Diana. Pasear por el pueblo con la princesa disfrazada fue algo divertido, cuando los guardias se dieron cuenta de quien nos acompañaba abrieron los ojos con mucha sorpresa y se alarmaron al saber que cometieron un grabe error qué los puede costar el trabajo y después de convencerlos en guardar el secreto pudimos pasear con tranquilidad, al ver el rostro de la princesa me percate de que sus ojos se iluminaron al ver los pasteles de una tienda, creo que a la princesa le gustan las cosas dulces tal ves le compre algunos después, al regresar al palacio la mirada de la princesa se ve más calmada y relajada sabia que salir de estos muros la aria bien ademas mire varias veces que Elena logro sacarle una sonrisa con sus comentarios y preguntas tontas, esta salida logro tener un cambio signicativo en la princesa, al estar sola en mis habitaciones me siento en uno de los sillones y sin darme cuenta me quede dormida en él, siento que alguien me mueve levemente y al abrir los ojos veo a Max mir
Diana. Esta mañana recibí a la costurera real en uno de los salones para ver los modelos de los vestidos de novia, nunca pensé que después de lo que me pasó con el conde Lucian volvería a encontrar el amor y mucho menos en casarme principalmente por el estado en que quedó mi cuerpo lleno de cicatrices pero a Max no le importo nada de eso me mira con tanto amor y cariño y apesar de que puede intimidar con su fría mirada es muy cálido, el salon está lleno de comentarios alegres de Elena que mira maravillada los modelos y las contestaciones cortas de la princesa, en muy poco tiempo se hicieron buenas amigas, mi madre permanece en silencio tomando té tranquilamente pero se que tiene algo ya que desde mi desmayo actuado de forma mas seria de lo común temo que tal vez ya sepa algo. -Mira Diana este tiene un bello cinturón lleno de piedras preciosas. La voz de Elena me saca de mis pensamientos y me ase voltear a ver el vestido que me señala debo de decir que si es bonito pero tiene muchos
Erika.Hoy es el día en que se llevará a cabo el juicio del mal viviente de Lucian, tantos años desperdiciados viviendo con ese desgraciado creyendo qué me amaba pero solo le convenía mi presencia, tantas promesas y cariños vacíos ahora son nada, uno de los guardias abre la puerta de la habitación llamando mi atención.-ya es hora.Le doy una última mirada al lindo paisaje de mi ventana, no puedo creer que Diana allá sido tan venebolente conmigo al no encerrarme en uno de los calabozos y darme una oportunidad como me hubiera gustado ser de la misma forma poder perdonar de esa manera tal vez si hubiera sido buena me hubiera tocado una mejor vida pero ahora ya no hay tiempo para eso, al salir de la habitación tenemos que detenernos de forma brusca por la culpa de una criada qué camina con prisa por el pasillo pero me percató de que la manga de su vestido esta manchado de sangre. eso me desconcierta y se que es sangre por el coordinador y el aroma qué dejo en el pasillo, la sirvienta pro
Maximiliano.Han pasado tres días desde el ataque a Diana y sigo aquí esperando a que despierte, después de que Jacobo interrogara a los guardias descubrió qué uno de ellos fue sobornando por Julieta para que la dejara entrar ese día, no tuve qué meditar mucho cual seria su castigo le cortaron las manos y le intruduccieron hierros calientes en la boca antes de decapitarlo, es lo minimo que se merece despues de que por su avariacia mi dulce angel terminara asi, sueño todas las noches en que despierta y me sonríe dulcemente llamándome cariño mientras sostiene a nuestro bebé, en este tiempo no me he despegado de ella ni he querido comer nada, no tengo apetito y la comida me sabe insípida sabiendo qué Diana no despierta no importa que me diga Gloria ni mi madre no pienso dejarla sola ni un solo minuto, tomo su mano y le doy un casto beso en un intento de que así despierte, sostengo su mano entre las mías y las coloco frente a mi boca.-dios por favor permite qué despierte, te pido que no
