Micaela Stevens
El auto lo dejo afuera mal aparcado y corro, no hay vuelos próximos a la Vegas, solo uno dentro de cinco hora y es demasiado tiempo, así que pregunto por cualquiera disponible a los Estados Unidos, ya allá veré qué hago, la chica me dice que hay uno a punto de salir para Oregon con asientos disponibles, pago y corro para abordar, no tengo maletas así que el proceso es sencillo... No dejo de ver a mi alrededor pero no veo nada fuera de lo normal, aunque para mí ya nada en este mundo lo es... No después de saber todo... Dios! Podrían matarme por saber eso.... Aunque seguro me pasen por loca! Cuando el avión despega siento alivio por fin, lo logré, logré salir de allí con vida... Ahora debo esconderme... Descanso las horas de vuelo y como todo lo que la azafata me ofrece, no lo había notado, pero tenía un hambre de muerte.... Recuerdo mi teléfono y tiemblo al ver que tengo setenta y tres llamadas perdidas de un numero privado... Uñas no tengo, así que comienzo a morder mis dedos... Vendrá por mi... Lo sé... Pienso, pienso y pienso, votaré el teléfono al llegar y tomaré varios vuelos a otras partes... No sé.... ¿Cómo rayos te escondes del Alpha supremo de los hombres lobos? Cuando por fin aterriza, estoy temblando, no he bajado aún y de alguna manera lo siento, busco a mi alrededor y mi cuerpo siente su presencia... Pero no lo distingo entre las personas, creo que estoy enloqueciendo... Saliendo para tomar un taxi varias camionetas negras se toman el lugar haciendo que todos corran... Lo sabía. Ya no viste el traje negro, ahora tiene pantalones de bolsillo, con una franela y botas militares, siempre de negro, está vez puedo ver qué tiene tatuajes en sus brazos. Está sonriendo y juro por Dios, que quisiera darle una bofetada para quitarle su m*****a expresión burlona. Hay hombres vestidos de negro en todos lados rodeandome como si fuera una clase de criminal. Me doy cuenta de que me he quedado paralizada cuando camina hacia donde estoy, en sus manos tiene un rosa roja que me tiende al estar frente a mi... Lo ignoro, hará falta más que una estúpida rosa, tendrá que hacerme un lavado de cerebro para hacerme olvidar el mal rato que he pasado por su locura. — Para ti, preciosa. Bufo, Tomo ala estúpida rosa y la pisoteo tal cual loca maniática, la hago trizas con mis pisadas una y otra vez... Descargo mis frustración con la rosa que ya dejó de ser hermosa, grito, lloro y pataleo! Estoy respirando agitada mente cuando terminó y el solo me ve con el ceño fruncido y brazos cruzados. — Espero hayas descansado en el vuelo y te hayas desahogado asesinando a la pobre rosa que no tenía culpa de nada. — Aunque imaginé que eras tú en el suelo no tuvo el efecto que tendría el patearte de verdad. ¿Porque no me dejas en paz? Sonríe y niega. — Me perteneces.... — No te pertenezco maldito loco!!! Toda la diversión desaparece de su rostro y se acerca a mi de forma amenazante — Debes aprender a respetarme si queremos que esto funcione... ¿De verdad? — Así como me has respetado tu!!!!? De verdad tienes un serio problema!!! — Empezamos con el pie izquierdo, eso no quiere decir que podamos cambiar... Me presento de nuevo... Soy... — Eres un loco!!! Un puto loco desgraciado!!!— lo interrumpo y camino hacia la camioneta de la cual se bajó, es obvio que no podré escapar! Y estoy agotada! Subo y cierro la puerta tras de mí. Veo como hace señas para que los veinte hombres que bajaron como si yo fuera la loca suban a los autos. Se sienta a mi lado y lo ignoro... De alguna manera escaparé, juro por mi vida que lo haréBaltazar Licaón— Señor! La señorita Stevens está escapando — Uno de mis guardias entra interrumpiendo la conversación con mi prima y su esposo.Stefany bufa y se ríe — No es para menos! Debe pensar que estamos locos.Aspiro el aire y lo suelto para contenerme de correr tras ella y traerla de los cabellos arrastras.