¿Qué habrán planeado estas amigas? Mauro pasó de ser un invitado especial a una persona ignorada por mucha gente, ¿Qué hará al respecto? ¿Se retirará de la fiesta humillado o simplemente buscará ganar la atención de la gente?
SCARLETT ALLENMarcus y yo sonreímos en complicidad como si nuestro matrimonio fuera de verdad. Quien nos vea creerá que de verdad estamos enamorados, pero si tan solo supieran que solo somos dos locos fingiendo un amor real para que otras personas como ellos no arruinen nuestra reputación no se que harían. -Es la primera vez que bailamos juntos. Antes de bailar contigo me metí a tu cama- Lo golpearía por lo crudas que suenan sus palabras, pero se que no está mintiendo-No bailas mal, fue lo único que mi madre no pudo controlar. Se que cuando mis padres se casaron bailaron perfectamente, pero habían asistido a clases para eso- Me vió sorprendido y acabó riendo, todo era tan superficial...-No puedo creerlo. Nos hemos salvado entonces- Hice un gesto afirmativo y mordí mi labio para no reírme Dejé de prestarle atención a lo que cantaba Mauro. Contra todo pronóstico me estaba divirtiendo en esta fiesta, algo que creí imposible. Marcus puede ser bruto pero aquí se comporta como un cabal
MARCUS FERGUSONLa boda que podría resultar desastrosa acabó siendo divertida y memorable. Todos esos políticos estirados estaban bailando un ritmo que difícilmente fuera el suyo y su manera de hacerlo no hacía más que demostrarlo. Era demasiado divertido verlos intentar al menos. Ellos eran como pequeños títeres o marionetas creadas por ellos mismos, cuando una figura superior hacia algo ellos inmediatamente lo seguían. Dejé a mi esposa unos minutos para ir al baño. Ya había visto esa mirada en la distancia y sabía que debía hablar con mi padre sin levantar sospechas. El tema a tratar era mi hermano y no debía ser adivino para eso. Había podido leer lo que tanta popularidad ganaba con los días y me había quedado en shock, él de verdad detestaba a esa mujer. "Karma e Infidelidades" se titulaba esa obra que tenía como portada una mujer vestida de novia y demasiado triste. Lo que narraba él era como ella pasó de ser una desgraciada y m*****a mujer a una abandonada en el altar por su no
MARCUS FERGUSON Intento bajar la cremallera de su vestido aún teniendo las manos de ella sobre su cabeza y no puedo hacerlo. -Comienzo a odiar este vestido aunque te ves hermosa con él- Apoyo mi frente en la suya y me permito reír, el destino conspira contra mis ganas de quitarle la ropa -Deberías mirar como es antes de intentar quitarlo- Sugiere y se pone de espaldas hacia mi haciéndome ver qué tiene algunos pequeños botones además de la cremallera -Imagino lo apretado que debe ser, muy lindo pero también incómodo- Ríe y suelta el aire contenido cuando lo aflojo lo suficiente -La belleza cuesta y hay que hacer algunos sacrificios. Esto es normal para mí- La hago girar y miro como hasta su abdomen está al descubierto ahoraDecido evitar esta conversación que puede acabar arruinando nuestra noche de bodas. Me gustaría sacudirla para decirle que no tiene por qué sacrificarse tanto. Es una mujer hermosa, ¿Por qué intentar alcanzar una perfección que no existe? ¿A qué costo? Si tuvie
SCARLETT ALLENAl llegar al hotel donde finalmente lograría bajar mis defensas con Marcus, al menos las pocas que aún me quedaban a salvo... él se comportó hasta grosero con la amable gente que allí estaba esperando por nosotros. Se que no es más que protocolo, el mismo que tienen con cada huésped importante, pero podría haber sido un poco menos brusco y cortante. Cuando atravesamos a los empleados excesivamente amables y llegamos al elevador con uno de ellos, él solo lo ignoró como si no estuviese presente y me dió un beso cargado de deseo que casi hace que se me escape un gemido delante de aquel joven. Lo más divertido fue cuando llegamos al cuarto y el por poco y le cierra la puerta en el rostro a quien solo cumplía su labor de escoltarnos a la suite. Allí no tuve tiempo de ver la decoración, solo me inmovilizó contra la pared y comenzó a encenderme solo con pequeñas caricias y húmedos besos. No pudo quitarme el vestido ni al primer, ni tampoco al segundo intento, fue realmente g
