—¿Yo te estoy jalando hacia abajo?, ¿cuándo te he estorbado? Hoy es un día de gran alegría para Ximena, ¿realmente tienes que discutir conmigo frente a todos? —Mariana ya había aguantado mucho.—¡Estoy hablando de los hechos! Todos están aquí hoy, y soy el único al que no llamaste. ¿Qué intentas dec
—¡¿Para qué quieres verlo?! —Lisandro se irritó, su voz cargada de enfado.—¡No creo que él matara a alguien para echarme la culpa a mí! —declaró Ximena. Él frenó de golpe, deteniendo el coche al lado del camino.—¡Vaya, qué confianza le tienes! —Ella no quería explicar demasiado.—¡Necesito verlo!
» Y vi que compró dos porciones de camarones a la Diabla. ¡Añadió mucha salsa picante, todo era rojo! ¡Es lo que te gusta! —Ximena bajó la mirada, sin querer ver a Gael forzando una sonrisa.—Estuve enferma esos días, mi garganta estaba incómoda —respondió. —Comer camarones a la Diabla cuando estás
Armando había encontrado a Sofía en el hotel. Carlos había sido dado de alta ese día y necesitaba descansar por unos días. Por eso ella había reservado una habitación para él en el hotel, justo al lado de la suya. Cuando Armando llegó, justo la vio salir de la habitación de Carlos.Naturalmente, su
—¡Espero que estés en lo correcto!Luego, dirigió una mirada profunda hacia Carlos y, sin decir nada más, se marchó con un gesto brusco. Después de que Armando se fue, ella tardó un rato en recuperarse y preguntó con incertidumbre.—¿De verdad... has decidido no tener hijos nunca? —Carlos acarició s
Lisandro le pidió a Jorge que investigara a ese tipo. Ximena se decía a sí misma, con un toque de envidia, que tener poder e influencia era una ventaja; y era que, en menos de diez minutos, toda la información de Arturo Calderón estaba ya desplegada en la computadora a disposición nuestra.Arturo Ca
—¡Eso es! Para que todo tenga sentido, tendría que haber una tercera persona implicada, y Arturo estaría tomando la culpa por alguien más, para después culpar a Fabiola. —Ximena se quedó pasmada.—¿Pero por quién estaría Arturo tomando la culpa?—Habrá que preguntarle a Fabiola por qué está tan segu
Lisandro, llevando consigo a Ximena, volvió a encontrarse con Fabiola. En privado, Daniel le dijo a ella.—¡El jefe nunca ha querido meterse en los asuntos ajenos! La gente con alto poder, por lo general, es distante y carece de calidez humana. ¡No esperes que muestren un sentido de justicia frente