Matthew. Comprendo el enojo que tienen los demás hacía mi. Puedo aceptar hasta la ira del perro, pero no podría aceptar que nada les pasara. ¿Por qué no fui capaz de ponerle un alto a Camila antes? ¿Por qué seguí manteniéndola a mi lado? Cometí el mismo error con Catherine, pero a diferencia de ahora, Camila es una persona malvada y astuta. — ¿Qué fue lo que pasó? Aleksander, el hermano de Catherine, llegó a toda prisa luego del llamado de Mía para que revisaran las cámaras de seguridad. Aleksander me mira con desprecio y no puedo hacer nada contra eso. — Es tu culpa— dijo. — Tal vez— respondí sin ganas. — Le hiciste daño a Catherine con Camila y luego seguiste utilizando a ambas para alimentar tu ego. — No tengo la culpa de la locura de Camila, ella ya odiaba a Catherine desde hace tiempo. — Y tú lo sabías y aun así perseguiste a Catherine haciendo que el odio de Camila aumentara. Por fin había una expresión de Aleksander hacia mí. En estos casos hasta el hombre más serio
Catherine. ¿Qué es esta luz que empaña mis ojos? Me duele el cuerpo, siento como si estuviera vacía. — Cathy… Escucho la voz de Zack. Es como si estuviera desesperado. — Qué bueno que despiertas. Veo sus ojos azules cansados e hinchados, como si hubiese llorado toda la noche. — ¿Zack? Puedo ver ahora con claridad su rostro. Él aprieta mis manos suavemente. — Me alegro de que despiertes— dice con la voz temblorosa. — ¿Por qué lloras? - pregunto al sentir sus lágrimas humedeciendo mis manos. — Perdón Cathy, no pude hacer nada… dejé que te hicieran daño, si tan solo… — Zack, está bien. No llores. La sensación de vacío seguía molestándome, sentía como si me hiciera falta algo. De repente sentí una punzada en el estómago y me sobresalté al acordarme sobre lo sucedido. — Zack ¿Y mi bebé? Él no me dice nada y su silencio me incomoda. Miro mi vientre y mi bebé ya no está ahí ¿Qué le pasó a mi bebé? — No… no me digas qué. — Tranquila Cathy— trata de calmarme.
Matthew. ¿En qué estaba pensando cuando fui a dar la cara ante ella? Era obvio que reaccionara así, sin embargo, quería brindarle mi apoyo, quería que supiera que contara conmigo. Pero supongo que esta actitud la debí mostrar cuando ella perdió a nuestro hijo. Todo lo que haga ahora será irrelevante. No quiero verla sufrir más de lo que ya lo ha hecho. Quiero que sea feliz al lado de Zack y de sus bebés. — Sr. Matthew, usted también tiene que descansar, su herida fue profunda— habla Clara, quien está sentada en la sala de espera. Ella también ha pasado un amargo rato, afortunadamente los niños están bien. — Quería ver a Catherine— confesé— pero creo que mi presencia solo la molestó. — Es normal que reaccione así. — ¿Crees que ella pueda perdonarme algún día?Ella suspira y mira al techo — Creo que será difícil que lo haga— dijo con sinceridad. Cuando miré a Catherine inconsciente, lo primero que quise hacer es cargarla entre mis brazos, pero Zack se adelantó. Camila estu
Camila. Estando encerrada en estas cuatro paredes me doy cuenta de una cosa… Debí haber matado a Catherine cuando tuve la oportunidad. Estoy segura de que con el daño que le hice, debió perdido a su bebé. Lo que daría por ver su cara de sufrimiento y amargura. Quiero que sufra lo que yo sufrí todo este tiempo. Odio a Catherine con todo mi ser y la odiaré siempre. No me arrepiento de nada, yo tuve mis razones para hacer lo que hice. — Estás nerviosa, da las gracias de que no te llevarán a una cárcel. — ¿Crees que estar aquí me alegra? Eliot se queda quieto mirándome. — Este es el precio que debes de pagar. — No, me niego rotundamente. Él sonríe de forma maliciosa y se pone de pie. — ¿Has olvidado lo que me hiciste? Retrocedo varios pasos — Tú te lo merecías, yo solo me defendí. — Camila, aún tienes que pagar por lo que me hiciste— dice apretándome el cuello. — Suel… suéltame. Trato de quitarme su mano en el cuello. En eso entran los enfermeros y me auxilian. — Quite su
