A la mañana siguiente Diego fue al jardín a hablar con su madre, aprovechando que Sam se estaba dando un baño.
—Buenos días mamá, aquí reportándome para que veas que estoy bien.
Elaine miró a su hijo dudando.
—Enfoca bien la cámara, te quiero ver bien.
Diego desvió su mirada refunfuñando.
—Obedece Diego.
Él chasqueó los dientes.
—Como diga la general.
Diego enfocó la cámara como ordenaba su madre, cuando ella vió que estaba perfectamente se sintió aliviada.
—Y Sam?
—Se está duchando.
—Espero que cuides bien de él, recuerda que es como de la familia.
—Lo sé mamá.
Ambos siguieron hablando un poco más, Diego quería saber de su padre. Después finalizó la llamada.
Má
—Así es, por eso no creo prudente que os alejeis menos en tu estado, pero si insistes no te voy a detener.Sólo recuerda que un omega sin su Alfa es débil, si hasta ahora no te has topado con ningún lobo además de los que ya conoces es por el rey. Sin su protección no estarás a salvo, ese humano que trajiste no podrá protegerte porque es un simple humano.Sam se mordió las uñas convertido en un manojo de nervios, se sentía ansioso y estaba preocupado.No quería volver a poner en peligro a sus cachorros o no podría vivir más, pero tampoco quería volver con Alex. No siendo él como era.Era impulsivo, agresivo y perdía el control con facilidad.Si ya puso en peligro a sus cachorros una vez, quién le aseguraba que no lo volvería a hacer.Lo amaba, y mucho, no obstante sus hijos y su seguridad era
De nada sirvió que Alexander fuera a ver a la familia de Sam, no le dieron la información que deseaba.Si no fuese que ahora él estaba debilitado por haber forzado el celo de Sam, habría obligado a Eva que le dijera dónde estaba.Mierda,mierda,mierda.Alexander golpeaba el volante del coche, maldiciendo todo lo que le estaba pasando.No entendía nada, y se preguntaba.Porqué le hacían esto?Acaso Sam ya no le amaba?Aunque él sabía que no era el hombre perfecto, le seguía amando con locura.Cuando intentaba ser gentil y dulce con Sam hacía cosas que le sacaban de quicio, no podía estar tranquilo cuando sabía que alguien más quería tomar algo que era suyo.Joder!
Alexander quería seguir gritando y fulminándola como hace poco, pero la culpa podía más.Cada palabra que decía la matriarca era mucho más doloroso que cualquier puñalada, le golpe a en lo más profundo de su psique.No tenía ninguna forma de refutar todo lo que estaba oyendo, en el fondo sabía que la abuela de Sam tenía razón. Y eso le dolía más.—Por alguien como vos se sacrificaron todos?. Toda vuestra familia murió por protegeros, y no creo eso que dice Eva que la sangre de un Licaón está maldita. Vuestro hermano era un Licaón y fue uno de los lobos más bondadosos que ha existido en vuestra familia, él nunca abusó de nadie ya sea física o emocionalmente, lo contrario a vos.Alexander ya no pudo aguantar más, se arr
Ella le miró asombrada y confundida.No entendía cómo es que en tan poco tiempo ha pasado tantas cosas, y se culpaba por lo sucedido.—Es porqué no pude encontrar una solución a tiempo sobre el embarazo?—Tenemos que volver al mundo humano, en el camino te contaré todo con detalles.En este momento Sebastián no tenía tiempo de explicárselo ahora, deseaba que no llegar tarde.Temía lo peor por su hermano, no le agradó l que le dijo su esposa.Zhi, Ben y Sebastián fueron al mundo humano cruzando el portal mágico que separaba el mundo de los lobos, con el de los humanos.El cruzar la barrera no tomaba tiempo si iban por el camino de la familia real, sólo tomaría unas horas llegar.Pese a su velocidad era más peligroso, ya que sólo los lobos poderosos podían cruzar por ese camino.La
Ella dejó de tomarse su taza de té, lo puso en la mesa y dijo.—De todos modos pensaba verla, hay algunas cosas que quiero conversar con ella.Sebastián sonrió emocionado ya que significaba que Zhi iría con él.—Genial, en una hora nos iremos a México.Zhi se levantó asombrada.—Porqué tan rápido?—No es obvio? Si mi lindo hermanito se levanta querrá ir con nosotros y eso no es bueno. Por lo que me dijo Lumier no creo que a la matriarca la vaya a hacer mucha gracia que Alex vuelva a sus tierras.La vieja Zhi se quedó en silencio pensando.Sebastián acercó su rostro mirándola fijamente.—En qué piensas vieja?—En nada.Él la miró sospechando de su repentino silencio.Más tarde Sebastián ordenó que Ben preparara el a
Ireri asintió.—Entonces estaba en lo cierto.Estuve meses buscando algo que me pudiera guiar hasta pensé en utilizar las hierbas de Asclepio pero nada, no obstante lo único que encontré es que los lobos de tu manada podían hablar con las almas de los cachorros para saber si seguían vivos, por eso vine aquí para probar mi teoría.—Nos puede decir dónde localizar a Sam?—intervino Sebastián con mucho cuidado para no hacer enfadar a Ireri.Ya vió de lo que era capaz cuando se molestaba.—... Aunque no me gustaría que tu hermanito se acercara nunca más a mi nieto no puedo impedirlo, al fin y al cabo es su alfa. Pero espero que ahora que estás a su lado procures que se comporte como tal, no quiero que maltrate a Sam ni a sus hijos o te juro que soy capaz de todo, serás el responsable de cualquier cosa.Sebasti&aac
Después de todos los preparativos que hizo Eva, Yuki fue a la ciudad de México a recoger a Sam y Diego.Al llegar a dicho lugar, Sam se sorprendió por la persona que le estaba esperando.A él no le caía mal Yuki, pero tampoco es que fueran mejores amigos.Él siempre le había visto como un perro faldero de su madre, sólo le importaba ella.Sam miró a Lupe sin entender qué hacía él en este lugar, no obstante Lupe no dijo nada.Sólo a Yuki le correspondía hablar del viaje.Diego no fue la excepción, estaba asombrado del invitado que estaba en frente de él.A diferencia de otros miembros de la familia de Sam, Diego nunca vió a ningún miembro de la manada de Eva, sólo a Daniel y Damián.—Yuki qué haces aquí, te mandó madre?Para la desgracia de Sam, Yuki no resp
El pueblo de shirakawa-go era hermoso, parecía sacado de otro mundo. Estaba rodeado por la naturaleza, el aire era mucho más fresco y limpio gracias a la barrera que la rodeaba. Las casa eran pequeñas con techos triangulares, pese a que era de noche se podía ver el hermoso paisaje, gracias a la luz de la luna. El lugar era tranquilo silencioso, hasta pareciera que no hubiera nadie. Sólo se podía oír el sonido de los insectos. —Será mejor que vayan a descansar, Sora y yo nos encargaremos de vuestras cosas. Sam seguía dormido en los brazos de Diego, Lupe estaba callada, Yuki observando, y a Sora le dió sueño otra vez. Se sentía aburrido sin nada que hacer. —Puedo brindarles mi ayuda—dijo Lupe. La habían dejado a Sam a su cuidado, ella debía velar por él. —Yo también—intervino Yuki. Esta vez quería hacer bien las cosas, ya le había fallado a su madrina antes. Esta vez iba a ser diferente. —N