-Hiciste mucho por mí, me diste un hogar, protección…tomaste justicia para mí y mi bebé…y sin reparo dijiste que Cristina es tu hijaAlfonso abre sus ojos y se encuentra con la sonrisa de Cecilia…-¿Cómo estás?-Cansado, pero feliz de verte, aunque me preocupa que te contagies…-Estaré bien, recibí la vacuna además de que cuando era niña sufrí la viruela…-Cecilia…-Alfonso, gracias…El hombre da una sonrisa antes de besar la mano de Cecilia…-No quiero que me guardes luto eterno…-No creo que vuelva a casarme – dando una sonrisa – todo hombre que me pretenda solo lo hará por el título de rey…-Hay uno que te pretenderá por quién eres – Cecilia apenas mira-Alfonso, sabes bien que yo…-Lo sé, hazlo sufrir un poco, que demuestre ser digno de ti…Cecilia da una sonrisa.-Te di las herramientas para vengarte de Isaac y Ana, serás la reina madre y tu poder será grande…-Pero…-Además, me di cuenta durante ese tiempo lejos de ti, que Isaac será un idiota pero te quiere…-Solo porque seré l
-Hijo…-Madre ¿Qué pasa?-Doña Cristina está de regresoIsaac queda en shock…-Madre…-Ahora que ella está de regreso podrás acercarte como su padre que eres…-Madre, basta esa niña es hija de AlfonsoJimena apenas baja la cabeza.-Además no creo que pueda ir a la coronación de Cecilia como reina, ni mucho menos a la proclamación de Cristina como princesa heredera-Hijo, hasta ahora Doña Cecilia no ha dicho nada-Además está otra cosa- ¿Qué cosa hijo?-La infeliz de Ana…estoy segura de que ella trajo la viruela al palacio de Balón – frunciendo el ceño-Isaac…-Madre, papá estaba bien hasta que Ana empezó a insistir en salir a comprar comida…Jimena queda en shock…-No puede ser…-Claro que puede ser…La puerta es tocada, la ama de llaves se dirige a abrir cuando ve a un grupo de hombres bien vestidos y con portafolios en sus manos, la joven llama a Jimena e Isaac y ambos quedan en shock, al enterarse de que son acreedores, que van por una sencilla cosa, para cobrar la deuda de Javier
Los días fueron pasando, Cecilia llevaba bien las riendas del reino, y varios hombres se le han acercado para pedirle matrimonio, pero ella los rechaza porque sabe las verdaderas intenciones de esos sujetos…solo quieren el título de rey y que sus familias sean las más poderosas del imperio…Y mientras sigue con sus labores de reina, recibe la visita de Carlos, aunque ella podría negarse a verlo, lo hace pasar, y el hombre es recibido con hostilidad, porque para toda la corte de la joven reina, él es un hombre despreciable, así que Carlos se acerca al trono y se coloca de rodillas, Cecilia simplemente lo contempla…-Hija…-Ahora soy su hija ¿Qué desea conde de Baleztena?-Eres reina de España…pido perdón a su majestad- ¿Perdón? – empezando a reír – no sé para qué pide perdón, si usted mismo lo dijo, no tiene hijas, ¿Dónde está su adorado hijo?-Murió por la viruela…al igual que Sofía…-Dios castiga de maneras increíbles ¿verdad?Carlos queda en shock, pues se ha dado cuenta de que su
-No, pero quiero pedirle a vuestra merced me conceda su mano en sagrado matrimonioTodos dirigen una mirada a Cecilia, quien apenas mira a Isaac.-¿Acaso, escuché bien? ¿me estás pidiendo matrimonio? ¿no bastó la humillación que pasó tu madre ayer?-Mi madre no supo pedirlo, yo – hincándose en el acto – quiero pedirle a su majestad que me conceda la dicha de ser mi esposa-¿Por qué? Acaso ¿quieres los privilegios que te confieren al ser rey?-No, te quiero a ti…- ¿A mí? – empezando a reír – Isaac Escalante, no seas tonto…tú no quieres a nadie que no seas a ti mismo, eres un egoísta…un superficial, un hipócrita y un maldito…-Puedo aceptar cualquier insulto, su majestad pero si eso asegura que usted me acepte…-Ya sé, te dijeron que Cristina es tu hija y quieres verla ¿verdad? ¡pues qué equivocado estás! ¡mi hija es de mi difunto esposo!Isaac queda en shock.-Nunca me casaría de nuevo con quien desgració mi vida…¡me arruinaste por cinco mil reales! ¡no te importó arruinar mi vida, mi