Maximiliano. Al estar sentado en la tina recuerdo cuando salve a Diana del agua helada del lago, creo que fue el destino que nos unió esa tarde de invierno, escucho qué la puerta se abre y entra Gloria. -¿ le ocurrió algo a Diana ? -no solo vengo asistir lo en el baño. -eso no es necesario, ya no soy un niño duquesa Gloria. Gloria ignora mis palabras y se acerca a la tina para sentar detrás de mi en un banquillo y comenzá a lavar mi cabello. -a pesar de su edad se sigue comportándose como un niño, recuerdo cuando era un niño y asía vuelga de hambre asta que le daban lo que quería. -eso no funcionaba contigo. -claro que no, no hay que darle gusto a los niños berrinchudos luego crecen ciento hombres que creen que puedo obtener lo que quieran. -esto es diferente, siento que el corazón se me va a partir en dos tengo deseos de llorar asta quedarme secó, no puedo vivir sin ella. -estas totalmente enamorado Max y esa es la enfermedad más peligrosa del mundo, vuelve a los f
Diana.Después de que Elena se calma llega el médico Alfonso que me sonríe levemente y me ase una reverencia corta.-me alegra que por fin este despierta futura emperatriz.-no sea tan formal Alfonso nos conocemos de ase mucho tiempo y le agradezco mucho por salvarme por segunda vez.-se lo agradezco pero en realidad esta vez por la ayuda de una dama la pude salvar, ella detuvo la hemorragia asta que llegue.-¿ quien fue esa bondadosa persona ?-fue Erika.La respuesta de Max me deja fría, como qué fue ella quien me ayudo pensé que me odiaba y principalmente por que fue mi culpa que la sociedad la aislara, miro a Max en busca de alguna respuesta.-de hecho gracias a ella los guardias detuvieron a Julieta y llegaron justo a tiempo para salvar tu vida.Me cuesta mucho creer que Erika me ayudara siendo qué antes me miraba con tanto desprecio y odio y sin contar qué fue ella quien me disparo aquella tarde tendré que hablar con ella después pero lo que mas me intriga ahora es como Julieta
Maximiliano.Me apresuró a salir de la habitación y alcanzar a mi madre en el pasillo, esta acompañada por su dama de compañía la detengo y le pido a la dama qué nos de tiempo a solas ase una reverencia y se retira, mi madre me mira con seriedad.-¿ qué deseas ?-solo quiero preguntarte si tu tuviste algo qué ver con esto.-jamás me rebajará tanto como para mandar a matar a una mujer además sabes que no es mi estilo.-pero te creo capaz de manipular la mente de Julieta para que lo hiciera.-desde que salio del palacio no tuve comunicación con ella.-eso no significa nada.Mi madre da un suspiro cansado y desvía la mirada.-no te mentire me desagrada esa mujer pero miro como la vez con tanto amor y cariño, se muy bien qué se siente ese sentimiento de querer hacer todo lo posible por esa persona apreciada.Mi madre se la vuelta y comienza a caminar por el pasillo pero se detiene y me vuelve hablar.-si ella no se mete conmigo era lo mismo además me e percatado de que tu hermana la a fre
Diana. Llega la noche y como a pasado desde que desperté Max llega a mi recamara para dormir a mi lado pero sigue actuando como un niño regañado y se detiene a un lado de la cama, me mira de reojo pero cuando lo volteo a ver desvía la mirada. -¿ ocurre algo ? -¿ sigues molesta conmigo ? No puedo creer que Max siendo un hombre adulto, fornido y que puede intimidar con la mirada a las demás personas se sienta intimidado por mi, doy un suspiro con un poco de cansancio. -no, pero no me gusta que me trates como si fuera de papel. -Diana solo me preocupo por ti. -ya lo sé pero Max me as puesto como a viente guardias a cuidarme, no puedo dar ni un solo paso sin qué me sigan, me tratas como si fuera una prisionera. Max se sienta en la cama a mi lado y toma mi mano en la cual da un casto beso y me mira con cariño. -no quiero que te sientas así mi dulce amor solo deseo cuidar a las dos personas más preciadas para mi. Max coloca una mano en mi vientre y la acaricia levemente