Hanna BeckerNew York–Me da gusto saber que ustedes si se han enamorado, algo que no pasa con Devin y conmigo y es mejor, no me gusta la gente negativa que no puede aportar nada bueno a mi vida.Era como si me fuera a pegar una fuerte infección si me juntaba mucho con Devin, lo malo era que estaría casi las 24 horas del día a su lado pero yo no le haría caso, después de todo.–Sé que mi amigo es difícil, pero es muy buena onda cuando lo llegas a conocer bien, ya verás que una vez que se entiendan, serán inseparables.–Gracias, por los ánimos – Me reí.Daniel y yo, entramos platicando y muy relajados al estudio y subimos hasta el estudio de Devin, Daniel ocupaba la oficina de a un lado y todos estábamos así en el mismo piso y espacio. Lo vimos muy concentrado trabajando en algo, Daniel llegó a abrazarlo y de inmediato se quejó, lo que era su costumbre.–Amigo mío, mínimo levántate y dame un abrazo – Le dijo Daniel – No he trabajado aquí desde que me fui de vacaciones, ya que he vuelto
Devin BeckerNew YorkLa reunión de Daniel y mía, con nuestro cliente, resultó ser todo un éxito. Al menos me daba cuenta que lo que Hanna había hecho estaba perfecto y aunque estaba furioso con ella por lo de anoche, al menos podía decir a su favor que nuestros problemas de convivencia en este absurdo matrimonio, no estaban afectando en absoluto nada en cuestión laboral.–Muy bien Devin, Daniel, nos complace decirles que, el proyecto que ustedes me han mostrado – Nos dijo el cliente – Me ha encantado lo que me han presentado y les deseo todo el éxito para llevarlo a cabo. Depósito en ambos, toda mi confianza.Esos eran los buenos negocios, que a la primera el cliente quedara totalmente convencido de querer trabajar con nosotros.–No te vas a arrepentir, Frank – Respondí – Estás con el mejor estudio de arquitectos de New York, tu proyecto está en las mejores manos. Y no hay necesidad de que te lo doga, nuestro trabajo habla por sí solo.–Sí Frank, tanto Devin como yo, hemos aprendido
Devin BeckerNew YorkLo que yo no quería era hacer evidente mi estancia en el bar y mi amigo Daniel parecía querer todo lo contrario, se estaba desfundando de la risa y eso, no sabía bien como tomarlo, por lo que, no tuve más remedio que, esperar a que mi amiguito quisiera dejar de reírse para que pudiéramos seguir platicando.–Ya me imagino lo que pasó – Dijo Daniel emocionado – Qué ella te sorprendió mirándola y se armó una discusión marca demonio.–No para nada, lo que pasó fue que contrario a eso, ella brincó la barrera de almohadas, nos besamos y una cosa llevó a otra – Recordé alterándome – Ella me hizo un trabajo delicioso, ya imaginas como, me llevó al cielo y después me dejó que me estrellara contra el suelo.–Dios mío – Daniel se burló de nuevo – No lo puedo creer, eso es horrible, no se lo deseo ni a mi peor enemigo y ¿Qué pasó después?Mi amigo no era curioso, era lo que le seguía de curioso, así que me decidí a contarle lo que sucedió después.–Eso fue lo peor, se hizo l
Hanna BeckerNew YorkLuego que Devin, saliera con Daniel, del estudio, yo me puse a hacer mis pendientes, hasta que llegó la hora de la comida, la cual estaba esperando muy ansiosa para irme a comer con Susan. Tenía muchas ganas de platicarle a mi amiga, sobre mi maldad cometida contra mi esposito Devin Becker, ella me envió un mensaje y me sorprendió verla esperándome afuera del estudio, no pensé que tuviera el tiempo de venir por mí, si ya habíamos quedado de vernos en Central Park.–Hola Susan, que bueno que has venido hasta acá por mí – Abracé a mi amiga – Te ves muy contenta.–Hola Hanna, mi felicidad tiene nombre y apellido y se llama Daniel Hamilton – Dijo emocionada – Pero vamos, que no puedo con la duda de lo que le pudiste hacer al pobre de Devin.–Ese, de pobre no tiene nada, si es un infeliz y no lo digo en mal plan, lo es de verdad. Creo que las caras felices, no tienen cabida, ni espacio en su vida.–No digas eso Hanna, pobre de tu señor esposo – Se burlaba mi amiga – V
