Capítulo 77 ¡Qué astuta eres mi viejita! ¡Debes estar riéndote de mí!Aún no termino Señor West—reclamo el notario—la señora Abigaíl Montiel, también hereda todas las joyas pertenecientes a la difunta señora Perla West, mencionadas en un anexo, por otra parte, es dueña de un capital en dólares depositado en una cuenta en esta misma ciudad, de la cual se anexan sus datos.— ¿Qué estás diciendo? Todo debe quedar, en manos de la familia, sus joyas, esta casa, su mobiliario, los cuadros de pintores famosos, una gran fortuna, todo queda en las manos de esta mujer, ¡no admito eso! ¡Mamá, no puede haberme despojado de la casa familiar y su contenido!—Anexo también se encuentra una certificación de la salud mental de la señora Perla West, por si usted quiere alegar la incapacidad mental de la señora —le señalo el notario con firmezaTobías, al escuchar eso, bajo la vista avergonzada. Siempre se avergonzaría de esa acción y que su mamá hubiera previsto eso lo hirió profundamente.—Además, le
Capítulo 78 Una visita Inesperada Zacarías estaba fastidiado, su trabajo se había acumulado y estaban saliendo de los asuntos pendientes. Tobías West retiró su oferta en lo relativo al proyecto de los italianos, entonces ellos volvieron a estudiar la de Zacarías, según sus representantes les pareció más atrayente. Zacarías entendió este movimiento de buena voluntad de Tobías West, como parte de un acuerdo de paz. En casa aún todos se estaban recuperando de la ausencia de la abuela Perla, ella indudablemente era el alma de la casa. Todo giraba en torno a ella, su ternura los abarcaba a todos y hasta el personal de servicio andaba muy deprimido y sin el mismo ánimo de siempre. A Zacarías especialmente le parecía que al llegar la encontraría, con su sonrisa de siempre y le parecía escuchar su voz y hasta sus bromas. No ayudaba en nada que Abigaíl, no pdiera dormir bien, y que cuando creía que no la veía, se detuviera en la puerta de su dormitorio contemplandolo todo y suspirando, inclu
Capítulo 79 ¿Estás aquí? ¿Qué haces aquí?— ¿Él está aquí? ¡Pero qué mala suerte! —exclamo Melisa, aunque no engañaba a Zacarías, sus padres se habían pasado su vida de casados y después de divorcio en una relación amor odio ya bastante fastidiosaTobías no esperó mucho para pasar, él se creía con derecho a entrar en casa de Perla como y cuando quisiera, sus pasos se detuvieron cuando vio a Melisa— ¿Estás aquí? ¿Qué haces aquí?— ¿Dónde más estaría, es la casa de mi hijo, mi nuera y mi nieto? —esa frase provoco una expresión de disgusto en Tobías, aún no tragaba a esa mujer Abigaíl—Ahora los tendré a los dos aquí metidos en casa, ¿Qué he hecho para merecer esto? — Se quejó Zacarías, mientras Abigaíl no sabía qué hacer, eran los padres de Zacarías «¿Cómo debía actuar? Qué hacer? ¡Sabía que no le caía bien a Tobías West! ¿Qué hacer ¿Cómo tratarlos? A este hombre no era fácil tratarlo»—Vine a hablar contigo Zacarías y a ver a mi nieto—aclaro Tobías aprovechando lo de la transferencia d
Capítulo 80 ¡No permitiré que ofendas a la mujer que amo! —He tratado de manejar esto con calma, pero considero que Nora ha creído que puede salir impune de todo lo que hace y no es así, lo he dejado pasar por ti, pero han sido varias cosas, y me canse—Zacarías comenzó a contarle a su padre lo que sabía, y lo último que había hecho Nora en complicidad con la niñera — ¿Le ordeno que hiciera algo en contra de Abigaíl o de Max? —Eso me dijo ella, y ella optó por algo más simple, que quizás impediría la participación de Abigaíl en el concierto —Pero crees en la palabra de la niñera, quizás lo hizo para que la perdonaras —No es eso en lo que debes fijarte, lo que debe llamar tu atención son las intervenciones de Nora en mi vida, saboteando mi relación con Abigaíl o dañando a mi hijo. Te imaginas si la niñera no tuviera escrúpulos y hubiese atentado contra la salud de Abigaíl o peor aún contra Max, a fin de evitar que Abigaíl participara en el concierto — ¿Qué interés tendría ello en
