Hanna BeckerNew York–Hola buenas noches y que guapos están los cuatro – Nos halagó Levina – Me alegra mucho, que hayan llegado a tiempo.Levina, estaba espectacular, esta señora, ni siquiera parecía que tuviera tres hijos, estaba muy bien conservada, y con ese vestido azul celeste, le quedaba muy bien.–Hola buenas noches – Respondimos todos.–Hanna te ves espectacular y tú Daniel, no me habías contado que andabas ya de novio con esta encantadora joven – Dijo Levina refiriéndose a mi amiga Susan – Pasen por favor y tomen sus lugares, que el evento está por comenzar.Yo me acordaba perfectamente cómo eran este tipo de eventos y llegando a la hora pactada, empezaba la función, como yo le llamaba.–Gracias Levina – Dijo Daniel – Esta joven hermosa, es mi novia Susan.–Mucho gusto, señora – Susan le tendió su mano a mi suegra – Es un placer conocerla.–El placer es mío, pero adelante, por favor pasen.–Permiso, madre – Dijo Devin.–Es propio, hijo.Todos pasamos y entramos a la gala de
Devin BeckerNew YorkDaniel y yo, asistimos a mi madre en algo que necesitaba de unas personas y ahí es cuando vino lo peor, se acercaron a platicar con mi madre, el tipo ese con la mujer de cascos ligeros, Ary DeCostello. Daniel, al verme arrugar la nariz, rápidamente como mi mejor amigo que es, se dio cuenta de las cosas que yo pensaba hacer y decir.–Levina, me siento muy enfermo – Daniel se abrazó de mi madre – Me duele mucho el estómago.–Daniel, por Dios, pero ¿Por qué? – Mi madre preguntaba asustada – Estabas bien, hace unos momentos.–Hace unos momentos, pero me ha comenzado de repente – Mi amigo hizo muecas de dolor – Dejas, que Devin me acompañe a tomar algo.–Claro que sí, hijo – Mi madre se preocupó de verdad por Daniel – Devin, ve con él, por favor y ahorita en un rato, los alcanzo.–Sí, mamá.Caminé con el payaso de mi amigo y volvimos a nuestra mesa. Daniel, esta vez había llegado demasiado lejos porque, no pensé que mintiera con tal de no dejarme estar cerca de esa in
Devin BeckerNew YorkMientras hablaba con Hanna, una de mis primas que vino de Francia llegó y me cargó como costal, en plena fiesta de mi madre y Hanna por supuesto, no dudó en morirse de risa, al igual que Daniel, que Susan y que mi misma hermana Katie. No tenía idea que a estas fiestas que, eran tan comunes para mi madre, fuera a venir mi prima, desde tan lejos.–Brittany, bájame por favor – Le pedí – No tenía idea, que estabas en New York.–No primo, déjame disfrutar el cargarte, hace años que no te veo – A mi prima le encantaba llamar la atención – Estás guapísimo.–Lánzalo en el aire, Brit – Katie lo estaba disfrutando – Para que veas que Devin, es más ligero que una pluma de un ave.–Ya basta – Grité – Brittany, bájame por favor.–No sabes divertirte Devin – Se quejó ella y me bajó – Dame un abrazo, espero eso sí lo puedas hacer.Abracé a mi prima, tenía mucho sin verla y eso claro que, lo podía hacer. Era de mis primas más queridas y con las que jugábamos rudo desde niños, só
Hanna BeckerNew YorkDevin se soltó de mi mano y se levantó del pasto, al oír la voz de su padre. Una vez que se puso de pie, me dio la mano para ayudarme a levantarme del pasto, yo la tomé y me puse de pie. Tomados de la mano, caminamos a dónde estaba mi suegro, quién al vernos hizo una enorme sonrisa, cuando caminábamos hasta llegar a él.–Hola, buenas noches papá – Le dijo Devin – Ella es Hanna, mi esposa.–Hola, bella dama – El señor, me abrazó – Bienvenida a la familia, soy Henry Becker a tus órdenes.–Mucho gusto, suegro. Hanna Becker, encantada de conocerlo.–No los interrumpo, salí a buscarlos porque no los vi con Daniel y su novia, que por cierto también es tan hermosa como tú, Hanna y ya me iba a enojar con Devin, por haberse ido, sin presentarme a mi nuera – Su papá era muy tratable – Menos mal, que eso no pasó.–No para nada suegro – Salvé a Devin – Lo que sucede, es que me sentía un poco abrumada por tanta gente y decidimos, con mi esposo dar una caminata nocturna para d