— Como procedemos señor? — Déjenla ir, pero siganla sigilosamente, le daré tiempo de pensar, de seguro irá a su apartamento... — Doy la indicación.—Ummm... Micaela es inteligente, con lo asustada que debe estar intentará irse más lejos que eso. — No huira de mi, sabe que es mi Matte... — Ah! Se lo dijiste... — se carcajea y Edward niega tratando de no seguirla — después de que la tratas como criminal le dices que es tu pareja destinada, definitivamente.... Careces de lógica sentimental.— ¿Pues que querías que hiciera? Es una humana! — Y dale con lo de humana!!! Por la reina luna ya deja de ser tan orgulloso y ególatra! Ahora entiendo porque la reina luna la puso en t
BALTAZAR LICAONRecibo el aviso de que ha llegado por el auricular, necesito que sepa de mis alcances para que no intente huir de nuevo, por eso armó un show con varios hombres de mi manada.La observó mientras sale viendo hacia todos lados, ella ya sabe que estoy aquí. Veo su vestimenta y luce aún más niña de lo que realmente es. Tal vez si me propase un poco.Cuando las camionetas frenan llamando su atención me bajo y su expresión de pánico me retuerce el pecho, para mí sería más fácil tomarla por los cabellos y obligarla a irse conmigo.Pero no quiero asustarla más de lo que ya está! Veo hacia el cielo... Reina luna!!! Me la pusiste difícil! Le tiendo la rosa y veo como descarga su ira contra ella, en mi mundo una loba me hubiera amado solo con olerme y se hubiera sentido orgullosa al ser la destinada del Alfa supremo, la futura Omega de la manada, pero no.... Me toca una niña loca que pisotea una y otra vez la rosa con la que trato de resarcir lo que hice.Espero a que descargue
Micaela StevensDios querido! Este hombre es... Es... No sé cómo describirlo.... El jet se encuentra lleno de rosas rojas como la que destroce en la entrada del aeropuerto y además hay chocolates de todos los tipos en un pequeña mesa... Veo que está observandome y le devuelvo la mirada inquisidora, es obvio que es algo nuevo para el, joder! Me está dando ternura su expresión de cachorro con falta de atención.Razca su cuello — Lo chicos me dijeron que a las humanas le gustas la flores y los chocolates, no se que tipo de chocolates son de tu agrado así que... Te mandé a traer varios, no me gusta mucho el dulce, pero....aquí hay blancos, de leche, con arroz, maní, también hay varias marcas — Niego y giro mis ojos... Mi vida se ha convertido en una loca montaña rusa! — Gracias — le digo y camino a la mesa donde están los chocolates — me gustan muchos los chocolates — No es un gusto que me daba seguido pero si comía cuando me provocaba.Ve hacia arriba y me hace sonreír — gracias rein
Me siento y espero a que vuelva, pero aterrizamos y sale del baño cuando la puerta de salida comienza abrirse.Me ignora y aunque me causa algo me molestia prefiero eso por ahora. No me dejare follar así nada más porque si.Parece que todo lo que nos rodea es selva ya que no veo edificaciones cercanas. Y me refiero a una gran selva salvaje, ya que por más que busco en las lejanias solo se ven montañas tras montañas. — Este es tu nuevo hogar, está es una pista privada del complejo y es la única manera de entrar o salir — me dice antes de guiarme al asiento copiloto de una enorme camioneta rústica.Oh Micaela! Acabas de llegar a tu prisión! Te lo acaba de decir en la cara! Sube para manejar el colocandose unos lentes aviadores, muerdo mi labios al ver el espectáculo que este hombre me ofrece, mis hormonas se revolucionan por semejante Adonis.Pero comprimo mis deseos impuros y me dispongo a observar el paisaje, no puedo ceder tan fácil solo porque está como para comérselo.Estoy en un
