Malú- Bueno... voy al baño, chicas, ahora vuelvo... - dijo Lorenzo mientras se iba.- Vaya María Luiza, tenías la mejor cara cuando me viste... ¿o debería llamarte mosquita muerta? Uy... creo que no. Porque no tienes nada de tonta. Comiendo por los bordes y haciéndote la virgen, te llevaste la mejor pesca de la ciudad. Y no sabes cuánto te odio por ello, cretino. -dijo Rebeca, sentándose a la mesa y mostrando su verdadero rostro.- No vales nada, ¿verdad? ¿Por qué te has liado con el hermano de Vincenzo? ¿Qué quieres o esperas conseguir después de todos estos años, Rebeca? - pregunto lleno de odio y ella responde de forma siniestra- Cuando me lié con Lorenzo no sabía que era el hermano de Vincenzo. Pero luego lo descubrí. Me gusta mucho, Maria Luíza, y mi vida ya no es lo que era... ¡Lo juro! - dijo ella.- ¡Vaya, qué santa! A lo mejor hasta consigues un altar en casa de muchos idólatras gracias a este milagro. ¡Dame un respiro! Una vez naja, siempre naja. Hay cosas que no cambian y
VincenzoDespués de que el gilipollas de Marcus saliera de mi despacho, no pude pensar en otra cosa y lo único que necesitaba era resolver toda la maldita situación lo antes posible. Mi secretaria ordenó el desorden de mi despacho mientras yo intentaba respirar un poco y mentalizarme.Todavía no podía creer que todo esto me estuviera pasando a mí y que mis malas acciones del pasado volvieran con toda su fuerza, haciéndome pagar por todo el daño que había causado a tanta gente. Pero ahora todo era mil veces peor, porque antes estaba solo y podía correr todos los riesgos. Hoy no es así... Tengo hijos, una mujer y una familia a la que prometí cuidar, proteger y alejar de todo mal. ¿Pero cómo voy a hacerlo sin decírselo a Malú? Desde que estamos juntos nunca he podido ocultarle nada y ahora me pasa esto."¡Qué mierda!"Estoy perdido, confuso y por primera vez no sé qué hacer.Unos minutos más tarde mi habitación estaba completamente en orden, pero yo seguía nerviosa, agitada y ansiosa. Co
VincenzoSalgo de mis pensamientos con la voz de Malú.- ¿Lo juras, amor? Vaya, justo hoy quería salir de casa y disfrutar de nuestra familia. - Pero, ¿qué hago ahora? ¿Lo cancelo o lo dejo para otro día? Tus padres se pondrán tristes.- Y ahora deberías habérmelo dicho antes, así habría reservado otro día con el cliente. Pero ahora no puedo cancelar, amor... - DijeDespués de tantos años era la primera vez que le mentía, pero no podía decirle la verdad, estaría demasiado asustada y preocupada y eso es lo que menos quiero ahora. Abrirme solo la haría pensar de nuevo en el pasado, ese pasado que solo la hizo sufrir por mi culpa.- "Bueno, es una pena, amor... pero está bien, lo aclararé con tus padres. -dijo ella.- No lo canceles, amor. Te diré algo: tú ve con los niños y con Lena. Y en cuanto me haya librado de este lío, vendré a recogerte. ¿Te parece bien, cariño?- ¡Muy bien! No hay manera de evitarlo, ¿verdad? Iremos sin ti y tus padres se alegrarán de volver a ver a los niños. Ya
VincenzoCuando todos estuvieron listos, salimos de casa. Llevé a Malú con Lena y los niños a casa de mis padres. Entré y hablé con ellos brevemente, explicándoles por qué no podía quedarme. En realidad estaba haciendo algo que me juré a mí mismo que no volvería a hacer: mentir.Intentaba convencerme de que era lo mejor y de que todo lo que hacía era para protegerlos. Pero en el fondo sabía que mentir nunca sería la mejor solución para nada en esta vida. Pero, ¿qué podía hacer? Estaba asustada, literalmente me ponían contra la pared y me acorralaban porque ese pedazo de mierda de Wern pensaba que podía obligarme a ayudarle sólo porque una vez había sido como él.Es duro decirlo, ¡pero sí! Una vez fui como él. Cruel, dominante, obsesivo, frío y capaz de cualquier cosa para conseguir mis objetivos. No importaba a qué o a quién tuviera que enfrentarme, lo atravesaría como un tractor para conseguir lo que creía justo y lo que me beneficiaría de alguna manera.Pero he cambiado. He cambiado