Hanna BeckerNew YorkEstaba muy preocupada por mi amiga, se veía fatal y dos veces, mientras íbamos de camino a la casa de Devin, Daniel tuvo que detenerse para que ella pudiera bajar a devolver su estómago, le había pegado muy fuerte esa bebida y yo estaba muy preocupada, sosteniendo su cabello y dándole todo mi apoyo a mi mejor amiga.–Chicos, no creo que debamos ir a casa. Susan está muy mal y creo que tenemos que llevarla a un hospital.No había tiempo que perder Susan, estaba realmente afectada yo la veía ya con un semblante verdaderamente preocupante.–Me siento muy mal – Susan lanzó un alarido de dolor – Hanna, me duele mucho el estómago y siento algo en mis pies.–No Susan, cálmate – Abracé a mi amiga – Tenemos que ir a que te atiendan, no te podemos dejar así, por ningún motivo.Ya ella no se podía sostener, esa reacción que le había causado esa bebida, había sido una intoxicación, no le veía de otra, estaba muy afectada.Devin y Daniel bajaron del auto y estaban como tontos
Devin BeckerNew YorkMe había quedado en la sala de espera, no sabía que era lo que le pasaba a Hanna, yo solamente la quería apoyar y consolar para que se sintiera bien, no tenía que agredirme de esa manera, además habíamos llegado al hospital sin tanta demora. Yo que ya estaba dispuesto a llevar la fiesta en paz. Al parecer esto de lo de Susan, le ha afectado demasiado.Sólo espero que a Susan, la atiendan rápido, y así podernos ir de este hospital porque la verdad a mí no me agradaban demasiado, creo que a mucha gente no le gustaba el ambiente que se respiraba en estos sitios. Empecé a escuchar mucho movimiento en la entrada de urgencias y ya que yo era muy curioso me acerqué para ver de qué se trataba.–Al parecer se trata de una intoxicación masiva – Dijo uno de los paramédicos.Al estar yo cerca de las enfermeras que se habían acercado a atender el caso, me enteré de lo que estaba pasando. Miré hacia la persona que venía en la camilla y me pude dar cuenta de que era mi hermana
Devin BeckerNew YorkMis lágrimas empezaron a bajar por mis mejillas y ya ahora comprendía lo que estaba pasando Hanna, pues su mejor amiga también se había puesto en la misma condición que mi hermana y había sido peor, porque ella venía con Susan y vio su reacción en primera fila.–Tú cómo estás madre, no bebiste de lo que mezclaron en esa bebida, ¿verdad?Quería estar seguro de que, a ella, no le iba a pasar lo que le estaba pasando a mi hermana y a Susan, porque de verdad, yo no lo iba a soportar, no quería que estuviera mal.–Yo solamente tomé un trago de esa bebida y la había dejado a un lado, porque me fui a atender otros asuntos de lo contrario creo que me encontraría en esta misma situación que Katie, solamente siento un leve dolor de estómago.Sí, de la que se había salvado, si hubiera terminado todo el contenido del vaso o de la copa, en qué se la habían servido, no me quiero imaginar por la que estuviera pasando mi pobre madre. Me tomó del brazo y se apoyó en él.– ¿Te enc
Hanna BeckerNew YorkLo que había pasado en casa de Devin, era más grave de lo que se podía imaginar, no podía creer que, ahora Daniel fuera quién estuviera desmayado como mi pobre amiga Susan, eso pasaba por mi mente, mientras que corrí por los pasillos del hospital, en busca de ayuda para Daniel, hasta que, por poco, casi chocaba con una enfermera.–Enfermera, por favor venga conmigo, hay un amigo mío que se ha desmayado, necesitamos de su ayuda – Le expliqué rápidamente – Es de los del mismo caso, que los pacientes que han venido ingresando, por la intoxicación colectiva.–Claro que sí, señorita. Permítame, iré por dos de mis compañeros y por una camilla, para poderlo llevar – La enfermera se metió detrás de unas puertas.Yo trataba de asomarme, desde ahí mientras esperaba por la ayuda, para ver si Devin, había logrado hacer reaccionar a Daniel. Esto que estaba pasando era terrible, tanta gente intoxicada y con sus vidas en peligro, todo por gente irresponsable y abusiva, como seg