Hanna BeckerNew YorkComo había dicho él, que mejor no nos hubiéramos visto, habíamos perdido ambos nuestro valioso tiempo, pero no había desperdiciado los pocos minutos que habíamos tenido para ser sincera, para hablarle con la verdad y él no lo valoró y yo había sido blanco de su mala actitud.–Hola, Susan – Respondí desganada y a nada de llorar – No pudimos arreglar nada. Me siento muy mal, le dije mi verdad a Devin y él no lo ha tomado bien y ahora no sólo es eso, ahora también estoy cargando mi pesada cruz pues me amenazó con decirle las cosas a Levina y lo tendré que hacer yo, pues le voy a contar la versión original, no dejaré que Devin, le cuente su versión aumentada y quien sabe cuántas cosas más se inventará.–Es un desgraciado ese tipo – Espetó Susan – Dime, ¿Dónde estás? Pasaré por ti y nos vendremos a casa para tener una noche de chicas, eso te animará.En realidad iba a necesitar mucho helado, esto iba a llevar su carga de mucho sufrimiento, no iba a necesitar solo ese
Capítulo 97Devin BeckerNew YorkSaliendo del parque, me fui directo al estacionamiento, me puse el casco y me subí a la moto. Estaba más que enojado, ella había tenido la desfachatez de pedirme un tiempo para poder hablar, ahora resultaba que ella me amaba. No iba a darle ninguna oportunidad a Hanna, había jugado con mis sentimientos y había deteriorado mi confianza en ella, al decirme mentiras.Eso no se lo iba a perdonar nunca, era muy difícil para volver a aceptar a alguien que me había engañado, la confianza era muy frágil, y ya no se recuperaba al 100 por ciento, yo ya no podía poner mi confianza en ella, pues estaría todo el tiempo dudando de lo que me dijera, y así no se vive bien.¿Qué clase de persona era al decirme puras mentiras? Si me hubiera hablado siempre con la verdad, tal vez la hubiera escuchado, no inventarme tantas cosas sobre su familia y sobre ella misma, ahora estuviéramos viviendo en sana paz, pues si en verdad me amara, no me hubiera ocultado su problema fam
Katie BeckerNew YorkEstaba muy tranquila tomándome un café con uno de mis amigos, cuando recibí una llamada de parte de mi hermano Devin, se me hacía raro porque nos habíamos despedido cuando él salió de la empresa, veamos de que se trata esta vez, quizás quiera algún consejo para lo de su problema con Hanna, sé que ellos se aman, y es el momento justo para decirle que hacer para recuperarla.–Hola, hermano, ¿cómo estás? Ya no me encuentro en la empresa, pero dime en qué te puedo ayudar.Del otro lado no contestó mi hermano, tal vez lo ha meditado mejor y ahora no quiere hablar, Devin, era un caso perdido, no quería aceptar que se había excedido con su esposa, todos cometemos errores y es de sabios querer mejorar.–Hola, buenas noches, señorita, hablo de parte del hospital, soy paramédico, y usted se encuentra en la lista de llamadas de emergencia del señor Devin Becker, se encuentra marcada con mi hermanita, y por ser la primera le estoy marcando.Debía tomar las cosas con calma, m
Hanna BeckerNew YorkEl dolor me estaba matando, Devin no podía estar internado en este hospital. Simplemente, no podía y no quería tampoco que lo estuviera, yo me sentía culpable, mejor hubiera sido no hablar con él y esto no hubiera pasado, Susan estuvo a mi lado en el hospital esperando noticias de Devin y con nosotros se reunió Daniel, al poco tiempo. Él llegó llorando, desconsolado.–Hola, ¿Cómo está Devin? Necesito saber cómo se encuentra mi amigo. Me urge saberlo – Daniel, sonaba muy preocupado – Por favor, háblenme y díganme lo que saben.–No sabemos nada mi amor – Susan respondió – En cuanto nos enteramos Hanna y yo, nos reunimos aquí con los padres de Devin y sus hermanos.–Sí, Daniel, por mi culpa Devin tuvo este accidente fatal. Yo pedí hablar con él y las cosas no nos salieron bien – Confesé mi culpa – Si él muere, me voy a morir con él. Lo nuestro empezó mal, pero yo lo amo.–No es momento de echarte la culpa, Hanna – Daniel me abrazó – No podemos pensar que mi amigo mo
