Los datos estaban en la mesa, aunque Vincenzo no estaba al cien por ciento seguro, debía existir un parentesco con Alessio, había mucho parecido físicamente entre ellos dos, y también con su primo Ángelo y algún parecido con otros miembros de la familia.Esas fotografías en las diferentes etapas de crecimiento de Alessio decían demasiado, y aunque no llevaban el mismo apellido, definitivamente pertenecía a la familia Leonardi. Tenía tan marcadas varias de las características de los hombres de esa generación.— ¿Y ahora qué piensas hacer? Parece que estamos antes un gran descubrimiento.Aunque Kaia no estaba segura de cuál podía ser el vínculo de Alessio con su esposo, sabía que había una posibilidad muy alta de que fuera un familiar directo de su esposo. — Tengo que ir a hablar con el abuelo, no sé si él sepa que lo más probable es que tenga otro hijo. Por mi mente no puede dejar de pasar que Alessio puede ser mi tío o algún primo segundo o tercero. Pero me inclinó más a que puede ll
Vincenzo llamó al abuelo y este aceptó de inmediato la visita de su nieto, no se podía negar a atenderlo, si su nieto tenía un asunto importante que tratar, las puertas de su casa siempre estaban abiertas para recibirlo. Pero Alessandro sabía cómo era Vincenzo, así que no le dio vueltas al asunto y lo esperó.— Buenas tardes, joven Vincenzo. — Abrió la puerta Gael.— Buenas tardes, Gael, espero no estar interrumpiendo en verdad alguna actividad importante del abuelo.El abuelo tenía su horario de actividades, todavía continuaba frecuentando a sus amigos de sus épocas de presidente del conglomerado, no perdía su vivacidad, seguía realizando trabajos de asesoría a quien lo solicitara. Seguía ganando su dinero, aunque sus ingresos del conglomerado seguían llegando puntuales a su cuenta del banco.— No se preocupe, señor Vincenzo, el señor Alessandro ha terminado su sección en el invernadero y se encuentra en su despacho esperándolo.Alessandro había empezado a tener un gusto muy particul
De inmediato le llegó la imagen de Aurora a la mente, cuantos años había regresado al mismo lugar para buscarla, ella desapareció sin dejar rastro y aunque Alessandro había hecho todo lo posible por encontrarla, nunca volvió a saber de ella. Como si la tierra se la hubiese tragado, ninguna persona del restaurante supo decirle donde la podía ir a buscar.— Es bueno que ya tengas esa información, hijo, entonces esa mujer no va a poder hacer nada en tu contra. Si ese hombre al que mencionas es el verdadero padre de esa niña, tenemos que traerlo cuanto antes.Alessandro también quería que las cosas se apresuraran, pero su abuelo en verdad tendría que ver antes las fotos, para ver si él podía reconocer a Alessio y por supuesto a la mujer que aparecía con él en las fotos, Renato había mencionado que se trataba de la madre de Alessio y por supuesto que él llevaba el apellido materno.— El investigador el día de hoy me ha enviado unas fotografías, es el padre verdadero de la hija de esa mujer
Cuando abuelo y nieto ya habían analizado los pros y los contras de la situación, Alessandro optó por esperar la nueva información que le iba a proporcionar el investigador a Vincenzo, de nada servía si se iba a precipitar e ir en busca de Aurora para que le diera una explicación.— Tienes razón hijo, nada voy a ganar si pretendo ir hasta Fiesole a buscar a Aurora, solo te puedo decir que yo tuve todas las intenciones de formar algo sólido y verdadero con ella. Aunque en un principio siempre buscaba compararla con tu abuela, tenía el firme propósito de darnos una oportunidad en ese amor que había nacido.Alexandro no podía creer que Aurora había sido capaz de hacerle más caso a su orgullo que a su propio corazón, porque sabía que ella también lo amaba a él, habían pasado tantos lindos momentos juntos y por culpa de un malentendido ya no se pudo continuar.— Me doy cuenta de que todos en la familia somos muy devotos cuando de amor se trata.Él se encontraba perdidamente enamorado de su