- ¡Te hice mi esposa porque me prometiste el dinero de tu familia! ¡y resulta que estás en la ruina! ¡¿Qué mierda?! ¡arruiné mi matrimonio y mi hija está creciendo sin mí por tu culpa!- ¿Tu hija? ¡¿acaso la bastarda?!- ¡Cállate! – volviendo a golpear a Ana – ¡nunca vuelvas a llamar a mi hija de ese modo! ¡¿te quedó claro?! ¡ahora largo de mi casa!- ¡No puedes correrme, soy tu esposa!- ¡Cecilia era mi esposa y estaba esperando a Cristina cuando la eché de esta casa! ¡largo o te saco yo mismo!- ¡Atrévete a sacarme!-Con gusto – y así Isaac se acerca AnaIsaac toma a la mujer del cabello y la arrastra por toda la casa, hasta que la saca a la calle y la arroja como un perro – ¡Isaac!-Solicitaré la anulación, ¡me tienes harto!- ¡Isaac! – pero Isaac cierra la puerta en la cara de Ana – ¡maldito!-Hijo…-Mamá…no quiero que me molesten-Hoy vienen los acreedores-Que vengan mañana, no tengo tiempo para nadie……-¿Qué has dicho?-Su majestad, el vizconde Escalante será echado de su casa
-¿Qué has dicho?-Doña Cecilia viuda de Belmonte, le exige que controle a su esposa…Isaac apenas suspira – ¿Qué hizo Ana ahora?-Ir a importunar a su majestad…-Hablaré con ella, por favor envié mis sinceras disculpas a la reina y a Doña Cristina…El alférez real se marcha, e Isaac envía a uno de sus esclavos a buscar a Ana, cuando la encuentra el esclavo la lleva hacia la mansión Escalante, Ana cree que Isaac le rogará para que vuelva, pero al llegar lo que recibe es un golpe que la hace caer.-¡¡¡Isaac!!!- ¡¿Cómo te atreviste a importunar a Cecilia?!- ¿Quién te dijo?-Don Diego vino a decirme de tu espectáculo barato – Ana queda en shock- ¡Solo lo hice porque me negó ir a ver a la bastarda!- ¡Deja de llamar así a Cristina!- ¡Entonces si es tu hija!- ¡Claro que es mi hija! – Ana da una sonrisa siniestra-Voy a correr el rumor, de que esa perra parió una bastardaPero Isaac la toma del cabello, la lleva hacia el tronco y la ata – ¡Isaac!-Si hablas – mientras le es entregado un
-Vizconde Escalante, mejor viva para reparar sus faltas y restaurar la reputación de su familia…-Por favor Don Diego, quiero ver a mi hija…-Mi sobrina no es tu hija, ella es hija de mi hermano y Doña Cecilia – viendo llegar al médico real – ¿Qué pasa?-Don Diego, es requerido en los aposentos de la reina madre- ¿Qué le sucede a mi cuñada?-Se desmayó en el jardín real…Diego e Isaac quedan en shock, y el alférez real se dirige a toda marcha hacia la habitación de Cecilia, quien está en cama, siendo cuidada por sus doncellas, mientras que sus esclavos están preparando un té para dar a su señora…-¿Qué sucedió?-Don Diego, Doña Cecilia se desmayó mientras daba su paseo habitual con su alteza real…-Debe ser que todo este trabajo le ha causado cansancio…El médico real llega y cuando Cecilia despierta es examinada por este, a Diego se le ha pedido retirarse por un momento, al poco el médico sale y da una reverencia al alférez real.-Don Diego…Dios nuestro señor ha bendecido a Doña Cec
-Vizconde Escalante – recibiendo toda la atención de Isaac – venga conmigoIsaac sigue a Cecilia, todos miran expectantes la situación, Alejandro se queda para calmar a los invitados y decirles que dado que ese asunto concierne a su majestad y al vizconde, entonces ellos deberían hablar, cosa que todos creen.…-Majestad…-No es posible, tú heriste a Fernando en el cuello…-Seguramente sus padres encontraron apoyo en esa familia – frunciendo el ceño- ¿Qué querrá ese hombre?-El marqués de Alba, ser rey, Fernando en vengarse…Cecilia, cuida de Cristina y cuídate tú también…Cecilia apenas mira a Isaac – yo cuidaré de ustedes, pero no es bueno que andes sola-Lo sé, para eso están Santiago y Felipe, y sobre todo tengo la guardia real…Isaac asienta, antes de hacer una reverencia y marcharse……-¿Y bien? – diciendo con voz ronca y distorsionada…-Creo que los he asustado, aunque…- ¿Qué pasa? – mirando fijamente al hombre-Ni pienses que te ayudaré a lastimar a su majestad- ¡¿Cómo te at