Hanna BeckerNew York–Hanna, menos mal que ya llegaste pensé que no me ibas a acompañar y ya estaba de nervios – Katie estaba asustada – Pero ya estamos las dos, listas para ir.–Sí, vamos Katie. No te dejaría plantada por nada del mundo – Respondí – Me interesa mucho este proyecto, yo desde que me lo mostraste supe que es de esos proyectos, que te llena mucho profesionalmente.–Mi madre piensa lo mismo – Dijo Katie mientras subíamos a su auto – Está feliz que trabajemos juntas, de hecho, quiere que el fin de semana vayamos a tomar unos Cosmopolitan solo las tres.–Yo encantada, me halaga saber que, a tú madre le gusta que participemos juntas de este proyecto.–Mi madre tiene muy buen ojo, si no viera algo especial en ti, no estarías aquí en el estudio ¿Sabes entre cuantos arquitectos, te eligió? Entre cientos Hanna.–Ahora me siento más que feliz, Katie – Dije sintiéndome poderosa – Admiro a tu madre, desde que tengo uso de razón y nunca pensé, cuando metí mi solicitud que alguien c
Devin BeckerNew YorkQue ni se lo imagine. Yo no iba a hacer ninguna celebración, yo no era ningún payaso, para estar divirtiendo a medio mundo. Si ya prácticamente todos la conocían, para qué hacer esa dichosa fiesta. Pero yo no iba a quedar como un amargado, si eso era lo que ella pretendía.–Claro que sí, mi amor, tenemos que quedar con todos los chicos para hacer esa fiesta – Dije con una sonrisa falsa en los labios – Por mí, no hay problema.Por mi podía hacer esa fiesta, pero no con mis amigos, ni en la casa, si tanto quería celebrar, que se fuera a un bar y a mí, que me dejara tranquilo,– ¿De veras, mi amor?, que lindo de tu parte – Chilló como loca.Me puso los brazos alrededor del cuello y me dio un beso en la boca, yo no pude hacer otra cosa que seguirle el juego, esta mujer me estaba volviendo loco con sus insinuaciones. Ella sabía que no la iba a rechazar delante de Janet. Así que esperé a que terminara de besarme.–Que lindos, se ve que se quieren mucho, no pensé que de
Devin BeckerNew YorkNos separamos del beso Hanna y yo y de verdad que esto no me lo había esperado, teníamos mucha química, no lo quería reconocer y por eso éramos que estábamos todo el tiempo, discutiendo y llevándonos la contraria, por la tensión sexual que existía entre ella y yo.–Yo creo que mejor los dejo solos, estoy de más aquí – Nos dijo Janet.Yo estaba que le decía que sí, que no había problemas en que se fuera, pero sí lo había, Hanna, no me iba a dejar que le hiciera el amor, ayer me lo dejó muy claro, pero ahora sus ojos me decían otra cosa, estaba seguro que estaba excitada al igual que yo, sus pupilas estaban dilatadas.–No Janet, no te vayas, si apenas llegamos, es que Hanna y yo, no nos hemos visto en todo el día, apenas hoy en la mañana, pero no te preocupes.Dije para salir de la embarrada en la que me había metido, solo a mí se me ocurría querer molestar a Hanna, ella parecía haber disfrutado del dichoso beso, la veía y ella me miraba con lascivia sin disimular,
Hanna BeckerNew YorkJanet se quedó un rato más conviviendo conmigo y con Devin, era una chica muy agradable y me cayó bastante bien y parecía ser que, a ella, le pasó lo mismo conmigo, porque en ningún momento le vi ganas d quererse ir. Devin lucía bastante incómodo, no parecía sentirse nada bien, con la plática que se había dado entre su amiga y yo.Lo sentía mucho por mi esposo y por sus intentos infructuosos, por hacerme sentir mal. Nada parecía funcionar para él y todo estaba resultando bien para mí, para que aprendiera a no meterse conmigo.–Devin, mi amor – Volví a molestarlo – Ya que Janet está aquí, deberíamos invitarla a cenar. Claro sí ella acepta, por supuesto.–Gracias Hanna, yo encantada de quedarme – Respondió Janet – Sirve que, espero a que llegue Danielito, siempre anda por aquí y quiero por fin, decirle que, lo quiero y que siempre me ha interesado más que cómo un amigo.Yo me quedé callada, no sabía que Janet quería algo con Daniel, pero ahora que me estaba dando c