— Bienvenida Luna, no sabe cuánto nos alegra tenerla en la manada — su voz es amable.Mis ojos se abren sin saber que decir ¿Luna? asiento — gracias! — Por la reina luna!!! Es una niña — me sobresalto ante el grito y una señora mayor se me acerca.— No mamá, ya es mayor de edad... — Baltazar se coloca a mi lado y me sorprendo aún más al saber que la que ha hablado es mi suegra.— Bienvenida mi niña! No sabes lo felices que somos al tenerte aquí — Es muy hermosa, su cabello negro luce un bello peinado y viste un vestido recto beige, me da un fuerte abrazo y no se que decir... — mi nombre es Alexandra de Licaón.— Gra... Gracias.... Yo soy Micaela, es un gusto conocerla — veo a mi acompañante para que me ayude, no esperaba algo así... Y estoy sobrepasada. Hace poco que se de todo esto y el ser recibida como si ya fuera la pareja oficial de Baltazar me confunde... Porque... Nunca espere nada de lo que me está sucediendo.Las demás personas saludan, una señora que tiene parecido a la m
Micaela Stevens — Llevas veinticuatro putas horas jodiendome la maldita existencia, porque soy humana, porque me creíste tu enemiga, porque no me elegiste y ahora porque soy inútil!!! — lo señalo furiosa — ¿Adivina que? Has Sido tu el que ha hecho todo este show rebajandote a buscarme cuando huí de ti dejándote claro que no me gustas, no me atraes y que te quiero a kilómetros de mi.Lanza la botella haciendo que lleve mis manos a los oídos asustada, escucho el vidrio chocar y romperse contra la pared. — Pues me interesa muy poco tu opinión! — me grita rojo de la ira — aún no entiendes la magnitud de todo esto y de la responsabilidad que conlleva haber Sido elegida para mí.— Pero es que me maltratas con lo que dices!!!! Me lastima escucharte hablar de mi de manera tan despectiva! Te lo repito! Yo no fui quien así lo quiso... — Pues es lo que te toco... — Niego con la cabeza y me siento en la cama, ahora es el quien está parado frente a mi.— Debe existir alguna manera de terminar
Baltazar Licaon — No me comas, no me comas lobito.... — susurra, pero no puede hacer nada, está debajo de mi.... Es tan jodidamente pequeña, con un mordisco arrancaría su cabeza.. Veo sus ojos como la luna y decido terminar de jugar, lamo su mejilla y mientras cierras sus ojos me convierto de nuevo en humano. — Buu... — Digo sobre ella, quien abre los ojos y me ve de arriba abajo, se pone roja como un tómate y sonrío al saber que ahora estoy desnudo. — ¿Eras tú? — pregunta aún debajo de mi, entierro mi cara en su cuello y aspiro su deliciosa esencia. — ¿Quien si no...? — le digo con voz amortiguada. — Estás loco! Pensé que me ibas a comer.... — se coloca sobre sus codos lo que me hace verla aún más cerca. — Ganas no me faltan de hacerlo ¿Te gustaría? — le doy la una sonrisa de medio lado y se vuelve a poner roja. Carraspea y ve el paisaje — Pensé que te habías ido — habla bajito... — Ummm... — jamás había conocido a alguien con tantas ganas de que me aleje, mi buen humor s
Baltazar Licaon Muy temprano llamo a mi asistente Antonio para que organice mi viaje a África, anoche dormí como tenía tiempo que no hacía, era relativamente temprano cuando me acosté, así que descanse toda la noche.Bajo a desayunar y solo están las personas de servicio por los alrededores como siempre, haciendo el trabajo por el que se les paga, me gusta la limpieza y el orden.Desayuno empanadas de cazón con una taza de café con leche, antes me tomé una pequeña de café negro, es costumbre que lo primero que entre a mi estómago sea una pequeña taza de café negro con poca azúcar.— Buenos días hijo! ¿Cómo dormiste? La reina luna te bendiga — mi madre se acerca y me da un beso en la mejilla.— Buenos días madre! Que así sea! Dormí bien supongo... — me encojo de hombros.— Y la pequeña Mica... ¿Está bien? Ayer me llamo Stefany... Estaba un poco preocupada... — giro mis ojos... — Claro que está bien, ¿Porque no habría de estarlo? Y dile a la chismosa de Stefany que busque oficio y dej