MalúEn cuanto llegamos a casa, llevamos a los niños a su habitación porque se habían dormido. ¡Lo cual es prácticamente un milagro! Sin embargo, como se habían divertido tanto y habían jugado con Lorenzo, no era de extrañar que acabaran cansándose y dándose la vuelta enseguida. Lena nos ayudó y las metimos en sus camas. Las dos ordenamos a las niñas y les pusimos el pijama, mientras Vincenzo se ocupaba de Ravi. Esta vez lo hizo muy bien y no fue tan complicado como antes, cuando intentó ordenar a las niñas. Tal vez porque Ravi estaba dormido y también porque era un niño, todo fue un poco más fácil. Sin embargo, eso es lo menos importante ahora. El hecho es que Vincenzo es realmente un hombre diferente y se esfuerza por mejorar cada día. Esto me hizo muy feliz y aún más segura de que había hecho la mejor elección y decisión al aceptar su amor... su cambio y formar así una hermosa familia a su lado. Lo amo y soy la mujer más feliz del mundo a su lado. Pero sé que algo le preocupa. A lo
VincenzoDespués de que mi pequeña me despertara, me levanté casi gateando y me di una ducha para despertarme de verdad. Luego me preparé para darles un paseo por el centro comercial, como ella me había pedido, o mejor dicho, como sus hermanos habían intercedido. Esta niña, con su forma de ser cariñosa y dulce, llegará lejos y conseguirá fácilmente todo lo que se proponga en este mundo. Salí del dormitorio y fui directamente a la cocina. Allí encontré a Malú, que estaba tomando café con Lena.- Buenos días, maravillosas señoritas... - Dije, dándoles un beso a las dos.- Hum, hoy se ha levantado usted muy bien, ¿verdad, señor Torricelli? - preguntó Malú.- Digamos que sí, señora Torricelli... Me he despertado renovado, pero digamos que he tenido mucha ayuda para lograrlo. - Le guiñé un ojo y Lena asintió sonriendo -¿Estáis todos listos para dar un paseo? - pregunté con una sonrisa que fue rápidamente cerrada por la respuesta de Malu- Lo siento amor, pero tendrás que ir sola con los ni
VincenzoDespués de comer, Lorenzo y yo llevamos a los niños a jugar un poco más en un lugar del centro comercial que era como un parque infantil. Nos sentamos en un banco frente a ellos y, mientras jugaban bajo la supervisión de los ayudantes que trabajaban en el centro comercial, charlamos un rato. Mi situación era cada vez más difícil y si no hablaba de todo lo que me pasaba con alguien estoy segura de que muy pronto me daría un infarto.- Dime, ¿cuál es el problema, amigo? Parece que es algo serio, si no, no estarías tan callado. - Me preguntó.- El problema es mi pasado Lorenzo... mi maldito pasado ha vuelto para atormentarme. Eso es lo que está ocurriendo para mi desgracia. ¿Lo entiendes, hermano? - Dije y él abrió mucho los ojos, asustado por lo que estaba oyendo.Respiro hondo y continúo.- Estoy siendo amenazado por un bastardo que una vez fue mi cliente y ahora es dueño de todo lo que tengo. Simplemente estoy en un callejón sin salida y no sé cómo salir de este lío en el que
MalúDespués de que Vincenzo se fuera al centro comercial con los niños, fui al orfanato con Lena y mi suegra? Siempre que pueden, me acompañan en estas visitas, lo cual está muy bien porque me hace sentir bienvenida, ya que no puedo decir lo mismo de mi propio marido. Vincenzo no sólo no me apoya en estas iniciativas benéficas, sino que además intenta insinuar que sólo hago todo esto porque no puedo superar lo de Lohan y porque aún siento algo por él. Y por si toda su obsesión con mi pasado no fuera suficiente, por supuesto antes de irse se las arregló para crear una aventura y problemas entre nosotros con sus palabras bastante inapropiadas, por no decir otra cosa....Lo peor es que esto casi siempre pasa cuando digo que voy a hacer alguna obra de caridad.... No porque no le guste que ayude a la gente, sino porque piensa que cada vez que lo hago le recuerdo a Lohan y se pone celoso.... Pero ¿cómo no me voy a acordar de mi perfecta jequesita?Lohan se pasó la vida ayudando a la gent