Mientras Andrew y Camila caminaban por la playa, de pronto él le dijo —Te amo, soy muy feliz a tu lado, apenas lleguen tus padres tenemos que hablar con ellos, sé que no será fácil entender que estas saliendo con tu jefe, pero estoy seguro de que podrán entender cuando sepan lo que siento por ti.

—¿Estás seguro?

—Claro que estoy seguro, nunca pensé volver a sentirme así con una ilusión, ahora estás aquí en mi vida, dulce, tierna, trabajadora, inteligente, sensual, muy sexy además de ser una diosa en la cama, disfruto hacerte el amor como no imaginas, disfruto quitar tu ropa, jamás me gustó tanto el helado de chocolate, quiero estar a tu lado para verte brillar y acompañarte en ese proceso, esta semana que viene vamos a trabajar mucho pero no quiero que nuestra relación sea impedimento para que me digas si necesitas algo, quiero que confíes en mí, además quería saber si estos días que tus padres estarán aún en el crucero quieres quedarte conmigo.

Camila escuchaba esas palabras ca