MARCUS FERGUSONDesde pequeño fui el más travieso de la casa, mi hermano Vincent siempre fue más tranquilo y cuidadoso. No podría decir que fui un mal hijo porque estaría mintiendo, pero me gustaban las fiestas y estar rodeado de muchos amigos, contrario a mi hermano. De los dos siempre fui el que no moderó su lenguaje y escandalizó a mi madre cuando decía sin ningún tipo de filtro mis verdades. Vincent era más sereno y moderado, excepto cuando de Ángela se trataba, ella se había ganado su desprecio y él también se había ganado el suyo. Puedo jurar que mi hermano ama más a Rocky de lo que amó a alguna mujer en su vida. Sus relaciones han sido sin compromisos y tampoco es que el título de mujeriego encaje en su perfil. El es más bien el tipo de hombre que va de casa al trabajo y del trabajo a casa. El gran inconveniente que yo tuve respecto a mi boda, pero por sobre todo la luna de miel es que no podía traerme a Rocky conmigo, mucho menos dejarlo con mi madre porque ama demasiado la
NARRADORScarlett estaba disfrutando ese viaje, el frío destino que tanto la había impresionado ya que jamás hubiese ido allí por su propia cuenta, le había gustado. Marcus tenía maneras muy originales de sorprenderla gratamente. Él con su estilo tan relajado y desenfadado de ser estaba cambiando todo lo que conocía su esposa. El primer día que amanecieron juntos después de haber descansado algunas horas, ella fue a ducharse y procedió con su rutina de belleza y cuidado personal excesivo. Marcus comprendía que hidratara su piel, el cambio de clima tan brusco podría afectar negativamente su delicada piel, pero no entendía por qué debía cuidar tanto su peinado y maquillaje. -Dame eso- Estiró su mano y le pidió el brillo de labios que estaba por aplicarse Con confusión ella se lo entregó y el solo clavó su mirada en aquel set enorme de maquillaje. Con una sonrisa de lado extendió su mano hacia él. -¿Por qué querías eso? Estaba por ponérmelo. ¿Qué es lo que quieres ahora?- Le preguntó
El chocolate se derretía en la boca de Scarlett quien lo degustaba con placer, hacia tanto que no probaba su dulce sabor, ¿Cuando fue que comió uno por última vez? sabía que habían pasado años desde la última vez. Un chocolate no fue suficiente, pero ella creyó que partiendo el pequeño aperitivo en trocitos haría que se saciara y así se quitara el gusto de poderlo comer sin culpa. Tardaba demasiado en comerlo, pero aunque los sonidos de placer al inicio habían logrado que Marcus sintiera excitación, eso solo se había desvanecido. Scarlett comía con culpa, eso Marcus lo notaba, aunque se habían conocido en circunstancias complicadas y bastante locas dónde no estaban completamente en sus cabales, él había aprendido a conocerla. -Detente- Le pidió y arrebató esos pequeños trozos minúsculos del bocadillo- Dime que estás haciendo, estás arruinando este momento Scarlett solo se levantó dispuesta a volver al cuarto sintiendo aún más culpa, ¿Por qué había accedido? ¿Por qué se había dejad
Marcus comenzó a comprender todo lo referente a la boda, al majestuoso plan de Lía, Judith y hasta de sus propios suegros. Él conocía a mucha gente así no hubiese tratado con ellos, era algo que siempre le inculcó su padre. "Tienes que saber quién es quien en la vida y nunca olvidar nada". Hablar con esas personas poderosas sabiendo sus apellidos y demás fue un acierto. Allí donde estaban habían decidido no encender la televisión ni tampoco revisar redes sociales, solo acabarían leyendo lo que la gente especulaba sobre ellos. También acabaría sabiendo más de lo que debía y probablemente ella quisiera acabar la luna de miel para volver a casa. Ella no quería saber nada sobre Mauro y sospechaba que allí acabarían por descartar que hubo un romance entre ambos. Tenía bien en claro que la actitud de los invitados fue un duro golpe para aquel cantante y que probablemente por eso su carrera pasaría por un momento difícil. También estaba seguro de que la prometida que él tenía no estaría muy