Zack. El sentimiento que pasé fue uno de los peores que he sentido durante toda mi existencia, después del suicidio de mi madre. Creí que nuevamente Dios me estaba arrebatando a algo que amaba. Catherine es la persona que me enseñó ese sentimiento que creí olvidado. También hizo que mi sentido de la vida cambiara.Nunca estuve seguro de formar una familia, pero ahora la tengo a ella y a nuestros hijos, aun así estuve a punto de perderlos. Si eso hubiese pasado, haría que Camila derramara lágrimas de sangre y que lamentara haber nacido. De hecho lo hará. Mi bella y preciosa Catherine, después de tanto llorar, se quedó dormida en mis brazos. Es una persona muy valiente. La amo y la amo más ahora, porque me dio la dicha de ser padre de dos mellizos. Juro por mi vida que haré lo posible para que estén bien. Ella empieza a abrir los ojos, sus hermosos ojos cafés me miran nuevamente y sé que es lo primero que me preguntará. — Zack ¿Y mis hijos? ¿Cómo están? - ella se exalta y trata
Zack. El médico me hizo a pasar a su consultorio. - El otro hombre ha venido hablar conmigo. - Entonces ya está enterado. - Sí... No soy una persona que se deja sobornar- respondió firme- pero, lo que le diré a la señora Catherine será verdad. Él abre un cajón y saca una carpeta.- Este son los registros de sus bebés- muestra un reporte. Tomo la carpeta entre mis manos y leo la información. Al ver que no tengo ninguna reacción me comienza a explicar. - Los mellizos están estables. Son niños muy fuertes. Me sorprendió al ver que estaban más grandes de lo normal. - ¿Entonces quiere decir que estarán bien?- En efecto... sin embargo, será solo por ahora. - Supongo que no han salido de peligro aún. - Como bien sabe, los bebés prematuros están expuestos a muchas cosas. Una mínima gripe podrá... Usted ya sabe. - Pero eso no pasará. Refuerce el cuidado, puedo pagar el personal necesario para hacerlo.- No es cuestión del personal. Cuidamos de forma minuciosa a todos los niños por
Catherine.Parece que poco a poco todo se está acomodando.Pienso que al fin mi camino se está despejando. Nada puede afectarme de ahora en adelante, tengo que ser fuerte por mis hijos. Todo este tiempo he pensado en mí solamente. Me dejé llevar por el dolor, que no tomé en cuenta a los demás. Mi calvario ha terminado. En cuánto mis bebés se recuperen, me tomaré un breve descanso para viajar en familia. Siempre he querido viajar al lado de Zack y vivir mil aventuras. Ahora no solo lo tengo a él sino a mis pequeños. Quiero vivir en familia, quiero verlos, crecer y jugar. Deseo casarme y envejecer al lado del hombre que amo. Un momento… ¿Estoy pensando en casarme nuevamente? Zack y yo nunca hemos tocado el tema. Sería lo más normal, pero ¿Él querrá? ¿Tengo que ser yo la que se lo pida? ¿Cómo debemos vivir a partir de ahora? Yo no puedo abandonar mi trabajo y dedicarme 100% a mis bebés y Zack viaja a menudo. No pensé en estos problemas antes. Claro que no le pediré a Zack que
Catherine. “El artista y actor, cuyo verdadero nombre es Zack Hollad, ha anunciado su retiro. Ya no se mostrará delante de los reflectores durante un tiempo indeterminado, pues el famoso Dorian ha decidido formar una familia con la señorita Clark” No habían pasado ni dos horas y la noticia rompió el internet.Muchos me culpaban a mí por su decisión llamándome mujer arrogante y celosa.Las personas se creen todos los chismes del internet y comienzan hablar pestes.Había comentarios en el cual resaltaba lo rara que era la relación de las personas adineradas.“¿Clark? Que alguien me explique por qué no entiendo. Primero la tal Catherine se casa son el hermano, luego este la engaña con la hermana y al final ella termina dándole hijos al hermano de su exesposo. Que raro lol, pero entiendo a Catherine, Zack es mejor que cualquier hombre, yo igual lo hubiera elegido.”“Es verdad. Tengo entendido que son gemelas. Hace mucho la otra estuvo involucrada en chismes porque dio a conocer públicam