Vincenzo regresó al ático, llegaba con una sensación de desolación en el pecho, pues se daba cuenta de que esa verdad le había hecho daño a su abuelo, aunque era una noticia muy alentadora para su caso, lo que había descubierto a través de Alessandro lo había dejado un poco abrumado.Su abuelo lo había pasado muy mal, se había vuelto a enamorar, pero las cosas no le salieron como él pensaba que saldrían. La mujer de la que se enamoró tomó una decisión que solo debían tomar los dos. Y desafortunadamente el que más había salido perjudicado fue Alessio. — Buenas noches, mi amor, ya tengo lista la cena, solo nos hace falta colocar la mesa. — Kaia se acercó y le dio un beso de bienvenida.Él seguía pensando en todo por lo que había pasado su abuelo, no creía poder soportar, estar separado tanto tiempo de la mujer que amaba, en su caso hubiera movido cielo y tierra hasta encontrarla. Pero sabía que si el abuelo en esa época se hubiese enterado del embarazo de Aurora, no hubiera tenido desc
Vincenzo le había mandado la información a Alessandro y este lo leyó de inmediato. Quería estar empapado de todo lo que le pudieran contar sobre Aurora y su hijo. Él estaba muy intrigado por todo lo que estaba pasando y pensar que él solo buscaba la información, sobre el padre de la hija de Martina y se vino a topar con todo esto, parecía increíble, que esto le estuviera pasando a él, era para no creerse.Ellos estaban dispuestos al diálogo y Alessandro iba a ir con la bandera de la paz, ellos no iban en busca de problemas con nadie, sino todo lo contrario, querían que las cosas, se dieran de buena manera para todos. Ya no eran momentos de reclamos y peleas, tenían que aprovechar lo que la vida les tendría preparado para el futuro. Era momento de mirar hacia adelante y dejar todo lo pasado atrás. Después de todo, era algo contra lo que nadie podía remediar ya nada.A la mañana siguiente Alessandro ya tenía todo listo y esperaba a su nieto con muchas ansías, a él se le hacía eterno el
Mucho mejor para ellos, ahora no se iban a demorar tanto en llegar a Fiesole, aunque Alessandro estaba dispuesto a quedarse en Florencia hasta arreglar un asunto que lo tuvo toda la noche despierto, y quería hablarlo con su hijo, él quería darle su apellido. Él quería tener una relación con su hijo y aunque no sabía cómo iba a reaccionar, nunca era tarde para poder estrechar un vínculo familiar y siendo ellos padre e hijo había altas posibilidades que eso se lograra.Sabía que eso iba a representar un dilema para todos, Alessandro le quería dar todo a su hijo, no importaba cuantos años habían pasado, por derecho propio le pertenecía lo que era de su padre. Además, él quería que se supiera ante todos que Alessio era su hijo, quería reconocerlo debidamente y que poco a poco ellos se fueran conociendo como padre e hijo que eran. Él no quería irse de este mundo sin al menos haber pasado un tiempo de calidad compartiendo y conociendo a su hijo.— Muy bien, Renato, eso está perfecto, llévan
Aurora se acordaba muy bien de una escena que fue la que la llevó a tomar definitivamente la decisión de no acercarse nunca más a Alessandro. Y aunque habían pasado muchas cosas en el pasado, lo cierto era, que ahora que lo tenía frente a ella, no podía negar que le provocaba mucho gusto el volver a verlo. Aunque Alessio le había pedido conocerlo cuando tenía siete años. Eso había sido muy normal en su hijo, pues todo niño, desde pequeño, siempre tiene la intención de conocer a su padre o a su madre según sea el caso.— Recuerdo que una vez había regresado a Florencia con Alessio en unas vacaciones, aun sabiendo que te podía encontrar. Mis padres me habían dicho que venías regularmente y preguntabas por mí. No te puedo negar que todo este tiempo, yo también tuve muchas ganas de saber de ti. Y en aquel tiempo, traté de encontrarte varias veces y no lo conseguí, la suerte no estaba de nuestro lado y no hacía que nos encontráramos cuando tú llegabas a venir a Florencia.Aurora varias ve