Micaela StevensDios querido! Este hombre es... Es... No sé cómo describirlo.... El jet se encuentra lleno de rosas rojas como la que destroce en la entrada del aeropuerto y además hay chocolates de todos los tipos en un pequeña mesa... Veo que está observandome y le devuelvo la mirada inquisidora, es obvio que es algo nuevo para el, joder! Me está dando ternura su expresión de cachorro con falta de atención.Razca su cuello — Lo chicos me dijeron que a las humanas le gustas la flores y los chocolates, no se que tipo de chocolates son de tu agrado así que... Te mandé a traer varios, no me gusta mucho el dulce, pero....aquí hay blancos, de leche, con arroz, maní, también hay varias marcas — Niego y giro mis ojos... Mi vida se ha convertido en una loca montaña rusa! — Gracias — le digo y camino a la mesa donde están los chocolates — me gustan muchos los chocolates — No es un gusto que me daba seguido pero si comía cuando me provocaba.Ve hacia arriba y me hace sonreír — gracias rein
Me siento y espero a que vuelva, pero aterrizamos y sale del baño cuando la puerta de salida comienza abrirse.Me ignora y aunque me causa algo me molestia prefiero eso por ahora. No me dejare follar así nada más porque si.Parece que todo lo que nos rodea es selva ya que no veo edificaciones cercanas. Y me refiero a una gran selva salvaje, ya que por más que busco en las lejanias solo se ven montañas tras montañas. — Este es tu nuevo hogar, está es una pista privada del complejo y es la única manera de entrar o salir — me dice antes de guiarme al asiento copiloto de una enorme camioneta rústica.Oh Micaela! Acabas de llegar a tu prisión! Te lo acaba de decir en la cara! Sube para manejar el colocandose unos lentes aviadores, muerdo mi labios al ver el espectáculo que este hombre me ofrece, mis hormonas se revolucionan por semejante Adonis.Pero comprimo mis deseos impuros y me dispongo a observar el paisaje, no puedo ceder tan fácil solo porque está como para comérselo.Estoy en un
— Bienvenida Luna, no sabe cuánto nos alegra tenerla en la manada — su voz es amable.Mis ojos se abren sin saber que decir ¿Luna? asiento — gracias! — Por la reina luna!!! Es una niña — me sobresalto ante el grito y una señora mayor se me acerca.— No mamá, ya es mayor de edad... — Baltazar se coloca a mi lado y me sorprendo aún más al saber que la que ha hablado es mi suegra.— Bienvenida mi niña! No sabes lo felices que somos al tenerte aquí — Es muy hermosa, su cabello negro luce un bello peinado y viste un vestido recto beige, me da un fuerte abrazo y no se que decir... — mi nombre es Alexandra de Licaón.— Gra... Gracias.... Yo soy Micaela, es un gusto conocerla — veo a mi acompañante para que me ayude, no esperaba algo así... Y estoy sobrepasada. Hace poco que se de todo esto y el ser recibida como si ya fuera la pareja oficial de Baltazar me confunde... Porque... Nunca espere nada de lo que me está sucediendo.Las demás personas saludan, una señora que tiene parecido a la m
Micaela Stevens — Llevas veinticuatro putas horas jodiendome la maldita existencia, porque soy humana, porque me creíste tu enemiga, porque no me elegiste y ahora porque soy inútil!!! — lo señalo furiosa — ¿Adivina que? Has Sido tu el que ha hecho todo este show rebajandote a buscarme cuando huí de ti dejándote claro que no me gustas, no me atraes y que te quiero a kilómetros de mi.Lanza la botella haciendo que lleve mis manos a los oídos asustada, escucho el vidrio chocar y romperse contra la pared. — Pues me interesa muy poco tu opinión! — me grita rojo de la ira — aún no entiendes la magnitud de todo esto y de la responsabilidad que conlleva haber Sido elegida para mí.— Pero es que me maltratas con lo que dices!!!! Me lastima escucharte hablar de mi de manera tan despectiva! Te lo repito! Yo no fui quien así lo quiso... — Pues es lo que te toco... — Niego con la cabeza y me siento en la cama, ahora es el quien está parado frente a mi.— Debe existir alguna manera de terminar
