la guardia civil por el jaleo que ella armó ahí en la puerta de Alcalá y ahora, según ella, todo era mi culpa y eso me cabreaba a un nivel que era imposible de describir.–Sabadelle, me voy de aquí – Se despidió Paloma – Espero que, por el bien de David, mi amiga Nicky esté sana y salva en Santillana del Mar.Que estuviera como le diera la gana, de seguro estaba muy tranquila en su casa y aquí su amiga despotricando como una loca, como si se le hubiera ido la pinza bien lejos, y a mí ya me tenía cansado con lo mismo, me estaba haciendo perder la paciencia desde t
Capítulo 154. Buscando el perdónNarra David De María RamírezDebo ir a buscarla en estos momentos, la voy a convencer de que entre nosotros puede haber algo bueno, nos llevamos bien en la cama y lo otro sería comenzar a conocernos bien.–No he venido a causar nada – Respondí – Solo vine a algo y los dejaré, tengo que ir a ver a alguien.Ni mi colega, ni Paloma me dijeron ya nada. Dejaron que me retirara y yo me fui a buscar a Nicky, ella debía estar en su casa y renté un auto para ir a verla, recordé el camino que recorrimos con Paloma cuando llegamos aquí por Nicky que no me costó trabajo llegar y al hacerlo, toqué la puerta de su casa, muy decidido.–Hola, Nicky. Siento mucho presentarme así, pero he venido a disculparme contigo.Después de que había sabido que ella se encontraba bien, pues se había regresado a Santillana del Mar, esa misma noche, sin que le pasara nada, ahora estaba yo delante de ella pidiéndole disculpas, quería hacer las paces con ella, me interesaba de verdad o
Capítulo 155. Otra vez en peligroNarra Alondra Ferreyra PérezSemanas después de esa noche del cumpleaños de Nacho, un día que llegué del taller a casa de Carmen, la noté a ella muy triste sentada en la sala y con todas las luces apagadas. No sabía qué le pasaba, pero mi cuerpo se tensó de inmediato pensando que algo muy malo le pudo haber pasado a mi güero y rogaba porque eso no fuera así.–Hola, Carmen, ¿Por qué estás con todo apagado? – Pregunté – Me preocupa que sea así.Me entró un miedo terrible, Carmen no es de las que están a oscuras, algo malo le tuvo que haber sucedido a David, tenía tanto miedo hasta de preguntarle a Carmen que era lo que le pasaba.–Hola, hija. Ven acércate – Me pidió Carmen – Siéntate aquí conmigo, hay algo de lo que quiero hablarte.La sangre se me fue completamente de la cara, sentí como mi cuerpo se desinflaba, de la forma en la que Carmen me estaba hablando me hacía temblar las piernas, como si fuera un presagio, de que algo malo iba a pasar o ya est
Capítulo 156. Cambiando de airesNarra Alondra Ferreyra PérezDavid no podía ser molestado por mí y menos en la situación en la que se encuentra eso sería demasiado irresponsable y tonto de mi parte, no le iba a contar como me sentía yo estando él tan mal.Le mandé un libro con Carmen, uno de mis libros favoritos para que en su encierro tuviera algo que leer y ella se lo llevó consigo para dárselo como un regalo de mi parte con todo mi corazón. Mi Batman y yo, la llevamos a Ciudad de México y al aeropuerto y de ahí nos fuimos a casa de sus padres ese fin de semana, en la que tenían algo organizado.–Alondra, mi amor quita esa cara que tienes – Mi Batman me abrazó – Mejor ponte feliz, mañana es el cumpleaños de mamá y no tienes idea en donde lo quiere celebrar tu suegra.No me podía imaginar que era lo que iba a hacer su madre para celebrar su cumpleaños, no sé cuáles son los gustos de la señora. A decir verdad, nunca le he preguntado a mi Batman que le gusta a su mamá.–No lo sé, mi B
Capítulo 157. Pasos en firme, parte 1Narra David De María RamírezGracias a la ayuda de mis amigos de Paloma y de Sabadelle, yo me sentía muy animado de ir a internarme a un centro de rehabilitación. Era lo mejor, yo tenía que hacer muchas cosas por mi bienestar y esto sin duda iba a ser el primer paso y el más importante que tenía que dar. Mi madre llegó un día antes de mi primera consulta y entrevista en el centro de rehabilitación y me fui a quedar con ella al piso de escapadas.–Madre, qué bueno que estás aquí para acompañarme a ir a mi entrevista mañana – Le dije muy feliz – Gracias, por estar siempre conmigo cuando yo más te necesito.La mejor madre de todo el mundo, ella es la que siempre va a estar a mi lado, en las buenas y en las malas, nunca me va a dejar solo, no importa como me comporte, ella me sabe aconsejar. Me daba tanto gusto tenerla aquí, es mi fortaleza.–Siempre estaré acompañándote en todo lo que tú necesites. Te amo hijo y me siento orgullosa de ti, por esta de
Capítulo 158. Pasos en firme, parte 2Narra David De María RamírezLa doctora se representó y yo di un paso al frente, para que me reconociera y viera que era yo el paciente.–Buenos días, claro que sí doctora.Me fui caminando con la doctora por el estrecho pasillo por el que ella me condujo, mi madre se quedó con Paloma y con mi colega y estaba seguro de que se quedarían esperándome en la cafetería como ya lo habían dicho. La doctora abrió un consultorio y a diferencia de lo que yo pensaba, el lugar no era oscuro. Era hermoso y estaba muy bien iluminado.–David, primero que otra cosa, bienvenido a este lugar donde vas a comenzar una nueva vida, quiero que me cuentes los motivos que tienes para estar aquí.Tengo muchas razones para estar aquí, la primordial la adicción de la cual he sido víctima por mí mismo, de mi propia mano, llevándome casi a la muerte, como si me estuviera suicidando cada vez que tomo de las cápsulas.–Gracias, doctora. Vine aquí por lo obvio, porque soy un adict
Capítulo 159. Toboganes de la muerteNarra Alondra Ferreyra PérezMi Batman, Simone y Nacho, se andaban dando vuelo en las albercas ahí en el rollo. Yo no sabía ni nadar y me daba demasiado temor el meterme ahí, se veía que estaba demasiado hondo y nada más de ver como Simone casi termina hundida en la alberca, me dio pavor y no quise seguir viendo más. Cerré un poco los ojos ahí en la silla que estaba sentada, mirando todo, me estaba quedando dormida y me desperté porque me sentí toda mojada, mi Batman se había salido de la alberca y me estaba mojando por completo.–Alondra, mi amor. Estoy enojado porque no te has metido a la alberca conmigo – Mi Batman, me abrazaba mojándome más – No quiero que estés aquí aburrida. Mira a tu suegra y a tu suegro, todos están divirtiéndose.Lo que menos me gustaba a mí, estar en el sol y aparte no sabía nadar, por lo que no moriría ahogada en un parque recreacional, por eso no me había atrevido a meterme en ninguna de las albercas y mucho menos lanza