Hanna BeckerNew YorkKatie y yo llorábamos destrozadas mirando a todo el equipo médico haciendo de todo para poder reanimar a mi amado Devin. Yo sentía que si él moría, yo para qué quiero la vida si él no está.–Katie, no quiero que Devin muera – Lloré presa de la desesperación – Lo amo y él lo es todo para mí.–Sé que lo es, pero cuñada, yo estoy segura de que Devin no va a morir, no podemos pensar eso, por favor.Cerraron la cortina del área de terapia intensiva para que nosotras no pudiéramos ver más, de los esfuerzos que estaba haciendo el equipo médico para reanimar a mi esposo.Mis ojos no podían dejar de derramar lágrimas y me lamentaba todo el daño que le causé a la persona que más he amado en mi vida. Devin, es lo que me hace ser la Hanna que soy ahora y por mis engaños y mentiras y el miedo a no decirle quién soy, ahora él está por dejar este mundo.–Lo siento mucho, pero no pueden estar aquí – Nos dijo una enfermera del área de terapia intensiva.–Pero, señorita, es mi her
Devin BeckerNew YorkEra lo que había pensado todo el tiempo que había pasado inconsciente, que tenía que despertar para poder volverá a verla, pues yo también la amaba, debíamos darnos una oportunidad, Hanna, debía ser escuchada por mí, que me contara que era lo que había pasado en su familia para que ya no formara parte de ella.Yo iba a estar con la mente abierta para escucharla y comprenderla, no sabía yo los motivos que la llevaron a tomar la decisión de estar alejada de su familia o si ellos le hicieron daño o la sacaron del núcleo familiar, todo podía pasar, por eso tenía que contar su historia.–Yo sé que tenemos que hablar Hanna, vamos a darnos ese tiempo de paz que tanto nos hace falta, quiero escuchar tu historia, quiero saber todo de ti.Una buena relación se tenía que fundamentar en la confianza, en la comunicación, que era lo que nos había hecho falta desde que nos conocimos, pondría todo de mi parte para ser un buen esposo, un buen compañero y amigo de Hanna, si íbamos
Devin BeckerNew YorkCuando los labios de Hanna, se posaron en los míos, me sentí en la gloria, era el beso más tierno que había recibido en mucho tiempo, la amaba y sabía que ella me amaba de la misma forma, de lo contrario no creo que estuviera aquí. No me gustaría que se fuera, pero tiene que ir a descansar, ya ahora que entre mi mamá, Hanna, tiene que irse a dormir a nuestra casa.Terminamos el dulce beso y Hanna, se aferraba a mí, eran de las pocas veces que me había sentido así, yo tampoco quería que se fuera, me daba miedo que me fuera a dar otra crisis y volvieran a ponerme esos aparatos, pero tampoco quería que ella se empezara a sentir mal por todo el tiempo que había pasado sin dormir.–Me tengo que ir, Devin, para que pueda entrar Levina a verte, no la quiero preocupar demás.Mi madre, era una mujer muy dura, pero tratándose de sus hijos, podía mover cielo y tierra para estar con ellos, era una madre muy protectora, aunque todos creyeran que era una tirana, tenía un coraz
Hanna BeckerNew YorkSusan y Daniel me ayudaron a mudarme de nuevo a la casa que habitaba con Devin, los días fueron pasando y él se recuperaba favorablemente en el hospital. Yo asistía a verlo todos los días y tampoco descuidaba mi trabajo en el estudio, casi siempre dormía al lado de Devin, en el sillón que tenía en su habitación del hospital, pero esa noche no me iba a quedar yo, se iba a quedar Katie.–Ustedes dos, se traen algo entre manos – Nos dijo Devin – Bien que las conozco, pareciera que las huelo o algo.Él había sospechado de algo que habíamos organizado, pero no sabía que era, solo porque estábamos actuando de una manera diferente, porque yo hoy no estaría con él.–Sí, nos conoces hermanito, pero no es nada malo – Katie se ruborizó – Es la última noche que pasas en este lugar y quisiera ver a alguien o se me irá la oportunidad.– ¿Lo ves mi amor? – Le dije a Devin – Katie debe acompañarte, es por una buena causa. Le ha gustado un hombre de aquí del hospital, tu doctor p