Baltazar Licaon — No me comas, no me comas lobito.... — susurra, pero no puede hacer nada, está debajo de mi.... Es tan jodidamente pequeña, con un mordisco arrancaría su cabeza.. Veo sus ojos como la luna y decido terminar de jugar, lamo su mejilla y mientras cierras sus ojos me convierto de nuevo en humano. — Buu... — Digo sobre ella, quien abre los ojos y me ve de arriba abajo, se pone roja como un tómate y sonrío al saber que ahora estoy desnudo. — ¿Eras tú? — pregunta aún debajo de mi, entierro mi cara en su cuello y aspiro su deliciosa esencia. — ¿Quien si no...? — le digo con voz amortiguada. — Estás loco! Pensé que me ibas a comer.... — se coloca sobre sus codos lo que me hace verla aún más cerca. — Ganas no me faltan de hacerlo ¿Te gustaría? — le doy la una sonrisa de medio lado y se vuelve a poner roja. Carraspea y ve el paisaje — Pensé que te habías ido — habla bajito... — Ummm... — jamás había conocido a alguien con tantas ganas de que me aleje, mi buen humor s
Baltazar Licaon Muy temprano llamo a mi asistente Antonio para que organice mi viaje a África, anoche dormí como tenía tiempo que no hacía, era relativamente temprano cuando me acosté, así que descanse toda la noche.Bajo a desayunar y solo están las personas de servicio por los alrededores como siempre, haciendo el trabajo por el que se les paga, me gusta la limpieza y el orden.Desayuno empanadas de cazón con una taza de café con leche, antes me tomé una pequeña de café negro, es costumbre que lo primero que entre a mi estómago sea una pequeña taza de café negro con poca azúcar.— Buenos días hijo! ¿Cómo dormiste? La reina luna te bendiga — mi madre se acerca y me da un beso en la mejilla.— Buenos días madre! Que así sea! Dormí bien supongo... — me encojo de hombros.— Y la pequeña Mica... ¿Está bien? Ayer me llamo Stefany... Estaba un poco preocupada... — giro mis ojos... — Claro que está bien, ¿Porque no habría de estarlo? Y dile a la chismosa de Stefany que busque oficio y dej
Micaela Stevens¿Quien será Cassandra? No sé porque razón pero mis entrañas se remueven al haberlos escuchado hablar, no era mi intención, pero como dicen... La curiosidad mató al gato. Ha Sido su pareja por diez años... Y ahora va a viajar para estar con ella..Que cosas...Me exaspera el que me quiera mantener retenida aquí para ir con su amante, ¿Porque simplemente no me deja ir y se queda con ella?De seguro ella si está a su altura... — Micaela... — La voz de la señora Alexandra me saca del trance — estás muy distraída ¿Estás bien? — si! Lo siento, solo pensaba — le doy una sonrisa de disculpa.— Vamos a ir a conocer el pueblo y sus alrededores, me iré a preparar, Tu estás bien así, así que si quieres me esperas afuera o aquí, como quieras... — Está bien — termino de comer empanadas de cazón según me dijeron, están realmente buenas, primera vez en mi vida que como algo así. Bebo café y entro en mis pensamientos nuevamente hasta que la señora y la chica que esperaban ayer en
Está vez no actuaré sin pensar, lo haré bien y escaparé de aquí para comenzar una nueva vida lejos de todo este estrés que no elegí.Siento nostalgia al ver la universidad, si siguiera en la Vegas ya me habría inscrito para comenzar pronto el nuevo año en la universidad.El teléfono de mi acompañante se escucha haciéndola callar de lo que sea que decía, le digo que ya vuelvo y la dejo ahí hablando por el aparato.Hay una tienda de teléfonos frente a la enorme plaza y voy por uno, tengo algunos dólares encima que había guardado de cuando estaba en la vegas y euros de cuando estuve en Londres.Y pensar que solo hace quince días mi vida cambio.Para mí suerte en este lugar reciben todo tipos de monedas, así que compro un teléfono de última generación y una laptop con el nombre del lugar, gracias a Dios que aquí no hace falta guardaespaldas así que puedo comprar con tranquilidad.— Hija! Ya estaba en mis planes conseguirte una línea telefónica para que estés comunicada — la sra se acerca.