Capítulo 81 ¡Eres una mujer sin escrúpulos igual a tu madre! — ¿Te llamo Juliana? —Abigaíl, sin quererlo, había escuchado parte de la conversación, —Sí, ella llamó — ¿Y vuelves a salir corriendo cuando ella llama? —le pregunto un poco cansada — Escucha al parecer… Reinaldo volvió a tener una crisis — Y te llamo para que la consueles ¿Hasta cuándo Zacarías? —Entiende mi diosa, Reinaldo es mi mejor amigo, escucha si quieres vente conmigo, no tengo ningún interés en Juliana, ni en ninguna otra mujer — ¡Ella sí lo tiene Zacarías! —Abigaíl estaba molesta, Robín tenía razón, él debía dejar claro las cosas, no podía vivir con esa duda cada vez que él corriera cuando ella lo llamaba — ¿Quieres venir conmigo? —No lo creo prudente, sabes cómo son ella, Juliana y su mamá —Vas a ir conmigo, si me quieren allí, iré contigo como mi prometida, ya deben irse acostumbrando —En realidad… no sé—solo sabía que Zacarías no debía seguirle la corriente a esas mujeres, pero se trataba del Señor Re
Capítulo 82 ¿Todavía sientes algo por Tobías West?Zacarías deseaba complacer a Abigaíl, la madre de su hijo, y la mujer que amaba más cada día, así que dirigió esas palabras de consuelo a Reinaldo, con el propósito de que él se recuperara. Al salir de allí se dirigió a la sala de emergencia, y la encontró recostada en una de las camas, aun esperando por los resultados de la revisión médica— ¿Aún te duele el vientre?—eso lo tenía preocupado, deseaba no ver nunca más a esas mujeres—Ya estoy más calmada, dime ¿Qué paso con Reinaldo?—Está estable y más animado, no te preocupes, en realidad lo compadezco, él lleva una vida miserable, ha perdido su alegría de vivir, tuve que hablarle de nuestro hijo, no debe ser fácil vivir con esas mujeres—Hasta hace poco vivías pendiente de las llamadas de Juliana—le reprocho—Era más una costumbre el acudir a ella, cuando tenía sus crisis, Juliana actúa como una niña ante alguna amenaza de separación entre sus padres, por esa razón entra en crisis,
Capítulo 83 ¡Quiero estar contigo siempre!La expresión de Melisa se entristeció —Yo nunca lo he dejado de amar, ni a él, ni a mis hijos, siempre me he preguntado qué sería de mi vida si me hubiese quedado. Yo renuncié a mi familia por mi carrera profesional, y he tenido éxito, no lo niego, pero me siento vacía, siento que me hace faltan mi familia, no sé si valió la pena. Abi, tú eres muy joven, pero podrías responderme ¿Por qué no se puede tener todo en la vida?— ¿No te volviste a casar?—No vi la necesidad, deje mi hogar, a mi esposo y a mis hijos por mi desarrollo profesional, no tienen sentido tener otra pareja—Quizás otra pareja te hubiera apoyado—Ya te lo dije, sigo amando a ese gruñón y ese es mi castigo—Mi mamá renuncio a su carrera profesional para criarme, acepto todo tipo de trabajos, al principio vinculado a sus habilidades musicales. Más tarde, acepto cualquier empleo que nos diera para vivir. Ella estaba conmigo y me decía que eso la hacía feliz, aunque nunca dejo
Capítulo 84 ¡Entre tú y yo no hay nada!A la vista de Zacarías, su chica se veía tan preciosa con aquel vestido sin tirantes que llevaba ajustado a su cuerpo, resaltando su cintura delicada y sus pechos perfectos. Su melena brillaba bajo la luz de la luna, con el pelo recogido en un moño, dejando a la vista sus bellos hombros.Sencillamente preciosa, seguía pensando observándola y sintiendo que nunca se cansaría de esa vista, no importa cuánto durase allí parado.— ¡Zacarías! — La voz de su amada lo saco de su ensoñación —debes arreglarte se nos hará tarde— ¡No quiero salir de aquí! —se quejó, acercándose, llevándola hacia sí mismo y besándola con frenesí.— ¡Zacarías! —es tarde y nos esperan, Melisa y Robín y ya deben estar aquí, Santiago y Alexander ¿Recuerdas? Dijiste que deberíamos llegar allí todos juntos— ¡Lo sé mi diosa! —Abigaíl se puso nerviosa, él la miraba como embobado después de besarla—me arreglaré rápido— ¡Te esperaré en el salón!—Está bien mi amor—y seguía mirándol